nada es igual sin ti (Mirabel AU)

cap.3

Ya había pasado dos años desde que nuestra protagonista había llegado al horfanato casi un mes para ser exactos

Pov. Mirabel

Todo a ido mejor desde que llegué aquí resulta que en lugar que estamos es Bogotá, gracias a la señora Cecilia mis heridas sanaron pero a un así que do una gran cicatriz en mi brazo y al gunas medianas en el pecho, pero nada grave gracias a Dios y por supuesto al señor Oscar.

Un nuevo día a comenzar para nuestra protagonista.

S.ñ Cecilia: buenos días niños- aplaudiendo-.

Niños: Buenos días señora Cecilia.

S.ñ Cecilia: bueno como saben es hora de levantarse, como saben, toca repartir los deberes-sonriendo-como saben los menores de edad les toca repartir los platos y acomodar las mesas para desayunar.

Niños de 5 a 8 años: ya vamos señorita- terminando de alistarse-.

S.ñ Cecilia: ahora los de 9 a 12 les toca ayudar a servir la comida.

Niños de 9 a 12: listos para ayudar– saliendo delos cuartos-.

S.ñ Cecilia: y por último Juan, clara, Héctor y Mirabel– mencionando alos únicos cuatro adolescentes– les toca a ayudar a preparar el desayuno.

Juan: ya voy señora– saliendo corriendo–

Clara: yo voy a intentar no quemar nada.

S.ñ Cecilia: está bien clara ten cuidado con el aceite.

Héctor: voy a ver qué no queme nada.

S.ñ Cecilia: está bien Héctor.

Mirabel: a ya voy señora– riendo–

S.ñ Cecilia: está bien mira, pero ten cuidado con tus cicatrices, mi vida

Mirabel:–volteando–esta bien señora.

Todos los niños en el horfanato a ayudaban en lo que podían y todos bien sincronizados.

Clara: que asta que ya llegas bella durmiente- burlándose de la de rizos-.

Mirabel:ja ja ja , que gracioso
Cenicienta- burlandose-.

Héctor: chamacas pueden dejar de jugar...- reclama con seriedad -.

Ambas: perdón

Clara:–susurrando– claro Romeo–.

Héctor: !!Que dijiste¡¡– agarrando el amasador–

Clara: nada

Héctor: más te vale marrana.

Clara: marrana tu amada.

Héctor: ahora sí ya valiste mierda– agarrando una espátula–. Juan suéltame–forcejeando.

Juan: no

Héctor: pinche clara, puedes insultar a mi hermana o a mi mamá pero nunca mi mariposita- lanzando la espatula–.

Clara, Juan y Mirabel: !!Que¡¡

S.ñ Cecilia: Chicos el desayuno está listo–gritando–.

Los chicos: ya vamos

Héctor: mira no... Es Cierto yo sol-.

Mirabel: Héctor... hablaremos después.–se va hacia el comedor–.

Héctor: –pensamiento– estúpida clara de fruta.

Después de la pequeña pelea que tuvieron después de desayunar, los niños que van estudiar se alistan para la escuela y eso significa para los adolescentes una cosa...

Juan: no entiendo por qué tenemos que hacer esto –poniendo una mochila a un niño– todos los días.

Clara: por qué por tu "magnífica idea" nos metió en problemas y estamos aqui–dandole su lunch a un niño–.

Juan: enserio cuando se convirtió un delito robar buñuelos– poniendo una corbata a un niño–.

Clara:no se pero, espero que Héctor y Mira no la estén pasando mal.

Juan:eso crees después de lo que pasó está mañana...–levantando una ceja-

Clara: bueno punto

De mientras en otro lado...
Mirabel y Héctor lavaban los platos del desayuno.

Héctor...–menciona mirabel–.

Mira... Lo que dijo clara está mañana era mentira... Emm cómo se le dice a su fue de... Chill...–menciona nervioso–.

Mirabel:emm... Te quiero decir algo, tu me gustas igual...– menciona sonrojada–.

Héctor:enserio?!– menciona sorprendido–.

Mirabel:si mi querido oso polar–le da una palmada en el hombro y se va dejando a Héctor como un tomate–

Después de que mirabel se fuera, dos personas lo esperaban.

Clara: y que tal..., pa cuando los hijos– burlonamente–.

Héctor: cállate clara

Juan: clara cálmate por favor, que es hora de dormir.

Clara: está bien pero que conste que tú me lo pediste e cabron

Juan: como sea

La hora de dormir había llegado para todos.

S.ñ Cecilia: buenas noches a todos–sonriendo–.

Todos: buenas noches señorita Cecilia.

Después de que apagaron las luces algunos niños se acercaron a Mirabel...

Una niña: señorita mirabel... Puede volver a contarnos la historia de los madrigal–preguntando lento pero cariñoso–.

Mirabel: por supuesto que sí