007 - Cuando Lo Sepas

1.3K 112 14
                                        

Regresé a casa con una sonrisa en mi rostro.
Además de toparme con un adorable gatito mientras caminaba, encontré la brisa más fresca y calmante durante mi caminata, lo cual me relajó bastante. Hoy el día no podía arruinarse, había hecho una nueva amiga, la mejor para ser específico.
─¡Mamá! ─la busco cuando llego a casa─. Mamá ¿donde estas? ─la encuentro en su habitación ─sonrío y la ayudo a doblar la ropa.
─¿Qué sucede, jovencito? ¿Por qué de la nada me estas ayudando?
─Yo siempre te ayudo ─ella sonríe y me besa en la mejilla.
─Mamá...
─¿Qué sucede?
─Sábes que mis calificaciones han subido considerablemente estas últimas semanas.
─Aún tienes que presentar un examen para probar que has mejorado en inglés.
─Sin embargo...
─¿Qué quieres? ─me mira a los ojos. Sonrío.
─Mamá, hay un gato que esta abandonado en las callles, y es muy lindo, creo que le gusto, lo he visto ya unas cuantas veces cuando vengo de las clases de reforzamiento... Y quería saber si podemos adoptarlo. Lo cuidaré , lo bañaré y dormirá conmigo hasta que pueda ser responsable de él y vaya conmigo a la universidad, por favor, mamá.
─No lo sé, Riki, deberías hablarlo con tu padre, debemos estar de acuerdo ambos, sino, entonces tendrás que saber que no.
─¿Pero tú estas de acuerdo?
─Creo que eres responsable como para criar una mascota, así que sí, pero debes tener la aprobación de tu padre ─sonrío.
─¡Lo haré! Le preguntaré a papá, gracias, mami ─salgo a buscar a papá y lo encuentro en el patio de enfrente, estaba apunto de sacar a Bisco a pasear y a hacer asus necesidades─. ¡Papá, espera no te vayas! ¿Puedo tener una gato? ─él se me queda mirando extrañado por la repentina pregunta.
─Pensé que ya tu madre te había dado permiso, no por nada lo traerías a casa y lo dejarías detrás de los arbustos.
─¿Eso significa que estas de acuerdo?
─Sí tu madre lo está no tengo ningún problema.
─No puedo creerlo ¡hoy es el mejor día de mi vida! Gracias Papá ─corro a buscar al gatito escondido y lo llevo a mi habitación.

Me cambie el uniforme y lleve al gatito conmigo. Tome dinero de mi mesada y fuí a comprar algunas cosas: comida, juguetes, jabón especial para bañarlo, arena para gato (y un arenero), platos para servir la comida y el agua, y una pequeña cama para que duerma. Sonreí satisfecho y fui a pagar todo.

─¿Riki? ─alzó la mirada y me encuentro con Kairi. Estaba en su uniforme de la escuela y me miraba con una sonrisa.
─Kairi, ¡Hola! ─sonrío también.
─No sabía que tenías un gato, es gracioso que lo lleves en tu mochila ─se ríe.
─Lo acabo de adoptar, estoy muy feliz porque mis padres de dieron permiso.
─Ya veo ¿y cómo lo llamarás?
─Aún no lo sé, ni siquiera sé si es niña o niño.
─Cuando lo sepas me dices ─asiento.
─¿Vives cerca de aquí? ─pregunto un poco dudoso de si debí hacerla en un principio.
─Sí... ¿Tú igual? ─asiento.
─Te acompañaré a casa ─le digo.
─Está bien ─camino a su lado y nos vamos juntos.

La Tutora | NI-KI | [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora