𝙿𝚊𝚍𝚛𝚎𝚜. 2 [KM 국민]

1

Soobin - 25
Taeyang - 18
Min ho - 15
Young - 10

ᰔ

- Taeyang te doy dos segundos para que te levantes o haré que  Yuki te orine la cabeza.

Maldita escuela. No importaba quien haya sido el de la brillante idea de crear la escuela, es un ser miserable y esperaba que se estuviera retorciendo en el infierno.

- ¡Taeyang! Estoy hablando en serio. – claro que hablaba en serio. Usaba el mismo tono de voz que cuando su padre se intentaba pasar de listo.

- Cinco minutos más... - se queje volviéndose para quedar boca abajo.

- ¡yuki! Gatita, venga acá. – grito su madre llamando al animal.

Maldita gata. Maldito Yeonjun por regalarle un animal a su hermano. Y maldito Min ho por ponerle un nombre raro a su gata.

Intento volver a dormir hasta que sintió como le lanzaban agua fría que lo hizo ponerse de pie inmediatamente mientras miraba asustado. En el marco de la puerta se encontraba su mamá mirándolo con una sonrisa malvada, y también su hermana menorque tenia un balde en sus manos.

Maldita Young.

- Hazle caso a mamá o la próxima vez te inundo la habitación. – dijo su hermana para luego retirarse.

- Esa es mi niña. – hablo orgulloso el rubio, por el cual al parecer no pasaban los años ya que mantenía su bellesa. Luego lo miro. – Aprende a dormir con pijama, por favor.

Dicho eso se retiro dejándolo aun atontado por el agua. El minimo necesitaba unos trinta minutos para despertar completamente. Se miró viendo sus bóxer empapados. Si Young lo iba a despertar de esa manera siempre, iba tener que ponerse algún pijama como su madre le había indicado.

No le encontraba el caso de usar pijama, el dormia solo, hacia calor y nadie lo iba ver así y si lo hacia alguien, ese alguien seria su familia ¿Dónde estaba el problema?. Tembló un poco por el frío que sentia y camino hacia la ducha para alistarse.

Taeyang ya no era tan energético como antes, tampoco hablaba mucho y hacia preguntas por todo, había crecido bastante, media casi lo mismo que su hermano mayor. En la escuela era un alumno promedio, no resaltaba ni tampoco le iba tan mal, aunque quisiera tener mejores notas. Habia salido con un par de chicas y chicos pero nunca habia llegado a tener una relación formal o enamorarse de verdad. Su padre hacia bromas sobre que cuando sintiera abejas en su estómago por una persona, esa era la persona indicada. Aunque al le pareciera ridiculo y poco romántico, ¿No sé suponían que eran mariposas?.

Soobin le seguia el juego sobre las abejas, aunque estaba seguro que su hermano si estaba enamorado. Había conocido a Yeonjun en su adolescencia y ahora siendo adultos jóvenes aún permanecian juntos, no sabía como el pelirrojo soportaba el carácter de su hermano mayor. Para el, ambos eran el uno para el otro, no sé imaginaba a Soobin sin Yeonjun o a Yeonjun sin Soobin. ¿El podria encontrar un amor asi? Solia aburrirse rápido de sus amores pasajeros, no creía que podría perdurar tanto como sus padres.

Cuando estuvo listo y con el uniforme de la escuela puesto, bajo a desayunar. Era su último año de escuela para luego continuar la universidad, aunque no decidiera que es lo que queria estudiar, sus padres no lo presionaban respecto a eso. Ellos habian dicho que podia tomar la decisión que quisiera y en el tiempo que estuviera listo, no tenia que hacerlo todo como la sociedad esperaba que lo hiciera.

En el comedor se encontraba toda su familia. Sus padres habían decidido no tener más hijos después de Young y aunque le gustaba tener una bebé en la casa, agradecía que fuera la última. young habia terminado con todas las energias de su familia, desde pequeña habia sido un torbellino y no habia cambiado en nada. Se sentó frente a Min ho y lo miro, su pequeño hermano vestia su uniforme, su cabello peinado y sus anteojos, Min ho era su bebé, a pesar de que ya tuviera 15 años, para el y su familia siempre seguiría siendo su bebé. Nadie nunca podría ponerle un dedo encima, porque tenía tres grandes hombres dispuestos a pelear por el.