𝐆𝐑𝐄𝐄𝐊 𝐌𝐘𝐓𝐇𝐎𝐋𝐎𝐆𝐘 ₊ ˚ ・ ₊ ✧ 🏛─── greek mythology yandere

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- “Sal de aquí, antes de que te expongan, Dioniso”, escupiste, mirando al dios del vino.

- Dioniso ignora tu orden y te provoca colocándose en una posición más sugerente.

- Está acostado boca abajo con el mano izquierda en la mejilla mientras se enfrenta a ti.

- “¿No crees que deberías hacer algo con mis modales?”

- “¿Por qué, tu padre se olvidó de enseñártelos o estaba demasiado ocupado jugando con las mujeres?”

- Dioniso te sonríe, satisfecho por tu actitud defensiva.

- “Apolo se ha conseguido una esposa leal, pero no te merece” levantas una ceja mientras se aleja de tu cama.

- “Apolo es leal, amable y respeta mi privacidad a diferencia de algunos”, implicas.

- Dioniso se mueve hacia ti, pero no te mueves ni una pulgada.

- En el momento en que está de pie, frente a ti, le estrechas los ojos.

- “Puedo darte un placer intenso más que nunca” Dioniso pone sus manos sobre tus mejillas.

- “El matrimonio no se trata de placer sexual, el matrimonio se trata de respeto y paz”, la deidad morena trata de mantener su risa.

- Pero la deja salir, pensando que estás bromeando.

- “El matrimonio se trata de placer sexual, ¿Por qué alguien más querría comprometerse con alguien si falta en esta parte?”

- Empujas sus manos lejos de tu mejilla y le empujas la frente con el dedo índice de forma burlona.

- “Tal vez, porque su pareja tiene una personalidad, algo que te falta claramente”

- Mientras tú y Dioniso discuten, una voz alegre dice tu nombre a través del templo.

- “Y/n, ¡Tu querida y hermosa madre está aquí!”

- Afrodita.

- Dioniso gira sus ojos al escuchar su nombre, pero lo toma como su oportunidad.

- Cuando Afrodita entra en tu habitación, Dioniso te besa a un lado de tus labios.

- “Deberíamos tener sexo más a menudo”

- Con eso, Dioniso pasa junto a una Afrodita sorprendida mientras casi se le cae la boca.

- Afrodita se acerca a ti, mientras empiezas a ponerte nerviosa.

- “Esto no es lo que piensas, yo...”

- Afrodita pone su mano en tu boca para evitar que hables más.

- “Esta bien, no hay necesidad de explicar nada, querida, lo hago todo el tiempo, nadie puede controlar sus deseos”

- La deidad rubia fresa exclama, antes de quitarte la mano de la boca.

- “Bueno, Dioniso fue el que me besó y no pasó nada”

- Afrodita solo te sonríe, antes de poner sus manos alrededor de tus hombros y tirar de ti hacia ella.

- “Esta bien, no hay necesidad de mentirle a tu madre, guardaré tu secreto, hija traviesa”

- Presionas los labios juntos, decidiendo que no hay esperanza de corregir el malentendido.

- “¿A dónde me llevas?” preguntas por ti.

- “Vamos a espiar al hijo de Zeus, Perseo, escuché que es guapo y tiene un gran...” Afrodita se inclina hacia tu oído.

- “Corazón”