STUPID

42.

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— ¡Rompela! — Se escucho el grito de NamJoon..

— ¡No puedo! — HoSeok le regreso el grito con desesperación.

HoSeok intentaba romper una piñata desde hace ya un rato, pero por más que intentaba, la maldita piñata no se rompía. Además, JungKook le jugaba sucio ya que cuando estaba apuntó de pegarle, la subía más arriba.

— Dejale el turno a alguien más, Hobi. — Le dijo TaeHyung mientras se acercaba a él con un poco de miedo. HoSeok nenía un palo en sus manos y lanzaba golpes a todos lados, por lo que no era muy seguro acercarse a él.

HoSeok soltó un gruñido y le entregó el palo de mala gana. TaeHyung le susurro un "no te enojes" mientras acariciaba su cabello dulcemente, haciendo sonreír un poco al menor.

— ¡Mi turno! — SeokJin fue hasta la piñata con entusiasmo y tomó el palo. No faltaron más de cuatro golpes para que la piñata se rompiera, pues bueno, JungKook se la había puesto muy fácil a su novio.

— ¡Dulces! — HoSeok corrió hasta donde estaban todos los dulces desparramados y comenzó a tomarlos para luego extender su camisa y colocarlos ahí.

Cuando creía que tenía suficientes dulces para sobrevivir a la semana, alguien lo tomó de la cintura y lo levanto del suelo, dándole un leve empujón para quitarlo de su camino.

Genial. Todos sus dulces se habían caído.

HoSeok se dio la vuelta y observo a TaeHyung con molestia. Este estaba de cuclillas en el suelo tomando los dulces que HoSeok recolectó hace un momento.

— ¡Oye! — Se subió a la espalda de TaeHyung y cada vez que este tomaba un puño de dulces, HoSeok se encargaba de volver a tirarlos.

— ¡Se van acabar! — le gritó TaeHyung con un puchero. HoSeok rio un poco y se bajo de su espalda para que juntará los dulces que quedaban.

Cuando ni un pequeño chicle quedo en el suelo, los cuatro chicos que estaban en este se pusieron de pie y fueron a sentarse en unas sillas que estaban en el patio.

— ¡Gracias, JungKookie! — SeokJin le lanzó un tierno beso al nombrado. — Gracias a ti, conseguí muchos dulces.

— Eso fue trampa. — Puchereo HoSeok, que se encontraba de pie ya que no había suficientes sillas. — Yo organice este cumpleaños, debería de tener más dulces.

— Por cierto, ¿dónde está?—  HoSeok pensó un momento ante la pregunta de JungKook, no entendiendo. — La razón de esta fiesta.

— ¡Voy por él! — entró a la casa con rapidez, y así como entró, salió. — Aquí está.— extendió su mano hacia ellos. En su dedo se encontraba la mascota de HoSeok; Toto. Todos ahí lo conocían ya que él se la pasaba hablando de su mascota. — Pero no le gusta estar redeado de gente, así que volverá adentro. — volvió a entrar en la casa y para cuando salió, Toto ya no se encontraba junto a él.

— ¿Le hiciste una fiesta a tu hamster? — JungKook lo miró extraño.

— ¡Sí! — HoSeok sonrió en grande mientras se acercaba a TaeHyung.

— Eso es raro—...

— Cállate. — TaeHyung le dio un golpe en la nuca, a lo que JungKook lo miró con molestia.

JungKook, con indignación, se puso de pie y fue a cambiar la canción que sonaba en la bocina ya que le había aburrido.

— Gracias por defenderme. — HoSeok se acercó a TaeHyung y lo sorprendió sentándose en sus piernas mientras abrazaba su cuello.

A nadie más parecía importarle eso, pero TaeHyung realmente se encontraba un poco perdido por tener al rubio sentado en sus piernas. HoSeok realmente era estúpido por no estar conciente de lo nervioso que ponía al mayor.

— ¡No cambies la música! — HoSeok se paro de prisa y fue hacia JungKook para evitar que quitará su canción favorita.

TaeHyung sólo pudo soltar un suspiro más relajado cuando pudo observar a HoSeok pelear con su mejor amigo. Era un poco gracioso, ya que cuando recién se habían conocido, sus personalidades chocaban un poco, pero ahora que tenían confianza, lo hacían todo el tiempo.

Era por eso que TaeHyung sonreía como el tonto enamorado que era mientras observaba a HoSeok pelear por la bocina con JungKook.

 

  

  

   

   

 

(N. J. A.)