La caída de las joyas (las joyas de la princesa)

CAP III

Saraí: mis más sinceros saludos

Se inclino ante todos los de la mesa y se sentó, llegaron sus padres y empezó la cena, todo iba normal hasta que madame empezó hablar sobre el síndrome del taco de la reina, todo se había descontrolado hasta que el rey hablo

Saraí: majestad si me permite, traerán uno de sus postres favoritos así que mejor dejemos todo y comamos en paz

Jaider: tienes razón Saraí

Todos la observaron y trajeron los postres

Jaider: la única que no hace un escándalo es ella, Kamil y haveron

Ella solo asintió y comieron, hablaron del festival del sol

Roserice: quiero nominar a ariana, que bendiga al pueblo

Madame: ¡protesto! ¿Cómo puede una princesa, y no un príncipe legítimo, llevar a cabo esa función!

Jaider: suficiente, rose podrías decirme ¿Por qué sugieres eso?

Roserice: por supuesto, en primer lugar, los logros de ariana superan a los de sus hermanos y...

Saraí se levantó de la mesa

Saraí: creo que yo debo irme, no me siento bien, permiso majestades

Se fue de ahí Saraí hacia su cuarto y siguió con sus trabajos, decidió ir a tomar agua cuando vio a bavilon herido

Saraí: ¡bavilo!

Fue corriendo hacia él y lo empezó a curar

Saraí: ¿dime que paso? ¿Por qué estas así?

Le siguió curando y lo miro

Saraí: sabes que cuentas conmigo ¿verdad?

Bavilo: si majestad

Saraí: dime por mi nombre, tienes derecho bavilo a parte somos hermanos

El la miro y sonrió, se fue dejándola sola, ella mientras fue a tomar agua y a descansar

Al día siguiente todo estaba como siempre, cada uno, con sus qué haceres, Saraí estaba con los niños enseñándoles a leer, hasta que vio a un joven entrar de aspecto encantador pero sencillo ojos verdes esmeraldas y un cabello negro y lacio, en la miro sorprendido y sonrió

Niña: majestad y ¿ qué paso?

Saraí: ah sí entonces

Al terminar se fue a su castillo no sin antes dar el pergamino a los trabajadores para que  Empiecen a trabajar, llego al patio y empezó a recordar a Edward, miro tras suyo y encontró al mismo chico y mostro una hermosa rosa blanca, Saraí sonrió y se acercó abrazándolo

Saraí: te extrañe tanto Edward

Edward: la espera valió la pena princesa

Se miraron y empezaron a jugar como cuando eran pequeños y disfrutar el tiempo que no estuvieron juntos

Saraí: ¿vendrás al baile?

Edward: me temo que no iré, pero vendré cuando la luna este en su resplandor en el agua

Saraí: te espero con ansias Edward

Se fueron, Saraí fue arreglada para el baile, un hermoso vestido color rojo con decoraciones negras, se quedó junto con su padre

Jaider: es bueno que estés aquí Saraí

Saraí: es un honor majestad

Jaider: Saraí yo...