Que el corazón decida

3. Besos profundos

Enfermería hace unas horas

La enfermera le limpiaba la sangre con algodón y agua y le puso una bandita en la nariz.

-Bueno, los dejaré solo unos minutos, cuando regrese espero que se hayan ido a su clase los tres tendremos problemas.—Se fue molesta, pues Brandon era su mejor paciente frecuente.

Y la chica salió de la enfermería, dejando solo a Jasper y a Brandon, en un silencio no incómodo, tranquilo a decir verdad.

-Bra, ¿Cuando pensabas decirme?-El pequeño está al borde del llanto, pero no lloraría en la escuela.

-Hoy, a la hora de la salida, te iba a invitar a ir por un helado, para decirte.-Respondió con unas lágrimas saliendo de sus ojos.

-¡Es enserio Brandon!, ¡Se me iba a bajar la presión de solo escuchar que te vas a morir!—Jasper quería darle una cachetada a su amigo por ser tan tonto.

-Hey, El doctor dice que solo tengo 4 meses de vida, decirte mientras comíamos helado sería como amortiguar la información.

-De verdad Brand...—No pudo continuar, empezó a llorar, le dolía el corazón, le dolía estar perdiendo a su mejor amigo, y verlo ahí sentando con la cicatrices en su cara, tan relajado, como si no le causará nada en el hecho de que iba a morir.

-Jasper, ven, párate porfavor, ven conmigo.-Se bajo de la camilla y fue hasta donde estaba tirado llorando.-Te dije ven y te quedaste ahí, mejor desde el principio hubiera ido

-Idiota, idiota, idiota.-Empezo a decir y Brandon lo abrazo, pero Jasper empezó a pagarle en el pecho.-¿Cómo están tan...tan tranquilo?

-Ya lo asimile niño, no creas que no me dolió, si me duele, y mucho, ¿Pero que puedo hacer?, Ni las quimioterapias me podrán ayudar, el cáncer me lo detectaron ya muy avanzado.

Pero a Jasper eso lo hizo llorar más, y más, ¿Cómo era posible?, ¿Brandon no tenía salvación?, Sintió las calidas manos de Brandon en su cara, haciendo que su llanto parara un poco y abriendo sus ojos, y ahí estaba, ese chico de un hermoso pelo muy descuidado el cual se le veía cansado, sus ojeras y los hermosos ojos color avellana.

-Hay Jasper, tu no tienes remedio alguno, a pesar de ser ya un adolescente sigues siendo un niño inocente, muy inocente.—Brandon tomo de las muñecas a su amigo, pero este empezó a quejarse de una manera extraña—-¿Jasper?

-¿Si?-Queria evitar el regaño de su amigo, no quería que tuviera un coraje por sus acciones

-Tus muñecas, ahora.—Pero era tarde, ya estaba empezando a querer evidencia y explicación

-Ya voy.-Levantó las mangas de su camisa, y sorpresa, sus muñecas estaban llenas de cortadas en todas las direcciones, parecían recientes.

-¿¡Que es esto Jasper!?-Estaba realmente enojado, su tono lo demostraba.

Jasper solo bajo la mirada lamentando lo que hizo, pensó que absolutamente nadie, pero Brandon no era nadie, era su mejor amigo.