✿⁠ '𝐅𝗂𝗅𝗆 𝐎𝗎𝗍', 𝗵𝗲𝗲𝗷𝗮𝗸𝗲. ᜌ

018장.

Hee Seung se tallo los ojos con delicadeza, yacia acostado en la misma habitación de hospital en la que Jake lo había abandonado.

Pero oh sorpresa, había una silueta familiar atravesando la puerta. Hee Seung quedó estupefacto.

Jake cruzo aquella puerta con una bandeja de comida entre las manos y movimientos torpes que amenazaban con causar una accidente. Hee Seung estaba sorprendido.

— Oh, despertaste, ¿Quieres comer algo? Traje el pastel de arroz que tanto te gusta.

Jake se acercó a él con una bandeja de ramen, pastel de arroz y otras cosas que a Hee Seung le gusta comer. Era simplemente inimaginable.

Había vuelto, ¿Verdad?

Hee Seung no estaba en aptas condiciones para diferenciar entre la fantasia y la realidad. No sabía que era falso o que era real.

No sabía si Jake era real o era falso. Pero ahora mismo elegía creer que era real.

Hee Seung sonrió mientras Jake se acercaba a él lentamente mientras vigilaba sus pasos. Jake dejo la bandeja en la mesita que yacia alrededor de Hee Seung y tomó los palillos para revolver el ramen mientras este hervía.

— ¿Qué quieres para beber?

— Creo que estoy bien así, ¿Podrías quedarte?

Jake se sentó a un lado de la cama y sonrió.

— Hoy no tengo nada que hacer, ¿De qué quieres hablar?

¿Nada que hacer?

Hee Seung asintió para luego fijar su vista en la ventana que reflejaban las afueras del hospital. Ya que no podía movilizarse por sí mismo, podría pedirle a Jake que lo acompañe a dar un paseo en el jardín del hospital.

— ¿Damos un paseo?

Jake bajo la silla de ruedas con cuidado y tomó un largo camino. Allí se podrían apreciar algunas mariposas, el hospital había decorado correctamente el lugar para sus pacientes y todo con la intención de hacerles sentir bien. A salvo.

Hee Seung se sentía de maravilla, con Jake junto a él no podía pedir nada más. Sentía una sensación de familiarizadad. Jake le hacía sentir cómodo, a salvó.

Le pidió a Jake que lo llevará al jardín, este acepto con gusto y redirigió el camino. Cuando llegaron al lugar, Jake aseguro las ruedas y se sentó a un lado del mayor dónde había una banca. Lo tenía tan cerca. La mirada era asombrosa, podía ver todo Seúl desde allí.

El cielo tenía un color perfecto, las nubes estaban reunidas y parecían una sola.

— Jake.

— ¿Uhm?

Podía sentir como Jake lo miraba pero él no podía darle la cara, estaba nervioso. Sentía un poco de miedo por lo que estaba por decir, pero sentía que si no lo hacía ya, no lo haría nunca.

Heeseung se giró para verle, con la poca valentía que tenía, pronunció las siguientes palabras:

— Jake, estoy enamorado de ti.

Jake abrió los ojos sorprendido pero una pequeña risa salió de sus labios transformándose en una pasada y aterradora. Hee Seung sintió que todo su cuerpo comenzó a temblar, Jake se levantó y camino hacia Hee Seung con una sonrisa burlesca en los labios.

— ¿Qué tú que? ¿Estás bromeando? ¿Realmente crees que me enamoraría de ti? Jamás me fijaría en una persona como tú, Heeseung.

— ¿Qué-Qué? — Hee Seung se sintió intimidado, la respuesta que esperaba sin duda alguna no era está.

— Voy a ser claro contigo. No me gustas, estoy aquí porque me siento culpable por haberte lastimado, pero no estoy enamorado de ti. Jamás lo estaría.

Jamás lo estaría.

Jamás lo estaría.

Jamás lo estaría.

Jamás lo estaría.

Jamás lo estaría.

Jamás lo estaría.

•••

Hee Seung despertó sobresaltado. Su corazón latía rápido y la monitor se lo hizo saber. Mientras aclaraba su campo de visión se halló con un incómodo tuvo atravesando su garganta, inmovilizado, incapaz de mover siquiera la cabeza. Era desesperante.

Trato de dar señales de que estaba conciente, pero no parecía haber nadie en la habitación, o eso creía él.

A su lado había otra cama con otra persona. Podía ver de reojo a alguien en su mismo estado, quizás no tan grave.

Trato de hablar, pero sintió un fuerte dolor al tratar de hacerlo.

Maldita sea.

Hee Seung pido mover los dedos, pero no servía de nada si no había nadie quien lo viera haciéndolo.

¡Ayuda! ¡Jay! ¡Sung Hoon!

Era inútil, cómo podía gritar por ayuda si nadie podía escucharlo.

Hee Seung se desánimo. Unas inmensas ganas de llorar se hicieron presentes, la impotencia de no poder comunicarse ni tener a alguien a su lado eran las causantes.

Se sentía horriblemente solo.

— ¿Crees que le gusten? ¡SON DEMASIADOS PELUCHES NI-KI!

— ¡SON PARA SUNOO Y HEE SEUNG! NO LOS TRAJE PARA TI.

— ¿Pueden dejar de discutir? Van a alterar a Heeseung y a Sunoo. Hagan silencio.

Entonces era Sunoo.

Hee Seung dejo caer unas cuantas lágrimas, ahora podía recordar bien lo que había pasado.

Todo era su culpa.

Mientras los demás entraban, Jung Won se adelantó para checar que todo estuviera bien, al observar con detenimiento la cama de Hee Seung se sorprendió al verlo despierto.

— ¡Chicos! ¡Hee Seung despertó!

Hee Seung pido escuchar las pisadas frenéticas de los chicos mientras corrían dentro. Los observó con detenimiento, cada uno más sorprendido que el otro.

Hee Seung comenzó a llorar.

— ¿Hee Seung? ¿Qué te pasa? ¿Te duele algo? —Jay se acercó a su mayor con preocupación. — Ni-Ki, llama al médico.

— ¡Sí-Sí!

El menor salió corriendo de la habitación. Hee Seung observó a sus amigos con arrepentimiento, tenía ganas de morirse en ese momento. Ahora, solo podía llorar.