Capítulo 12

3K 520 451
                                    







Xiao Zhan, de no más de veinte años, había experimentado por primera vez lo que era encontrar una pareja, querer todo con ese alguien; anhelar, compartir y desear...

Amar.

Ayanga era el alfa perfecto ante los ojos del omega. Él era un hombre extremadamente guapo, varonil, atento y cariñoso, de una familia acomodada y conocido por los Xiao, con estudios sobresalientes y un futuro prometedor como agente de inteligencia del gobierno, ¿existiría algo más en Ayanga que Xiao Zhan no podía ver al estar enamorado?

Era lo poco que el omega sabía del alfa pero le fue suficiente para sentirse atraído y enamorado a su edad.

Xiao Zhan decidió entregarse al hombre que amaba en uno de sus celos, porque el omega instintivamente sabía que Ayanga era la pareja con la que deseaba pasar el resto de su vida, el alfa indicado para copular por primera vez, al que debía rogarle que lo llenara de su semen y lo anudara para luego portar su marca.

Tener hijos.

Qué ingenuo había sido.

A la mañana siguiente del acto sexual, el omega estaba feliz y satisfecho, Ayanga había superado con creces sus espectativas.

Xiao Zhan no solo le había entregado su virginidad a ese hombre, él se había mostrado tal cual era, sin temor alguno de que el alfa luego le pagara de manera inesperada.

Ayanga no lo había marcado ni anudado tal y como él esperaba, ¿había algo malo en él?

Quizás se apresuró en proyectar un futuro a causa del calor de su celo, su parte animal tomaba un papel importante los días anteriores y posteriores a su etapa más fértil, los síntomas se vuelven más difíciles de controlar, peor aún, en compañía de de tu supuesta pareja.

-¿Qué harás hoy? -le preguntó el omega al alfa cuando lo vio ya vestido al pie de la cama, Xiao Zhan yacía desnudo y apenas cubierto por una sábana.

-Tengo que salir de viaje -suspiró-. Por trabajo. Tú sabes a lo que me refiero...

-Mn -asintió tras un bostezo-. ¿Cuánto tiempo estarás fuera esta vez?

-Zhan -Ayanga caminó hasta sentarse junto al omega y le acarició la cabeza, el omega ladeó su cabeza complacido-. Tú sabes de qué va mi trabajo. Me temo que este viaje será prolongado... -le recordó con tono serio.

-¿Un mes? No hay problema -le restó importancia tratando de ocultar la desilusión que sentía mientras sentía la pesada mano del alfa rascándole cariñosamente detrás de una de sus orejas-. Puedo esperar por ti. Yo le haré los arreglos necesarios a tu motocicleta si es eso lo que te preocupa. Ya me has enseñado a manejarla y prometo no chocar con ella -bromeó.

-Zhan -el alfa besó sus labios-. Quizás no regrese por muchos años -Ayanga se sinceró.

-¿Q-Qué?

-Cuando me conociste, sabías muy bien a lo que me dedicaba.

-Sí. Lo sé. Pero...

-Nos mantendremos comunicados. No perderemos el contacto. Lo prometo. Y por la motocicleta, te la obsequio. Tómalo como un regalo.

-No puedo aceptarla.

-Entonces la cuidarás por mi hasta que regrese. Mis hermanos no son de fiar.

-Está bien. No te preocupes. Yo te esperaré y mantendré a salvo a tu nena...

-Nuestra -afirmó el alfa y volvió a besarlo con mayor intensidad.

LOBO [YiZhan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora