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-Battraaaaa
-Que?
Dijo el chico de menor estatura mirando fijamente a la chica de orbes anaranjados.
-Tu...agh, olvídalo no se para que me molesto en decirte algo que seguramente no te interesara...y que no aportaras nada por ser... débil...
Un gran silencio reinó el lugar y la mirada de odio del de orbes rojos no tardó en aparecer, sabía lo que la contraria hacía, ella lo quería utilizar para alguna misión loca y suicida.
-Qué es exactamente?
-uh?
-Dime de una maldita vez que es lo que necesitas que haga maldita perra desquiciada
-Sabia que podía contar contigo!-Menciono sonriendo y dando unas carcajadas por lo último que salió de la boca del de orbes rojos-
-Ufff...Cuanto más lidiare contigo?
-No lo sé, las veces que "reencarnes" pequeño
-Bueno...Ya dime lo que tengo que hacer
-Pues, empezare por lo más fácil...
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Ahora se arrepentía de todo, ya no quería estar ahí enfrente de esos putos rayitos locos, admitiría cualquier cosa, si era débil, si tenía un carácter de mierda,si era un fresa, si era Una basura, si era lo peor del mundo, todo lo admitiría aunque fuera mentira, ya no quería estar ahí sientiendo como lo rompen.
Acaso algo tenían contra su cuerno?, eso se preguntaba debido a que uno de aquellos hombres de dorado intentaba romper su cuerno y se cansaba de esquivar todo eso y solo por petición de Biollante.
