Estaba conteniendo las ganas enormes que tenía de llorar, no sabia si era de odio o de nostalgia.
Definitivamente era el.
Había vuelto.
Me levante pero él cogió mi brazo haciendo que yo me sentara de nuevo.
Giré la cabeza para no tener que ver a tal persona.
-Mi pequeña Lisbeth, soy yo, papá.
Me giré y lo mire.
-Hace años que yo no tengo padre, en el fondo nunca lo he tenido. -dije con una sonrisa amarga mientras le miraba con odio.
-Mira Lisbeth, papá lo siente mucho y el quiere recuperarte.
Se preguntaran porqué este hombre habla así, bueno el es de Francia y sabe muy poco español, por eso yo se hablar perfecto francés. Ajj odiaba que me llamase Lisbeth, el me solia llamar asi antes de abandonarnos.
-Je t'aime encore Lisbeth. -dijo queriendo decir te sigo queriendo en francés.
-Vuelvete a Francia y olvidame. -dije levantandome dejando dinero en la mesa, que estubiese enfadada con "mi padre" no significaba que tubiese que dejarle el marron a Alex que era el único que se había quedado tras comer todos juntos.
Me fui corriendo pero el inutil me perseguía.
-Lisbeth, recuerda que sigo siendo tu padre y eso nunca va a cambiar. Je t'aime. -dijo gritando desde la puerta del restaurante mientras yo me iba rumbo a mi casa.
-Vas te faire encoule! -dije queriendo decir que te jodan.
Al llegar a casa eran las once de la noche asique mande saludos por el grupo de whatsapp de mis mosqueteros y me fui a dormir, no sin antes llorar durante un largo rato.
El sabe donde vivo, como venga por aqui van a haber problemas, mama lo odia.
Despues de pensar durante horas mientras lloraba me quedé dormida.
* * * * * *
-Despertad-grito mamá desde el piso de abajo.
Me levanté y me mire en el espejo como solía hacer todas las mañanas.
Oh dios mio estoy horrible.
Me di una ducha y baje a desayunar.
Al entrar a clase juntó a Kyle vi que Jack, Dylan y Seth ya habían llegado. Iba a ir a abrazarles pero Kyle me cogió del brazo impidiendomelo.
-Tenemos que hablar sobre dos cosas-dijo serio.
-Kyle me estas asustando.
-¿Qué pasó anoche? ¿Alex te hizo algo? ¿Te ha contado algo?
-¿Que? No, no paso nada- dije pasando de sapercibido.
-Vamos, te oí llorando durante horas en tu cuarto.
-Que no pasó nada, ya, ¡dejame!
-Espera, No iras a irte con ellos, ¿verdad? -dijo mirando a Jack, Dylan y Seth, quienes me miraban extrañadon, claro habían escuchado todo.
-Claro que si, son mis amigos.
-No te convienen -dijo mirando a otro lado.
-Ah, ¿Y ellos si? -dije señalando a los que antes eran los traidores.
-Lis por favor, piensalo.
-Yo ya lo he pensado, y no voy a dejarles solo porque tu me lo digas -dije chillandole muy fuerte.
En ese momento el me pegó una bofetada haciendo que me llevase la mano a la cara y me quedara boquiabierta.
-Esto no me lo esperaba de ti-Dije con lagrimas en los ojos-Hermano.
Fui a mi sitio y la clase comenzó. Estaba llorando sin hacer ruido hasta que el profesor se dió cuenta.
-Elizabeth ¿Te encuentras bien?
Acto seguido todos me miraron, el grupo de Megan sonreía, mis amigos me miraban preocupados y Alex y Kyle se levantaron pero me levante y ellos se sentaton. Me acerqué hasta la mesa del profesor.
-Podemos hablar fuera, no quiero que nadie me escuche.
-Claro-dijo-Sally, Te dejo a cargo de la clase.
Al llegar fuera del aula el me miró preocupado.
-Bueno ya que tu eres psicopedagogo y siempre te lo he contado todo, se que puedo confiar en ti...
-Claro que puedes-dijo abrazandome.
Ustedes diran que es una relación muy rara entre profesor y alumna pero Zack es mi amigo desde antes de que entrase a trabajar aqui y todo el mundo lo sabe.
-Él ha vuelto, dice que según el quiere recuperarme, no quiero verle, no lo aguanto. -dije llorando.
-Tranquila, haz lo que tu quieras, no hagas lo que no quieres si no quieres verle no lo hagas, ahora coge tus cosas y vete a casa.
Entre a clase con la cara empapada, cogí mis cosas y al intentar irme Alex me cogió del brazo.
-¿Es por lo de ayer? -intento decir lo suficientemente bajo para que Kyle que se sentaba a su lado no se enterase. Pero era demasiado tarde.
-¿Que pasó ayer? -dijo Kyle.
Me acerqué a la oreja de Alex y le dije que no le contara nada.
Me fui y fui al parque en el que mi padre me solia llevar cuando tenia siete años.
El me columpiaba, era la niña de sus ojos, que ilusa era, ese hombre lo unico que queria y que hizo es llevarse el dinero de mi madre y tres corazones rotos.
No quiero contarle nada a Kyle ya que el sufrió mucho y no quiero hacerle sufrir. No otra vez.
Me senté en la mesa y Ryan, uno de los jugadores de baloncesto del colegio se acercó a mi.
-¿Te encuentras bien?
-Me extraña que me hables... después de tanto tiempo.
Ryan fue mi amigo durante mucho tiempo antes de que mis amigos actuales llegasen al instituto, por esa época yo estaba sola, todos se metían conmigo y como a él le gustaba Megan empezó a meterse conmigo.
-Losiento Lisa, me arrepiento mucho de ello, quiero volver a estar junto a ti en los malos y en los buenos momentos, dame una oportunidad porfavor.
-Bueno falta una clase, vamos y luego ya veremos.
Me sonrió y entramos a clase. Muchos al vernos juntos se sorprendieron pero pasamos de largo. Iba a irme a mi sitio pero Ryan me giró haciendo que le prestara total atención.
-Aunque no me quieras dar otra oportunidad, yo nunca me voy a rendir.
Le di las gracias acariciandole una mejilla, le sonreí y me fui a mi sitio.
No estaba prestando atención a la clase, estaba hablando con Ryan pero como no le entendía empezamos a hacer gestos. Al terminar la clase me acerque a el para averiguar lo que me queria decir.
-¿Que se supone que significa que pongas las manos en la cabeza y luego me señales?
-Significa que si quieres quedar algun día conmigo.
-Claro que si, tendre que darte clases de mímica. -Estallamos en risas
Alex se acercaba no muy contento, oh no la historia se repite.
-Que bien os lo pasais, ¿no?
-Alex no empieces, nisiquiera sabes quien es-dije seria.
-Claro que se quien es, uno de los miles con los que zorreas. -dijo lo suficientemente alto para que toda la clase se enterase, menos mis amigos y Kyle que no estaban, si no el ya le hubriese pegado.
Espera.
No ha podido decir esto.
-¿Perdona? -Dije en una mezcla de tristeza y enfado.
-Lo que oiste, esto se acabó no pienso seguir detrás de ti.
-Pero Alex.... - a mitad de frase se fue.
Mire a Ryan y explote.
-Lo siento Ryan-le dije.
-No te disculpes, tu no has hecho nada, vamonos de aqui. -dijo cogiendo mi mochila y la suya.
Estubimos hablando un rato en un banco de los que habían en los pasillos cuando vimos que mis amigos y el gilipollas de Alex venían riendose. Se me quedaron mirando.
Al ver a Alex no pude evitar levantarme y darle un guantazo.
-Eso por gilipollas, si tan zorrita soy olvidate de mi. Olvidate de mi, pero esta vez para siempre.
-Lisa-Dijo Alex acercandose intentando acariciarme la mejilla pero cogí a Ryan de la mano y le hice que viniese conmigo y salieramos de allí.
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El Principio De Mi Final [Editando]
Novela JuvenilMe llamo Elizabeth, pero me llaman Lisa y tengo 16 años. Yo era una chica que pasaba bastante desapercibida, iba con su pequeño grupo de amigos y era feliz hasta que un chico nuevo apareció, Alex. ¿Que porque lo odio tanto? Facil, solo vino a arr...