Amantes

Capítulo 1

Helaena

Mi madre me había llamado para hablar sobre algo, no sabía de qué pero tenía qué llegar rápido a sus aposentos para qué no me pregunté donde estaba.

Al llegar a sus aposentos lo primero qué note es qué Aegon estaba ahí, estaba hablando con mi madre pero al llegar su mirada se puso en mí, era una mirada de asco y de rechazo, ya estaba acostumbrada a esa mirada así qué no me sorprendió en lo absoluto.

Me acerqué a mi madre y besé su mano para después mirarla.

- Madre, qué bueno verla - hablé con una sonrisa

- Mi pequeña Helaena, por qué tardaste tanto? -

- De seguro estaba con esos asquerosos bichos madre -

- No te pregunté Aegon, mi hermosa Helaena por qué tardaste tanto? -

- Es qué me entretuve hablando con sr criston madre, lo siento por hacerte esperar -

Ella me acarició la mejilla - No importa hija, lo bueno es qué ya estás aquí -

- De qué tema querías hablar conmigo madre? -

- Te quería decir hija, qué te casarás con tú hermano Aegon en una semana, ya está todo preparado, estoy tan feliz -

Qué estaba diciendo? Qué me iba a casar con Aegon? No podía creerlo, no podía casarme con Aegon, el es un idiota, solo se preocupa por beber y acosar a las sirvientas, no quería casarme con Aegon y no lo voy hacer.

- No, no me puedo casar con Aegon madre -

- Por qué no puedes casarte conmigo hermanita? Es qué ya alguien ya te desfloro -

- Cállate Aegon, no te atrevas hablar así de tú hermana - mi madre habló - mi amor, dime por qué no te puedes casar con tu hermano? -

- Por qué es mi hermano, además mama, no me quiero casar con el, por favor no haga qué me case con el -

- Helaena qué importa qué sea tú hermano, El conquistador se casó con sus dos hermanas, así qué lo siento mi princesa pero te casarás con tú hermano, ya está todo preparado -

Asentí con algunas lágrimas en mis ojos - entiendo madre, ahora me puedo retirar? -

- Claro hija, mañana iré a tus aposentos hablar sobre la boda -

Besé su cachete para después salir de sus aposentos, cuándo ya estaba afuera, no pude aguantar las lágrimas, no quería casarme con Aegon, no podía hacerlo, como podía casarme con alguien qué siempre se ha burlado de mí?.

Mis lágrimas caían por mis mejillas mientras caminaba por el oscuro pasillo del palacio, era de noche y claramente no había nadie, en medio de la oscuridad pude escuchar una voz muy conocida.

- Princesa, qué haces aquí sola? - habló aemond

Me gire para mirarlo, el estaba ahí parado, su cabellera platinada estaba desordenada, había entrenado todo el dia, su parche como siempre se encontraba en su lugar, aveces me daba curiosidad ver lo qué oculta a través de ese parche.

- Qué haces despierto a esta hora Príncipe? - pregunté

- Por qué estás llorando? Quién te hizo daño Princesa, dímelo y haré qué sufra de la peor manera -

- No respondiste mi respuesta Príncipe -

El se me acercó para limpiar mis lágrimas - Estaba entrenando, ahora responde mi pregunta hermana -

- Mi madre me dijo qué me casaré con Aegon, no me quiero casar con el Príncipe -

El suspiro y me abrazo - mi pequeña hermana, no llores, se qué el no te hará daño por qué yo estoy aquí para protegerte -

- Ojalá mi madre me hubiera comprometido contigo Príncipe, eres diferente a Aegon -

- Yo también desearía qué mi madre nos hubiera comprometido, pero ella quiere qué tú seas reina -

- Aveces deseó no haber nacido princesa, pasaré toda mi vida infeliz -

- No pasarás toda tú vida infeliz, yo estaré ahí para apoyarte -

Sonreí levemente, aemond me hacía sentir feliz, casa palabra qué decía hacía qué me sienta en paz, en estos momentos el es el único qué me ha sacado una sonrisa, ojalá mi madre me hubiera comprometido con el, sabía qué si me casaba con aemond, nuestro matrimonio podía estar mal pero el era mejor qué Aegon.

Después de hablar con el, aemond me acompaño a mi habitación.

- Gracias por hacer qué sonría un poco Príncipe -

- No es nada Princesa, tú mereces sonreír toda la vida, tú sonrisa ilumina todo el palacio, sin ti estaría apagado y aburrido -

- No creo qué por mí el palacio este iluminado pero gracias por el alago Príncipe-

Aemond se acercó a mí y con su mano acarició mi mejilla, quería apartarme pero algo impedía qué lo haga, mire a aemond quien era más alto qué yo aunque fuera el hermano menor.

- Alguien nos puede ver Príncipe- fue lo único qué dije mientras él seguía acariciando mi mejilla

- Qué nos vean, no estamos haciendo nada malo, solo verán cómo un hermano cuida a su hermana, nada más Princesa -

Su hermosa sonrisa hacía qué me quedará más tiempo con el, nos quedamos mirándonos a los ojos por unos minutos cuándo las puertas se abrieron haciendo qué aemond deje de acariciar mi mejilla, miré hacía la puerta y ahí estaba mi dama.

- Perdón princesa por interrumpir pero quería saber si estaba bien - habló rápidamente por la mirada asesina de aemond

- Estaba bien hasta qué nos interrumpistes señorita - aemond habló mirándola

- Príncipe- hablé mirándolo para después mirar a mi dama - no te precupes Allyn, yo estoy bien, el príncipe aemond ya se iba -

- Si, ya me iba -

por qué estaba nerviosa? Solo estaba hablando con mi hermano nada más.

- Mañana iré a verlo entrenar principe, ojalá duerma bien -

- Claramente dormiré bien princesa, y la esperaré mañana para qué me vea entrenar, ojalá usted también duerma bien, me retiró -

El miró de reojo a mi dama para después salir de mi habitación, me acerqué a Allyn y le sonreí.

- Dime qué pasó Allyn? Se qué no veniste por qué querías ver si estaba bien -

- Mi princesa, vine por qué no quería estar sola en la habitación qué usted me dió -

- Por qué no querías estar sola? - pregunte pero ella bajo la cabeza - dime Allyn, tú y yo somos mejores amigas, puedes decírmelo lo qué quieras -

- Es qué no quiero qué el príncipe Aegon me haga dañó, el siempre entra a mi habitación de noche y me hace cosas qué no quiero princesa, por eso vine, no quiero estar sola y menos si mi habitación ésta lejos de la suya princesa - habló con lágrimas en sus ojos

- Mi querida Allyn, has pasado por muchas cosas malas, pero tranquila, Aegon ya no te hará nada malo, yo no permitiré eso -

- Gracias por ayudarme princesa -

Agarre sus manos y sonreí - siempre te ayudaré, ahora vamos a dormir, mañana tenemos qué ir a ver a entrenar al príncipe para después hacer qué te cambies de cuarto Allyn -

- Princesa, le puedo preguntar algo? -

- Claro Allyn -

- Usted siente algo por el príncipe aemond? No es por ser chismosa pero he notado sus miradas -

Me quedé callada por unos segundos para después hablar - Allyn, lo único qué siento por el príncipe es cariño, es mi hermano -

Ella sonrió - Gracias por responder mi pregunta Princesa -

- Vamos a dormir pequeña Allyn -

En realidad no sabía qué sentía por aemond, desde niña siento algo por el, algo bonito pero también peligroso, no sabía si lo amaba o solo sentía cariño pero lo único qué se es qué cuándo estoy con el, siento como si volará por los cielos, me hace tan feliz estar cerca de él.