Álvaro Fidalgo Amor Del Bueno

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Un mes después

Narrador Omnisciente:Álvaro había seguido con su vida, jugaba en el equipo más famoso, maravilloso y odiado de México, era muy bueno y guapo,pero en el siempre estaba la duda de ¿Quién era esa chica? Y el¿por qué nunca lo busco?

Por otro lado Sofía había seguido normal sin pensar en ese chico hasta hace unos días cuando...

Narra Sofía:
Maldita sea no me a bajado,se supone que tenia que bajarme 4 días después de mi aventura pero no, debo ponerme en contacto con el idiota y afrontar las consecuencias.
Busque en el cajón la nota y por suerte aun la tenía llamé al número que venía escrito

—Hola habla Álvaro—con que se llama Álvaro, su asentó es bastante peculiar suena como un Español

—Hola, no me interesa tu nombre, Soy Sofía con la que te acostaste hace cómo un mes y solo dejaste una nota patán

—Tranquila joder, tu fuiste la que llamo—di un suspiro

—No me a bajado—dije abrumada

—Lo siento pero no soy terapeuta—voltee los que ojos

—Creo que estoy embarazada tarado y el último con el que me acosté fuiste tu tristemente

—la puta madre ¿No es una broma?

—No, no es una broma—escuche un grito ahogado de parte del tal Álvaro

—¿Y para que me llamas?

—Se nota que no eres el mas inteligente, no tengo el valor para ir sola al hospital y hacerme la prueba

—Ahh lo que quieres es que vaya contigo ¿no?

—Sí—escuche una risa de fondo

—Bien te veo en la dirección que deje en la nota

—Está bien, Adiós

Colgué la llamada y me apresure a buscar la dirección
Era un edificio lujoso ¿con quien me metí?

Me cambié con algo muy básico, me puse unos leggins deportivos color negro, un top negro y una sudadera arriba, me hice una coleta alta me puse tenis blancos, agarre mi café y baje al estacionamiento donde busque mi camioneta me subí y emprendí mi viaje rumbo a la casa del tal Álvaro

Maneje durante unos 20 minutos hasta que llegue, había un guardia el cual me obligo a estacionarme

—Buenos días señorita

—Buenos días, me deja pasar

—¿Trae invitación o vive aquí?

—No, pero vengo rápido, digamos que el posible padre de mi posible hijo este aquí así que si no me deja pasar por las buenas entro por las malas

—¿Señorita a quien viene a ver?

—Vengo a ver a Álvaro—el señor cambio su cara a una más amigable

—Ahh sí si el señor me pidió que la dejara pasar adelante—comencé a manejar hacia adentro había un estacionamiento afuera y deje ahí mi camioneta.

Metí mi teléfono a mi sudadera junto con mi cartera, prendí un cigarrillo y baje del auto.

Comencé a caminar hacia la recepción donde había una señorita

—Buenos días

—Hola buenos días ¿cómo puedo ayudarte?

—Vengo a ver a Álvaro, así que si me dice su piso y el numero de su departamento sería lo mejor