A Lie Song [#2 Libro De Letras, Canciones Y Amor]

Capítulo 2

—¿De qué demonios estás hablando? —dijo Leo a Thomas con una expresión aturdida en el rostro, Thomas lo miró entrecerrando los ojos, pero lo dejó pasar —. ¿Cómo que vamos a ser una pareja? No tiene sentido.

Leo la miró para ver su reacción, y ella aún seguía con la mirada perdida hacia en frente, analizado las palabras que acababa de escuchar.

—Es porque el programa lleva tiempo perdiendo audiencia, —murmuró sin apartar la mirada de Thomas quien asintió para confirmar las palabras de Agnes —. Pero, ¿cómo es que esto ayudará en algo?

—Ah, porque esta noticia conmocionará al público, lo que hablará de ustedes, y por ende, del programa —explicó de forma vivaz su director —. Es la perfecta oportunidad para rescatar el show, de no tener éxito tendrán que decirle adiós al programa porque no podemos seguir así.

Agnes se quedó pensando en esa posibilidad. ¿Qué se supone que haría cuando el programa no pudiera continuar? Este era su primer trabajo como presentadora en un programa, no tenía más experiencia. Le pagaban bien, pero no creía que la búsqueda de un nuevo trabajo fuera a ser fácil, ¿y si el dinero se le acababa antes? ¿Qué haría? En esos momentos no pudo evitar pensar en que debió ahorrar más dinero, para casos como estos. Dios, había sido una tonta por no pensar en un futuro como ese.

Por otro lado, Leo pensaba que si el programa terminaba solo le quedaría recluirse en su casa en el campo, tenía dinero suficiente como para irse y empezar de nuevo, ahora con un pequeño negocio en su pueblo natal, pero eso lo haría terriblemente infeliz. Claro, existía la posibilidad de encontrar otro empleo en el medio, pero no quería abandonar el programa que le había salvado de él mismo.

La idea de fingir una relación con Agnes le parecía ridícula, pero entendía el atractivo que su supuesta relación le haría al programa. Las personas eran entrometidas con la vida ajena, por supuesto que una relación entre dos personas enemistadas podía llamar la atención.

—¿Cuál es el plan? —preguntó Leo resignado. Luego volteó a ver a Agnes quien lo miraba con una cara confundida —. ¿Qué? ¿Prefieres que echemos por la borda el programa en el que hemos trabajado por casi dos años?

Agnes no respondió. Pensó en lo que fingir una relación implicaba. Aparentar que le caía bien Leo, ya de por sí le costaba bastante y ni siquiera había convencido a nadie, ahora fingir que le gustaba Leo iba a ser una tarea del demonio.

—Lo he hablado con los productores y les ha parecido una idea excelente —empezó, moviendo unos papeles sobre el escritorio —. En internet hay algunas ediciones de nuestros espectadores sobre ustedes —Cuando encontró la hoja que buscaba se la tendió a Leo, quien la miró y su ceño se frunció, luego se lo pasó a Agnes —. Les agradan al público, ellos creen que despiden una energía de atracción.

Agnes vio la hoja en su mano, era una publicación de una chica llamada Rhonda Williams que había subido una imagen de una pareja con los rostros de Agnes y Leo sustituyendo los de las personas en la foto que tenían los cuerpos enredados y el hombre besaba el cuello de la mujer, y tenía una leyenda escrita "¿Qué personas no están juntas pero desearías que estuvieran juntas?" Rhonda escribió:

Agnes y Leo del programa Today's Juicy Show. Ellos se toman el pelo de vez en cuando, existe una especie de enemistad entre ellos, pero ya saben lo que dicen del odio al amor hay solo un paso.

Maldijo a Rhonda por dentro. Ella qué sabía. Las demás personas estuvieron de acuerdo con ella.

Leyó otros de los comentarios.

Sí, tienes razón. Ellos tienen esa vibra de te odio tanto como te deseo ja, ja, ja.

Arrugó la nariz. ¿Desear a Leo? Bueno, debía admitir que cuando recién lo conoció le pareció irresistible con ese cuerpo perfectamente trabajado y si Leo nunca hubiera abierto la boca, tal vez no se le abría ido todo el encanto.