he vuelto hacer feliz (kookmin)

5.4K 427 18
                                        

Cuando Jungkook despertó, vio que Jimin ya no estaba a su lado. Se levantó rápidamente y fue a preguntarle a Taehyung si lo había visto. Él le respondió:

—Ay, Jungkook, Jungkook... —dijo Tae con una sonrisa burlona—. Ahora sí te interesa mi amigo, ¿verdad? Jajajaja... Jimin ya se fue con Candy.

—¿Qué? ¿Por qué se fueron? ¿No se quedaron a desayunar?

—No, Jungkook, lamentablemente no. Dijeron que irían a hacer unas cosas.

—Oh... está bien. Supongo que mañana veré a Jimin en la universidad.

Jimin estaba feliz hablando con Candy, hasta que un chico se les puso en frente.

—Disculpa, vamos a pasar —dijo Candy con cortesía.

—Oye, maricón de mierda... Me enteré que bailaste con Jungkook ayer... ¿Estás volviendo a Jungkook maricón igual que tú? Me das asco... —dijo el chico con desprecio.

Jimin solo agachó la cabeza y no respondió nada.

—¡Oye! ¿Qué te pasa, imbécil? ¡Vete de aquí! —gritó Candy, furiosa.

—¿Y tú, perra, defendiendo al maricón?

—¡¿Cómo te atreves, idiota?!

Candy le dio una cachetada al chico, lo tomó del brazo a Jimin y se fueron. Jimin comenzó a sollozar.

—Jimin, tranquilo. Ya pasó, tranquilo, ¿sí? —dijo Candy mientras lo abrazaba.

Jimin la abrazó fuerte y empezó a llorar más intensamente.

—¿Por qué... por qué tienen que ser tan malos conmigo...? Yo no quiero volver así a Jungkook...

—Tranquilo, Jimin. No estás volviendo así a Jungkook, si no, él no te hubiera dejado acostarte en su cama a dormir. Tranquilo. Vamos a comer un rico desayuno y luego vamos a tu casa a ver unas películas. Tae me dijo que vendría después.

Candy y Jimin fueron a desayunar.

—Está muy rico —dijo Jimin.

—Siii, ¡demasiado rico! —respondió Candy con una gran sonrisa.

Después de unas horas, ambos fueron directamente a la casa de Jimin.

—Cariño, ¿ya volviste? —preguntó Eun-ji con dulzura.

—Sí, mami.

—¡Ohhh, Candy también estás aquí! Entra, pasa adelante, hija.

—Gracias, señora Eun-ji —respondió Candy.

—Jimin, ahora dime qué te pasa. Usualmente me hablas más cariñoso y hoy solo un "hola, mami"...

Jimin saltó a abrazar a su mamá y empezó a sollozar.

—¿Qué pasó, mi bebé? Dime, mi amor, ¿qué pasó, mi niño?

—Po... po... ¿por qué, mami...? Son tan crueles... siempre me dañan con sus horribles palabras...

Candy no aguantó más y comenzó a llorar en silencio, tapándose la boca con la mano. Le dolía ver a su amigo tan mal, de esa manera.

—Cariño... bebé, yo sabía que no sería fácil estar en una nueva universidad... pero ¿sabes qué, cariño? Eres el niño más fuerte y valiente que conozco. ¿Escuchaste, mi amor? ¡Eres el más fuerte! Recuerda, mi vida: tú eres especial y por eso te amo. Eres la luz que ilumina mi vida... Eres todo para mí, y yo te protegeré, mi amor, ¿sí?

Jimin se sentía mejor con las bellas palabras de su madre. Ella era su lugar seguro... pero a veces Jimin se ponía a pensar: ya era un adulto, y su madre estaba envejeciendo... ¿quién sería después su lugar seguro? Por eso empezó a llorar aún más fuerte.

he vuelto a ser feliz _kookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora