EnEn medio de la oscuridad, sin poder mover sus brazos ni piernas, estaba el, con una mirada perdida debido a la ausencia de la luz, con una sensación en los oídos como si estuviesen tapados por la presión, pero en realidad, era debido al silencio absoluto del lugar, "¿Cómo?, ¿cuándo? y ¿por qué?" las clásicas, pero infaltables preguntas, a esta desconocida situación, solo queda intentar recordar, "iba camino a casa, un arma, si, recuerdo algo con un arma, era alguien con eso, ¿quizá un robo? O... no recuerdo nada después de que me apuntara con eso" fragmentos de toda su vida, entremezclados que le hacían difícil poder entender sus recuerdos.
El tiempo avanza, el comienza a entender que, si no hace nada, jamás saldrá de su situación, sea cual sea, "¿Un secuestro?, es posible, aunque, mi familia no es de muchos recursos que digamos, quizá para robarme órganos, no siento ningún dolor en el cuerpo, seguramente o no me han hecho nada aun o es por alguna droga, esta oscuridad es muy molesta y más aún si no puedo mover mis brazos, esta forma, ¿una camisa de fuerza? ¿estoy en un manicomio?, eso explicaría la camisa de fuerza, pero el silencio y la oscuridad, lo mejor será pensar lo peor, el secuestro, tengo que buscar como zafarme de-" todos esos pensamientos son interrumpidos por un golpe, que parecía provenir de un pasillo, una leve luz aparece a través de una puerta, es muy leve pero es suficiente para darse a la idea de en qué situación se encuentra, parece una habitación cuadrada con siluetas extrañas por todos lados pero ninguna silueta tiene una forma humana, "nada de qué preocuparse por ahora" piensa, por ahora solo me queda probar con, "nunca pensé que diría algo como esto, bueno tampoco pensé en estar en este tipo de situación nunca"
-hola, ¿hay alguien ahí? - trata de decir en voz alta mientras trata de zafarse de la "camisa de fuerza"- ¡Hey! es muy incómodo esto ¿alguien me lo podría sacar por favor? ¡Hey! - el silencio vuelve a ser absoluto
- ¡TE ACABO DE ESCUCHAR HACER UN RUIDO HIJ...!- Otra vez se vuelve a escuchar el golpe, esta vez más cerca, "¿puerta de metal? Definitivamente esto es una especie de secuestro o el manicomio es un lugar demasiado seguro" pocos segundos pasaron para volver a escuchar ese golpe, era otra puerta, pero esta vez ese golpe venía acompañado de otros ruidos, de unos "pasos" pensó "quizá las frases cliché funcionan"- ¿Quién está ahí? ¿Me podría ayudar creo que cometieron un error? - los ruidos de pasos cesan y la tenue luz que entraba por la aparente puerta de la habitación, se ve interrumpida por un par de sombras, la puerta se abre, hace mucho ruido, bisagras oxidadas y parece por el ruido es una puerta muy pesada, parece un metal muy grueso, pero la silueta que apareció abriendo la puerta parece importarle poco, solo una mano para moverla.
La luz ahora es intensa entra por lo que parece un pasillo, no lo logra ver bien, sus ojos están encandilados, cegados por la luz, solo puede apartar su mirada a un costado y cerrar los ojos para evitar esa intensa luz, pero alcanzo a ver la silueta, parecía una silueta femenina, alta, piernas largas, gran cadera y pequeña cintura, "al menos poder ver un bombón antes de que pase cualquier cosa", intenta darse animo ante la confusa situación, se escuchan los pasos otra vez, ahora en dirección de él y suenan mucho más claro que antes de que abrieran la puerta, "son tacos... definitivamente es mujer" pensó como un intento de envalentonarse, él era joven y de buen aspecto, se tenía confianza cuando se trataba de ligar o coquetear con una mujer
- ¡Hola! – dice con una voz segura e intentando proyectar confianza
-¡HOLA! ¡RICK! - Se escucha una horrible voz, parecen muchas voces mescladas entre sí, femeninas, masculinas, graves y agudas "pero que mier-" pensó Rick cayendo en la confusión, también junto a eso cae su confianza y seguridad.- ¿Cómo te sientes hoy pequeño? - "¡CALLATE! ¡Que insoportable voz!" pensó Rick mientras hacía muecas de molestia –oh perdona se me olvido arreglar mi voz, ¿cuál era? - hace un pequeño sonido en la garganta como intentando afinarla- a si era esta ¿no? - ahora era solo una voz suave y algo grave, parece de un jovencito-
-No creo que vaya con tu cuerpo, pero... supongo que es mejor que la que tenías antes- dice Rick simulando volver a tener confianza en sí mismo otra vez "pero que... ¿como hizo eso?" pensaba RICK perplejo por lo que acababa de escuchar.
-Entonces pequeño "RICK", ¿Cómo te encuentras HOY?
- ¿Hoy?, ¿Perdón, pero cuanto tiempo llevo aquí? – Dice Rick acostumbrándose a la luz eh intentando ver a la persona junto a el-Bueno, es difícil explicar, pero, resumámoslo en que hoy, para ti, es el Primer día, para mi es mi día 8455 contigo junto con la vez 8452 que contesto esta misma pregunta – Se acerca a Rick y se agacha frente a él, lo mira directo a los ojos que aun ven borroso- pero a partir de hoy todo cambiara, ya que dejaras de olvidar tus días aquí, me eh aburrido de tener que, digamos borrarte la memoria.
- ¿Que?, Asique, si era un manicomio después de todo- su vista al fin se ajustó, ahora podía verl@, no sabía que era, se arrepintió prácticamente de inmediato de lo que acababa de decir y ahora ya no tenía que fingir, ahora ya era imposible fingir, tenía miedo, estaba prácticamente cagado de miedo, iba a gritar, quería gritar, pero no pudo, su boca no se abría, no sentía su lengua "¡¿Que mierda está pasando?!"
- ¿Que está pasando? Estas muerto y yo soy un ángel, ¡BASTA!, Muchas preguntas ahora ya no perderás la memoria asique si quieres mañana o pasado o... puedes volver a preguntarme ahora mismo estamos perdiendo tiempo, mi tiempo – se levanta y aleja un poco, grita
- ¡QUE ALGUIEN LE QUITE ESO DE UNA VEZ!- Rick escucha unos pasos, era niños sin atisbo de vida en sus ojos, una mira perdida, como resignados a obedecer, se acercaron a él y comenzaron a tirar de la "camisa de fuerza"
-AAAARRggg ¡¡PAREN!!– Algo estaba mal, "¡MIERDA!, ¿porque duele tanto que tiren de la camisa?" pero a pesar de haber pedido que pararan los niños solo tiraban más y más fuerte...- ¿Pequeño Rick? ¿Qué?, ¿aún no te das cuenta?
- ¡DEQUE AGGGH DE QUE SE SUPONE QUE DEBO DARME CUENTA!
- supongo que el dejarte en este lugar tan oscuro tiene sus inconvenientes- mientras dice eso, el ángel ríe de forma burlesca - Ahora hay luz deberías poder verlo tu mismo.
- ¡Qu...! ¿¡QUE MIERDA ME HAZ ECHO!?
- ¡jajajajaajajajajAJAJAJAJAJAJAJA! ¿YO? ¡jajajaJAJAJAJAJA! No fui yo Pequeño Rick, ¡tú elegiste esto ayer!
"¡¿QUE?! ¿Yo lo elegí?"
La camisa de fuerza que Rick tenia puesta, estaba unida a su piel, ¿cómo? No podía imaginarlo, estaba por dentro y fuera de la piel esa camisa, los niños solo tiraban con fuerza, cada vez más y más fuerte, la sangre empezó a salir pedazos de piel comenzaron a caer, Rick solo podía gritar, suplicar que pararan, su piel se separaba de sus carnes y junto a ella la camisa.
El ángel empieza a aplaudir- ¡Buen trabajo muchachos! - Dice mientras sonríe, se acerca a Rick hasta estar frente a él y acercando su rostro junto al de él dice- Ahora solo le falta ¡LA CARA! – Dice el ángel a la vez que se aleja de él y le pone un espejo para mostrarle su rostro, había una máscara que se mesclaba con la piel y labios de su cara.
-Pequeño Rick espero lo soportes, te diré algo, si te desmayas o mueres, le pondremos pausa a esto y cuando despiertes, volveremos a pasar por todo esto de nuevo, repetiremos hasta que logres soportarlo todo, ahora sobre todo porque no lo olvidaras, o y casi lo olvido, pequeño Rick, en este lugar no puedes morir.La piel de la cara empieza a ser tirada por los niños, Rick solo pudo gritar y gritar por el dolor, intentar suplicar que pararan que lo mataran, el ya no podía más.
-Que idiota eres pequeño Rick te lo acabo de decir aquí... no puedes morir.
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Pequeño Rick
FantasyUna persona se encuentra a solas en un lo que parecer ser un cuarto con completa oscuridad, en un silencio absoluto, con una camisa de fuerza puesta, o eso parece.