Nocturna pasión

I

<<Fin de semana, 7:30 de la noche.>>

Un joven estaba sentado en el sillón de su sala viendo una película, muy tranquilo y relajado, pero no le estaba prestando mucha atención a lo que se estaba proyectando en su televisor, más bien su mente estaba divagando por las pequeñas curvas de su novia. Su novia, una chica un año menor que él, de una estatura baja, un poco gordita, crespa (No tanto como el cabello que el muchacho lucía cada día con tanta perfección), muy inocente e inexperta a comparación de él, y con unas gafas ya un poco dañadas. Estaba pensando en lo loquita y juguetona que podía llegar a ser, esa personalidad tan cambiante que tenía que hasta parecía que tenía síndrome de personalidad multiplique. Recordaba todas esas veces que ella tuvo sus preocupaciones y dudas de porque él se fijó en su persona, de sus llantos desesperados dados por sus imaginadas escenas del chico yéndose con otra mujer o de él desapareciendo de su vida. Pero a pesar de todo eso él sabía que ella era muy devota y dependiente de él. Sabía que sin él ella podría morir de corazón roto, ella era suya y solo suya, podría volverla añicos y ella no se que quejaría. Pero también tenía claro que ella era un ser muy celoso... Era sabedor de sus pensamientos malignos hacía cualquier chica que se le acercará, y eso a él le encantaba.
Salió de su burbuja cuando el sonido de una notificación de su celular sonó, lo prendio y verificó de que se trataba, era un mensaje de WhatsApp, es ella. Le estaba diciendo que ya iba para allá..... Y que llevaba una sorpresa consigo, él le saludó y le dijo que la estaría esperando.
Al cabo de unos minutos sonó el timbre de la puerta principal, él paró la película y se levantó de su cómodo sofá, mientras iba caminando hacía la puerta recordó la cantidad de ocasiones que había terminado desnudo con su novia encima de él, cabalgando encima de su miembro mientras gemía improperios y su nombre con tanto placer.
Llegó a la puerta y se encontró con aquella melena rizada. Esa chica de  pequeña estatura, que tanto le recordaba a un pingüino cuando caminaba, se le lanzó encima a besarlo con dulzura, él tuvo que retroceder un poco y apoyar su mano en el marco de la puerta para no irse de espaldas. La chica al bajarse de él lo miro con una cara de puro amor, lo saludo bien con un abrazo fuerte y juguetón; y prosiguió a adentrarse en la estancia. Él cerró la puerta tras de si y la sigo.
Mientras caminaban hacía la sala de estar él la inspeccionaba, primero miró su cabello voluminoso; la punta de los crespos era más clara que el resto del cabello, su espalda cubierta por ese saco que ella prácticamente le robó, paso por su trasero, redondo y suave, que se agitaba de lado a lado cuando caminaba.... Y rebotaba con gracias cuando la follaba, y después paso a sus piernas que eran carnudas pero no muy largas, a decir verdad eran bastante bonitas.
Cuando ella llego a la sala dejo una bolsa de compras; que hasta ahora el chico no se daba cuenta que la traía en manos, sobre la mesita de centro (Quizás esa sería la sorpresa), y prosiguió a tirarse sobre el sofá como si fuera suyo, se estiró sobre este y suspiro con cansancio, ella había tenido un largo día. Él se acomodó al lado de ella y le empezó a hacer piojito en su cabeza mientras ella le cogía la otra mano para después empezar a darle besos y caricias en la palma. Cuando pasó un rato de esas inocente caricias, uno que otro beso y una tranquila plática del día, ella se paró para ir al baño, sin antes darle otro beso en la boca, tomo la bolsa y se fue tranquilamente haciendo el baño. El chico la esperó unos cuantos minutos hasta que por fin escucho sus pasos aproximándose devuelta al lugar, pero está vez sonaban diferente, como si estuviera sobre unos tacones. Termino comprobando cuando vió una pierna asomarme por el borde de la pared, pero está vez esa pierna estaba forrada en unas medias de mallas y unos tacones notablemente altos, negros y brillantes, pensó que le quedaban bien. Y no fue hasta que la vio completamente que su mente y cuerpo gritaron lo hermosa que era. Ella portaba un traje de estilo bondage que le permitía ver gran parte de esa piel color chocolate con leche que infinidad de veces había tocado, los labios pintados de rojo sangre, una mirada felina, y las ya mencionada medias de mallas con esos tacones negros que hacía ver sus piernas más largas. Ella se fue acercando hacia el sillón de manera lenta y sensual contoneando sus caderas, quería darte un pequeño desfile a su amado antes de proseguir con lo que tenía en mente. Cuando por fin llegó ante él dio una lenta vuelta en su lugar para que el chico viera el traje más detalladamente, con esta acción se dio cuenta que el traje llevaba en la parte de las espalda una cuerda muy bien recogida para no ser notada desde la parte de adelante.
Cuando la chica se posiciono nuevamente de frente al chico se inclinó lo suficiente para que su cara diera con la de él para darle un beso apasionado y posesivo, está llevó sus manos al cuello del chico para atraerlo un poco más a ella para hacer el acto más intenso. Después de unos segundos rompió el beso mordiéndole el labio inferior al joven y tirando de éste hacía afuera.
Luego de esto ella se montó a horcajadas sobre él para sentarse en su regazo dando un pequeño sentón haciendo que sus pechos saltarán un poco. Él chico se lamió el labio superior con una notable hambre, trato de poner sus manos en la carne de su cintura pero cuando apenas logro poner un dedo en su piel la muchacha sonrió con malicia y negó con el dedo, lo cogió de las muñecas y en un movimiento rápido logró coger la cuerda en su espalda, llevar las manos del chico a su cabeza y amarrar estás en un nudo al parecer "profesional", parecía que había practicado bastante para el acto. Cuando  ya tenia la situación bajo su control la chica se tiró a besarlo nuevamente, pero está vez con un ritmo más lento, tortuoso.
Ella estaba jugando con él, lo pudo notar por las pequeñas risita infantiles que soltaba cuando iba bajando por su mandíbula, luego por su cuello dónde dejó lamidas, mordiscos y chupones, continuo su camino hacía abajo; por su torso, donde quitó la camisa para poder lamer con tranquilidad y suavidad la piel que encontraba a su pasó.
Siguió su camino hasta llegar a sus pantalones, le quitó el cinturón de cuero y lo tiró por algún lado de la habitación, le bajó el cierre y quito de su camino el elástico negro con gris de sus calzoncillos para finalmente liberar su palpitante verga de su prisión de tela. Al tener el caliente miembro de su novio, que tanto la enloquecía, al frente empezó a lamer su glande con un ritmo lento, como si le estuviera torturando, lo quería escuchar rogar por más. El muchacho comenzó a desesperarse por el aparente castigo, quería cogerla del cabello y empujar su cabeza hacia abajo para que sus labios cubrieran todo su caliente y un tanto lubricado miembro, empujaba sus caderas para adelante y tiraba su cabeza para atrás gruñendo con una excitación anhelante. Ella estaba disfrutando tanto de las evidente ansiedad que tenía el chico por follar su boca, soltaba sonoras carcajadas para desesperar más al chico y para que las vibraciones de su risa pasarán por todo el pene, estumilandolo más. Aunque por otra parte, la joven de menor estatura también quería chupar con más rapidez esa gran verga pero estaba  aguantando todo lo posible, solo para encender la bestia salvajemente sexual que dormía en lo más profundo de su amado novio, esa que tantas veces estuvo por romperla a la mitad o dejarla en silla de ruedas. Al fin se decidió por undir el miembro palpitante más adentro de su cavidad bucal, mientras bajaba por la largura hacía zic zac con la lengua hasta llegar al límite de lo que le permitía su boca, el resto los masajeaba con sus dedos para no dejar sin atención ningún centímetro de esa verga. Fue subiendo y bajando al principio con lentitud para seguir su jueguito, pero ella también se empieza a desesperar, comenzando a succionar con más fuerza y más movimiento a su cabeza, escuchando los gemidos bajos y gruñidos de su acompañante. Mientras hacía esto daba pequeñas caricias a los muslos del chico y subía su mano para acariciar su torso.
Llegó a un ritmo bastante rápido hasta que sintió que el pene estaba calentándose mucho e inmediatamente se separó de este, dejando la verga llena de baba y fluidos preseminal; lo único que aún la conectaba con ese imponente miembro era un hilo de saliva, lo vió romperse y finalmente se relamio los labios. Subió la mirada y contemplo con completo amor como su chico respiraba entrecortadamente y con dificultad, tenía la cabeza tirada para atrás y estaba empapado en sudor. La chica se enderezó, se volvió a montar sobre el chico para desamarrale el nudo y por fin dejarlo libre.

Procedió a lamerle el cuello mientra seguía masajeando la endurecida verga. Pero se detuvo cuando sintió que el chico la tomaba de las muñecas y la empujaba suavemente para poder verla a la cara, y lo que presencio la chica la dejo paralizada e hizo que su traje se empapará con sus fluidos vaginales. Esa mirada que le profeso era impactantemente oscura y profunda, pero a la vez se podía ver una llama de maldad, lujuria, excitación y adoración por ella. La chica logro su cometido, logro despertar a la bestia que tanto la había hecho gritar el fascinante nombre del hombre que se la estaba comiendo con la mirada en ese precio instante....

CONTINUARÁ....
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Hola mi gente hermosaaaaaa.
Perdón por la espera tan alargada, me estaba recuperando de algo muy fuerte para mí.
Justo está historia tiene que ver con lo que me pasó, porque se la escribí a mi ex-amado. Me dió pesar con esta historia porque jamás la termine y que se iba a quedar en las profundidades de mi WhatsApp, entonces he decidido compartirla y terminarla para que la disfruten jeje~
Otra vez, les pido disculpas y que disfruten.
Les quiero un mundo.
Bawy (⁠◍⁠•⁠ᴗ⁠•⁠◍⁠)⁠❤