ONE-SHOT

92 8 0
                                    

☆☆☆☆★☆☆☆☆

Hay una pequeña indicación(?, una sección para la música para que ayude a entrar en ambiente :D.

☆☆☆☆★☆☆☆☆

Al despertar lo primero que ve son los rayos del sol iluminando su habitación, se da la vuelta, sintiendo las sábanas acariciar su piel, el sueño persiste en él y una suave brisa le saluda, parece que ha olvidado cerrar la puerta de la terraza, pe...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Al despertar lo primero que ve son los rayos del sol iluminando su habitación, se da la vuelta, sintiendo las sábanas acariciar su piel, el sueño persiste en él y una suave brisa le saluda, parece que ha olvidado cerrar la puerta de la terraza, pero no es algo que realmente le moleste, por el contrario, es agradable la brisa por la mañana.

Lo segundo que ve son mechones oxidiana, parpados cerrados y relajados así como todas sus facciones, sus labios semi abiertos, ni tan delgados ni tan carnosos, perfectos para su gusto, aun un poco rojizos, pero eso le da un toque aún más apetecible, no se detiene y lo contempla en su totalidad, su cabello es sedoso y siempre tiene la necesidad de pasar sus dedos por esas hebras peinándolas en el acto, ahora caen un poco por el rostro aun dormido, eso le da un toque extremadamente adorable y sexy al mismo tiempo.

Peina el mechón rebelde sin causa que cae orillado por la gravedad, "está un poco largo", piensa mientras acomoda el mecho o al menos lo intenta, sabe que más tarde volverá a caer, pero no importa, así como no le importar el largo del cabello porque sabe que se mira bien y por qué no es secreto que se entretenga con esas hebras oxidiana.

Un par de ojos que siempre juegan entre gris y azul le saludan mientras que parece pelear un poco con los parpados que piden permanecer cerrados un poco más para acostumbrarse a la iluminación natural de la habitación e inevitablemente una pequeña risa lucha por escapar de él, pero la retiene disfrazándola en una pequeña sonrisa mientras lo deja despabilarse un poco observando como refunfuña, ama sus mañanas tanto como ama al hombre a su lado.

—Buenos días, cariño.

Y esas palabras realmente extrañas al inicio, ambos solían tener un rubor con tan solo mencionarlas, pero ahora se sienten propias, más libres, adecuadas y tan correctas que dejan un sabor agradable tras pronunciarlas y parece crear el mismo efecto en su compañero que ahora es libre del sueño y vuelve sus ojos a él, es una mirada que al inicio puede parecer fría por los colores del mismo, pero si prestas total atención te darás cuenta como los bordes de sus ojos tienen expresiones suaves acompañadas de una pequeña sonrisa mañanera, sus ojos reflejan cariño y confort, es cálido y rebosante de vida, siempre que los miraba quedaba cautivado por ellos.

Un pequeño beso, el calor en su mejilla al ser acunada por una palma ajena y una respuesta es lo que recibe.

—Buenos días, corazón.

La sonrisa de ambos persiste por que recuerdan con vergüenza y diversión como fueron las primeras veces que el más pequeño (por unos escasos centímetros y uno que otro año) intento llamarlo por ese apodo meloso y fuera de sintonía para él.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Feb 09 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

➪MᴇʀᴀᴋɪDonde viven las historias. Descúbrelo ahora