Única parte

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Era hora de salida, todos tuvimos que irnos pero Arely se quedó, ya que su mamá aún no llegaba por ella, tardaría aproximadamente una hora y media.

Ella estaba guardando sus cosas, pero dejó fuera un cuaderno y un lápiz para ponerse a dibujar recostada en el piso. En eso entro aquel conserje que a ella le parecía tan atractivo, trató de apartar su mirada de él pero fue imposible, ya que él le habló.

Conserje: ya no tienes clase, ¿verdad?

Arely: no, ya no.

Ella tomó sus cosas y se levantó rápidamente del piso para marcharse.

Conserje: ahh, no te preocupes, puedes quedarte, solo voy a dar una limpiada rápida —dijo mientras le dedicaba una sonrisa amable a Arely—

Arely: ¿si? Gracias.

Esta vez en lugar de ponerse a dibujar en el piso, Arely se sentó en una butaca de las de enfrente.

Conserje: uff, qué calor hace

El conserje comenzó a retirar su playera y al ver el esto, Arely se sorprendió porque pensó que él no llevaba nada debajo, sin embargo, no fue así, llevaba puesta una playera de resaque blanca. Arely no podía quitarle la vista de encima, sus brazos le encantaban, fue lo primero que observó en él desde la primera vez que lo vió.

Él le sacó plática a Arely, mientras se iba acercando cada vez más a su butaca, esto la ponía muy nerviosa pero también aumentaba sus ganas de tocarlo.

La puerta estaba cerrada, estaban completamente solos en el salón y tenían tiempo, claro que eso aumentaba la tensión.

De pronto Arely se levantó, se acercó aún más a él y pasó su dedo índice por su pecho de forma coqueta.

Arely: mmm... ¿sueles hacer esto o soy la única alumna a quien le has hablado?

Conserje: en realidad nunca había tratado de acercarme a una alumna pero... ¿sabes? Tienes algo, algo que me hizo querer acercarme a ti —dijo mientras hacía el cabello de Arely para atrás con suavidad—

Arely no paraba de pasar sus manos por el pecho de el conserje, luego pasó a sus brazos...

Arely: vaya brazos, eh

Poco a poco iban aumentando el contacto físico, él la sujetaba de la cintura y ella ponía sus brazos alrededor de su cuello. De pronto Arely sintió cómo se ponía dura la parte de abajo del conserje, eso la hizo confirmar que, en efecto, los dos estaban calientes, los dos se tenían ganas.

Se besaron lentamente, luego ese beso lento empezó a cambiar, se volvió un beso desesperado, al igual que la forma en que se tocaban, querían sentirse más y más. El conserje metió su mano en la playera de Arely para tocar sus pechos mientras ella rápidamente le desabrochaba el pantalón.

Fue muy repentino como de la nada y sin conocerse, una cosa llevó a la otra.

De pronto él ya estaba introduciendo su pene en ella encima del escritorio mientras la sujetaba fuerte de la cintura con una mano y con la otra le tapaba la boca para callar esos gemidos tan intensos que le causaba la forma tan brusca y rápida en la que lo hacían.

Finalmente, los dos se corrieron, esto le preocupó un poco a Arely porque claramente no usaron protección pero no iba a ser tan fácil librarse de aquel conserje después de lo sucedido...

Esta situación ocurrió varias ocasiones y en cada una de ellas lo disfrutaron al máximo a pesar de que tenían que cuidar que no los vieran, nadie podía enterarse (excepto yo c;).

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⏰ Última actualización: Oct 24, 2022 ⏰

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El conserje de la prepaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora