Capitulo 2. La primera tarea.

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—¡Aaaaaa!

Me caía vertiginosamente hacia abajo. Cada vez que tocaba las nubes que formaban el remolino, se dispersaban, pero la brecha se llenaba de inmediato. Parecía que el remolino era interminable y no acababa en el suelo, sino directamente en el infierno.

Dejé de gritar, acostumbrándome a la caída, y empecé a mirar a mi alrededor. En todos lados se veían siluetas de ángeles, demonios y neutrales que, como yo, fueron enviados a una misión.

Un chico rubio voló junto a mí. Cruzamos miradas por un momento. De repente, él se dió vuelta para verme y sonrió.

—Neutral.

Él lo dijo como un hecho y por alguna razón se rió, luego se dió la vuelta y buceo hacia abajo, para acelerar.

"Que chico más raro".

La velocidad empezó a disminuir, la corriente de aire me hizo rodar las piernas hacia abajo; y de pronto apareció la tierra.

El aterrizaje fue suave.

La gente corría de un lado a otro, apresurada por sus asuntos. No entendían la suerte que tenían de estar vivos, de poder regresar con sus seres queridos en cualquier momento.

Respiré profundamente, extendí los brazos y me reí.

"Estoy viva. ¡Viva!"

Nadie veía las alas a mis espaldas, y mi apariencia era completamente diferente para ellos. Y aún así, estaba en casa.

—¿Que hago?— murmuró una chica.

La sonrisa desapareció de mi cara.

"La tarea. Tengo que cumplir con mi tarea"

Mi mirada se paró al instante sobre una chica. Era ella, a quien había escuchado.

"¿Que me dijo el ángel Fencio?..."

...

*Recuerdo*

—Elizabeth— el ángel Fencio me miró con los ojos entrecerrados, agitó la hoja y la leyó de nuevo. —Tan pronto como toques la tierra, tomarás la apariencia de un extraño. Nadie verá tus alas, y no te recomiendo usarlas. Tendrás dos horas para cumplir tu tarea. Esto es más que suficiente. Tan pronto como completes la tarea, mira al cielo, concentraré y piensa en el remolino. Ello te traerá de vuelta a la escuela. Si te quedas más de dos horas, el remolino te arrastrará de vuelta. Lo quieras o no. No pierdas el tiempo. Bueno, la tarea...

Me miró directo a los ojos, para asegurarse de que entenderé su explicación.

—Una chica, Verónica, se enfrenta a una elección. Ella tiene que ir a un examen, de lo contrario será expulsada de la universidad. Esto es muy importante para su futuro. Pero, el novio de Verónica tiene que irse del país, si ella no lo acompaña al aeropuerto, se separarán. Entonces, ¿hacia donde la empujarás, Elizabeth: hacia un futuro prometedor o hacia un amor fugaz?

—¿Y me enviará a la tierra, así, tan sencillamente?— pregunté.

—Tan simple.

—Pero yo nunca... yo solo...

—Eso no me importa nada.

*Fin del recuerdo*

...

"No me importa... ¡Uf!. ¿Y qué debo hacer ahora?"

Verónica estaba parada cerca de la puerta, agarrando frenéticamente sus cuadernos. Ella no se atrevía a irse, pero tampoco a entrar. Necesitaba acercarme a ella y hablarle.

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⏰ Última actualización: Oct 27, 2022 ⏰

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