el raro de las flores ✧ jakehoon

flores rojas

-Buenos días-saluda Sunghoon entregándole una flor a Jake como todas las mañanas.

-Buenos días- responde sonriendo y acepta el regalo.

El mayor sonríe sonrojado, es la primera vez que el bajito le regala una sonrisa tan sincera.

Así avanzaron en el autobús, si bien reinaba el silencio de nuevo, ahora no era incómodo.

Pasaron el resto de clases como todos los días, él más alto no le hablaba pues temía que su actitud cambiara de repente, le gustaba que lo tratara bien, pero era más fuerte su miedo al rechazo de nuevo.

Se sentó en el lugar de siempre, sabía que los amigos de Jake usaban la mesa frente a él, así podía mirar a su chico aunque fuera de lejos.

Estaba tan concentrado mirando a esa dirección esperándolos que no sintió la presencia de dos personas que se sentaron a cada lado de él.

-Hola-saludó Sunoo dejando su charola de comida en la mesa-¿Esperas a alguien?

-¡Cielos! Me asustaron-dijo Sunghoon sobresaltado-sí, digo, no, no espero a nadie.

-Claro-acusó Riki entrecerrando los ojos-entonces, como no esperas a nadie, no tiene caso que te diga que Jake está en la enfermería.

-¿Está bien?- pregunta levantándose inmediatamente.

-Tuvo un mareo, nada grave, no debe tardar en llegar- contestó Sunoo sonriendo- entonces ¿No esperas a nadie?

Sunghoon volvió a sentarse sonrojado, al parecer esos chicos sabían que miraba a escondidas a su amigo.

-Ahí viene- avisó Riki agitando sus manos para llamar la atención del bajito y se levantó de la mesa siendo seguido por Sunoo.

Sunghoon miró hacia abajo, estaba muy avergonzado y creía que esos chicos solo fueron ahí para burlarse, pero grande fue su sorpresa cuando vio que rodearon la mesa y se sentaron justo frente a él, dejando así solo un lugar disponible para Jake.

Sunghoon se dio cuenta de la acción y miró a Riki con una ceja arqueada, éste le guiñó un ojo y susurró un "por nada"

-Cielos, lamento la demora- se disculpó Jake sentándose al lado de Sunghoon, justo como sus amigos habían planeado- la enfermera no quería dejarme salir, ¿Por qué nos sentamos aquí hoy?

-Nuestra mesa fue ocupada- se excusó Riki.

-¿No te molesta que te acompañemos?- preguntó Jake al de mayor estatura.

-Claro que no, me gusta la compañía- respondió nervioso.

-Qué bueno, porque esa mesa me estaba hartando, podríamos almorzar aquí ahora ¿Cierto, Jake?- preguntó Sunoo.

-Buena idea- celebró el menor.

Sunghoon sonrió sonrojado, un tono que siempre adquiría cuando estaba junto al bajito, pero luego miró su lado de la mesa que estaba vacío y frunció el ceño.

-Jake ¿Y tú almuerzo?

-Olvidé mi dinero, pero no tengo hambre- respondió alzando los hombros restándole importancia.

-Acabas de salir de la enfermería por un mareo ¿Y no vas a comer?- lo regaña y abre la bolsa de plástico que guarda su comida, es un emparedado de pollo y se lo da - ten, come.

-Sunghoon, no es necesario...

-Claro que lo es- lo interrumpe.

-Hazle caso, es más dale la mitad solamente, yo le daré parte de mi almuerzo también-ordenó Riki y Sunoo hizo lo mismo.