Kinkweek Rineider

Kink 4 & 5 Golden Rain/Shower

Kink: Golden Rain (ustedes saben bien que es, no se hagan v:) / Ducha

Planeaba subirlo anoche pero me quedé dormido.

Aquí tampoco haré una intro muy larga, diría que esto es simplemente... difícil de explicar (?)

Disfrútenlo y... si es que esta clase de fetiches les gustan :v

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¡Dios, era tan asqueroso de solo pensarlo!

Sabía que Schneider había pasado mucho tiempo con Till, ¡pero eso de compartir fetiches era mucho!

Oliver jamás pensó que fuera a pedirle algo así.

—¿Por eso me pediste beber tanta agua? —preguntó mientras se quitaba los pantalones, ropa interior y cualquier prenda inferior, quedando solo con su suéter de flores*.

—Quería asegurarme de llenarte bien para que saliera rápido, eso me recomendó Till —respondió el mayor, sentándose en el piso del baño.

—¿Y exactamente por qué hacemos esto aquí?

—Bueno... tu debes orinarte encima y el piso aquí es fácil de limpiar y secar, ¿no? —razonó con cierta pena.

Schneider si había estado hablando mucho con Till respecto a eso de explorar nuevas formas de excitarse, así como el en su relación con Flake (que tenía momentos tan intensamente bizarros como románticos); pasó largo rato diciendo sobre lo sano que era también, pues siempre ayudaba a formalizar una mejor intimidad como pareja.

Por supuesto que Christoph estaba algo escéptico sobre probar algo como comer y vomitar sobre Oliver o que esté masturbara su miembro con los pies (Till era muy descriptivo aunque nadie se lo pidiera), pero al final optó por algo... inofensivo, según su propio criterio.

Golden Shower, como esa canción que compuso Till en su proyecto solista.

Para Doom no era realmente la gran cosa, solo probarian si era tan bueno como decía Till. Oliver por su lado... estaba conflictuado.

—¿Seguro que quieres esto, Doomi? —se posicionó sobre su amante, separando las piernas y apuntando a su vientre al descubierto.

—No perdemos nada con probar, Ollie —le recordó nuevamente, aguardando a que su novio estuviese listo.

Y con una sonrisa apenada, Oliver hizo caso a la petición de Schneider. Quien cerró los ojos, ansioso por sentir la dichosa lluvia dorada de Riedel.

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El resultado de ese íntimo momento juntos, como probablemente adivinaron, fue un silencio verdaderamente incómodo.

Chris se metió a la ducha seguido de Oliver casi inmediatamente después de que este se orino sobre su vientre y pecho. No es que no hubiese disfrutado de la vista de un más que vulnerable y avergonzado Riedel, la sensación cálida de la orina también tuvo su encanto los primeros segundos, pero a juzgar por su falta de erección al terminar... ambos estaban de acuerdo en que algo como una "lluvia dorada" no era lo suyo.

—No le digas a Till sobre esto —pidió Oliver mientras se paraba bajo la regadera, necesitaria mucha agua para lavar la vergüenza sobre si mismo.

—Tranquilo, nunca podría ser tan transparente como él sobre esto —ambos rieron.