LA REENCARNACION DE LA SULTANA HURREM

Muerte de una sultana

Hurrem se preparaba como lo hacia todos los jueves, esa noche iba con el Sultan, habia tenido muchos problemas ultimamente por culpa de un nombre, Firuze, esa mujer se estaba llevando al amor de su vida lentamente, dejandola de lado, pero no tendria que pensar en nada esta noche, porque iria con el.

Criada: Sirvase sultana.

Hurrem: ¿Tienes noticias sobre la sultana Hatice? me pregunto que paso... nadie puede quitarme la alegria esta noche.

Hurrem despues de terminar de arreglarse fue rumbo a los aposentos del Sultan, cuando llego le avisaron.

Guardia: Mi sultana, nuestro señor esta junto a su harem.

La sonrisa del rostro de Hurrem se borro rapidamente.

Hurrem: ¿Que dices? ¿Con quien esta?

Guardia: Sultana.

Hurrem: Dimelo.

Guardia: Adentro esta la señorita Firuze.

Hurrem sintio su corazon mas pesado, tristeza desbordaba en su mirada, camino con lentitud y sin ganas ni intenciones de hacerlo, todo daba vueltas, no entendia, no escuchaba, no miraba, es como si ya estuviera muerta, una fuerte tormenta tronaba esta noche, se dirigio a un balcon y con los ultimos alientos de su vida, le escribio una carta a la señorita Afife ordenandole que apenas la señorita Firuze regresara a sus aposentos, la matara, de la forma que quisiera pero que la matara, no iba a dejar que alguien tuviese el merito de decir que la derroto, eso no estaba en su naturaleza, pero algo si era cierto, ella queria morir, saco un frasco de veneno y poco a poco lo fue acercando a su boca hasta que bebio hasta la ultima gota, lo que miro por ultima vez fue el cielo oscuro de la noche, relampageando furioso, por la muerte de una mujer, la mujer que manejaba el mundo, que su historia llego hasta los rincones mas remotos de la existencia humana, y derrotada por ella misma esta fria noche, cuando Afife encontro esto hizo exactamente lo que la sultana le pidio, no antes de quemar la carta para que nadie pudiese inculparla de la muerte, pero asi lo hizo, Firuze murio ahorcada en la misma noche que la sultana Hurrem, despues regreso al lugar de muerte de la sultana Hurrem, empezo a llamar y despertar a todos como si acabase de encontrarla, dio aviso de que la habia hayado muerta, lo mas probable es que con la muerte de Hurrem nadie notase la de Firuze hasta la mañana, pues ella no era nadie comparada con la gran sultana Hurrem.

Afife: Sultana ¿Que es lo que le ha hecho? ¿Como le hizo esto a su vida? debio de razonar sultana... usted tenia cinco hijos, ¿Como pudo dejarlos asi?

Miriham: Abran paso, dejenme pasar, ¡HAY NO PUEDE SER MADRE!

Mehmed: Miriham... nuestra madre esta...

Miriham: ¡AY NO! ¡NO! ¡NO! ¡NO! ¡NO PUEDE SER! ¡MADRE! ¡VUELVE CON NOSOTROS! ¡NO PUEDES DEJARNOS SOLOS! ¡NO PUEDES DEJARME! ¡POR FAVOR MADRE! ¡AFIFE! ¿QUE HA SUCEDIDO? ¿QUE LE HA PASADO A MI MADRE?

Afife: La encontre tirada en el suelo sultana, al lado de ella estaba esto.

Le muestra un frasco el cual obviamente debia de poseer veneno en su interior.

Miriham: ¿MADRE QUE HICISTE? ¿QUE HAZ HECHO? ¡TODO POR CULPA DE LA SERPIENTE FIRUZE!

Sultan: ¿Que sucede aqui?.... Hurrem.... ¡HURREM! ¡QUE TE HA PASADO! ¡HURREM! ¿QUE SUCEDIO?

Miriham: ¡PADRE! ¡MI MADRE ESTA MUERTA! ¡BEBIO VENENO!

Sultan: ¡HURREM NO ESTA MUERTA! ¡HURREM NO!

Dice cargandola hacia los aposentos reales en donde la recosto en la cama, y con un mar de lagrimas en los ojos observo su rostro.

Sultan: Pronto vas a despertar querida mia.... no te preocupes.... ¡PRONTO VAS A DESPERTAR! ¡HURREM PRONTO!

Durmio al lado de ella toda esa noche, mientras tanto en las sombras habian figuras malignas que se beneficiaban de esta muerte, entre ellos incluidos las sultanas Mahidevran y Hatice e Ibrahim pasha, quienes creian que su era habia acabado, cual seria su sorpresa al saber que apenas iba a comenzar.