Hechizadas - Michaeng

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Había pasado ya una semana en la que la Academia Warren había quedado en las penumbras gracias a Taeyeon que no hacía más que atormentar a los estudiantes, que aunque los maestros les habían pedido que se marcharan estos se negaban.

Así que la maestra Kang había colocado nuevos horarios en los que los estudiantes asistían a sus clases y luego iban a sus habitaciones.

Excepto Chaeyoung que iba a la Biblioteca en busca de respuestas, recordaba a Mina junto a ella mientras estudiaban e imaginaba que estaba allí acompañándola.

Sus amigas solían unirsele aveces, pero sabían que no podían hacerlo seguido porque Taeyeon sospecharia sus intenciones.

Justo ahora  caminaba sola hacia la biblioteca pero un moviemiento extraño en el patio la hizo detenerse en una de las ventanas. Después de unos momentos de concentración se transportó a aquel lugar, encontrándose con Nayeon y Jeongyeon que saltaron en su sitio cuando apareció frente a ellas.

-Oh Chaeyoungie! - Exclamó Nayeon - Estás bien?

-Si - respondió correspondiendo el abrazo que le daba su amiga - Que hacen aquí?

- Hola Chaeyoung - saludo Jeongyeon - Creo que sabemos la manera de saber donde está Minari - dijo Haciendo crecer la esperanza en la menor

  Se transportaron a la habitación del espejo y esperaron pacientemente a que estuviera completamente vacia.

- Escucha Chaeyoung la clave es que te concentres - comenzó Jeongyeon - Sabemos que Mina ya no tiene sus poderes y por lo tanto es más complicado lograr verla. - explicó Jeongyeon - Pero.. Si de verdad lo deseas ella aparecerá

- Esta bien - dijo Chae ubicándose frente al espejo, cerró los ojos y se concentró plenamente en su chica.

-Deseas verla? - preguntó y Chaeyoung contestó positivamente - Pues está justo ahí - Dijo Jeongyeon haciendo que la menor abra sus ojos

-Minari - Chaeyoung observó con sus ojos brillosos a Mina que se reflejaba en el espejo frente a ella - Es Minari!

- Aunque su cabello es negro ahora definitivamente es ella - expresó Nayeon

- Mina.. - Chaeyoung estiró su brazo para acariciar el espejo, podía verla, se encontraba en una habitación, mientras leía algo, como había mencionado Nayeon su cabello ahora negro y Chaeyoung concluyó que se veía igual o más hermosa

-Chaeyoung espero haberte ayudado - dijo Jeongyeon - Lamento lo que pasó aquel día.. Yo solo me dejé llevar, pero Mina no me correspondió en lo absoluto.

-Gracias Jeongyeon por todo - Dijo Chaeyoung entonces - me has ayudado como no tienes idea

-Esta bien también deseo que vuelva ¿Que harás para contactarla?

- Romper Reglas y ganarme una expulsión probablemente - respondió y les sonrió - Ella volverá lo prometo.

-Estás segura de sacrificar tu lugar aquí?

-Por su puesto

-Está bien - Jeongyeon la abrazo y luego se unió Nayeon - Cuidate y suerte.

Se despidieron después de aquello y Chaeyoung se quedó ahí, observando a la chica frente a ella. Se inquietó un poco cuando observó una lágrima rodar por la mejilla de Mina mientras cerraba su libro y se recostaba sobre sus brazos.

Desde que se fue Chaeyoung pensaba como vivía Mina, y viendo a la chica en el espejo supo que Taeyeon había cumplido con hacerla miserable.

No tenía ningún plan, pues el hechizo que había usado El Gran Mago para vencer a Taeyeon en el pasado ya no era efectivo contra ella. Su legado la había derrotado con su fuerza, pero está vez ella había ganado la batalla.
¿Que podría hacer para derrotar a la ahora más grande bruja de todas?

Sin embargo Chaeyoung sabía que tenía que hacer algo por la chica que amaba, así que dando un último vistazo al espejo fue a su habitación y se alistó para dormir.

Al día siguiente caminó junto a sus amigas a sus respectivas clases.

A la salida se reunió junto a Jihyo en la biblioteca

- Taeyeon está creando un hechizo que robará la magia de todo el lugar - contó Jihyo preocupada - Su plan no sólo es obtener toda la magia si no que también destruir el mundo no mágico.

-Pero ¿Porqué?

- Descubrí que.. En realidad ella no nació como un ser mágico - relató Jihyo - Al parecer obtuvo sus poderes de uno de los hechiceros malvados que escapó hace mucho tiempo de la prisión

- Crees.. Que es es su magia la que controla a su verdadero ser?

- No lo sé - respondió Jihyo - Pero.. Si es así podemos sacar su lado humano. Sin embargo no se como lo haremos.

- El hecho de quiera destruir el mundo no mágico quiere decir que le pasó algo muy malo  allí y por eso quiere destruirlo.

- También lo pensé

- Buscaré la manera de averiguarlo.

-Chaeyoung.. Creo que necesitamos a Mina aquí, ella sabía mucho - Jihyo calló unos segundos - Yo.. No creo que haya perdido porque era más débil si no porque había algo que la atormentaba.

Chaeyoung sintió un nudo en su garganta. Acaso era su rechazo la causa de lo que pasó?

Cuando Jihyo se despidió fue a su  habitación por su sombrero le serviría para que las personas no la vean en el mundo no mágico.
Luego se dirigió a la habitación del espejo   pudo ver a  Mina. Así que concentrándose logró aparecer donde estaba ella y ahora la tenía solo a unos pasos frente a ella.

Se acercó un poco hasta la banca donde se encontraba la ahora pelinegra que observaba a los niños jugar en los columpios del parque en el que se encontraba.

Claro que no podía verla porque traía puesto su sombrero así que solo se sentó a su lado para observarla.

Mina sentía una mirada sobre ella, así que dando un vistazo rápido al lugar decidió que lo mejor era volver a casa.

Caminó tranquilamente hasta entrar a una tienda para comprar un poco de helado y después salió para continuar su camino a casa pero se detuvo al observar a una chica bajita vestida de forma extraña tratando de bajar algo de uno de los árboles del parque.

Usualmente ella ignoraba a todos a su alrededor, pero esta vez decidió acercarse.

- Necesitas ayuda con eso? - preguntó paralizando por un momento a la persona que le daba la espalda

- Mi.. Mina - murmuró la coreana dándose la vuelta por fin y viendo frente a ella a la pelinegra que la observaba curiosa.