Al borde del fin

< 2 > Berhayat

Se escucho el lamento de un perro. Mucho en una circunstancia normal, común y corriente del diario vivir amonestarían esto o más aun lo denunciarían y sería algo que podría llegar hasta la funa, pero este día no era un día común y corriente, era el peor de todos.

Un perro ataco a Aybike mordiéndola, pero no era cualquier can. Este era indescriptiblemente monstruoso, con partes de su cara y cuerpo colgando o simplemente sin ellas y con mucha sangre corriendo por su cuerpo. En serio no podían creer como seguía vivo con la apariencia que tenía.

Tanto ella como Doruk y Berk estaban huyendo cuando los impacto un auto que también hacia lo mismo: escapar. Muy aturdidos salieron del auto y comenzaron a caminar como pudieron, con tal de no quedarse en un lugar y llegar a un lugar seguro, pero los planes cambiaron de un sopetón, cuando uno de esos endemoniados perros alcanzo a la chica y le mordió en la pierna quedando muy mal herida.

Ante el caos en las calles y la gran herida que debían sanar si o si, divisaron a lo lejos el Berhayat. Era de hecho lo mejor que les podía pasar. El mejor hospital de Turquía podía sin lugar a dudas albergarlos, además de sanar la herida de la esposa de Berk.

Los tacos en las calles y carreteras eran eternos y nada avanzaba.

ꟷ Amor, amor. ¿Cómo te sientes?ꟷ le pregunto el colorín a la castaña.

ꟷ Me duele mucho la pierna y la cabeza me da vueltas.

ꟷ Aguanta amor, aguanta que ya pronto llegaremosꟷ le dice mientras la carga en su espalda.

Doruk iba adelante tratando de encontrar una moto o algo con lo que se pudieran transportar que no fuera un auto. Miraba para todos lados sin encontrar algo útil. Como podía ser de increíble que justo el día que necesitaba una no hubiera ninguna o alguna que estuviera útil.
Pero vio una oportunidad, de la cual sabía que se arrepentiría por toda su vida, pero era eso o la chica de su amigo podría empeorar y hasta morir.

Una moto aun encendida de un policía estaba ahí llamándolo. Pero ¿Y si el policía la necesitaba? Estaba muy titubeante sobre qué hacer o no, pero en ese momento fue egoísta y pensó en ellos, así que, por más chistoso que pareciese, en medio del caos miro hacia todos lados y se sentó en la moto y se fue para buscar a sus amigos.

Doruk iba raudo mientras su amigo abrazaba a la sufriente chica que ya padecía fiebre. Esquivo todo lo que se le presentaba y hasta casi choca. Todo para llegar al Berhayat que ya estaba a la vista.

ꟷ ¿Cómo está?

ꟷ Tiene mucha fiebre y…ꟷ su voz denotaba demasiada preocupación y sintió que se quebraba.

ꟷ Ya estamos cerca Berk ya casi llegamos.

A penas llego paro y ayudo a su amigo a llevar a la chica entre los dos para que la atendieran. Entraron y lo primero que hicieron fue llamar la atención para que la atendieran, pero un desplante de guardias que salieron desde muchas partes comenzó a cerrar todo. Estaban muy armados.

Para los chicos era algo a lo que no estaban demasiado acostumbrados, a que la suerte estuviera siempre de su lado o eso es lo que creían.

ꟷ ¡Por favor! ¡Algún doctor! ¡Necesito ayuda!

Un delgado y alto medico aparece acudiendo al llamado desesperado.

ꟷ ¡¿Qué le paso?!

ꟷ Estábamos tratando de escapar de una horda de gente salvaje y un perro mordió a mi novia.

El doctor se quedó inmóvil al escuchar aquello y trato con lentitud de ver cómo era la herida. Sus temores estaban bien fundados. El problema es que no le habían dicho a ninguno de los atendidos de ello lo que sabían y cuál era su destino.
El novio de la chica estaba desesperado, mientras el amigo le reclamaba por la atención ante su congelamiento.