El pozo sin fondo

El reencuentro

El día estaba soleado y muy bonito, la familia llegó al aeropuerto con tiempo de anticipación, para poder hacer todo lo del check in, y abordar sin ningún tipo de contratiempo.

Ya abordó, a los niños les tocó sentarse juntos, y mientras despegaba el avión comenzaron a imaginarse el reencuentro que tendrían cons sus padres, Dante dudaba de la impresión que darían sus padres y pensaba en que no sabrina de su existencia, Leeane por el contrario imaginaba las sonrisas que pondría sus padres al verlos.

Los Bernosky se encontraban en su casa, recordando a sus pequeños, cuando de pronto el timbre comenzó a sonar, la señora Bernosky fue a abrir la puerta y ahí miro a los dos pequeños gemelos, una niña con ojos brillantes y un niño con una hermosa sonrisa, lo primero que hizo la señora al verlos fue decir sus nombres.

Leeane, Dante, los niños voltearon con expresión de atención en su cara, la señora comenzó a llorar, entonces su esposo se acerco y escucho a Abraham; me presento soy Ambraham Chladek, y ella es mi esposa Alicia, ellos son mis hijos Alicia y Julian.

Pero desde hace un tiempo, los niños no dejan de decir que usted y su esposa son sus verdaderos padres, los niños interrumpieron la conversación entrando bruscamente a la casa directamente a su habitación.

Los pequeños se alegraron de que sus padres no tiraran sus juguetes y comenzaron a cantar la canción de cuna que su madre les cantaba cuando eran niños.

La señora Bernosky, no dejaba de llorar, entonces los niños corrieron hacia ella y la abrazaron, le dijeron que siempre estarán para ella y que todo estaría bien.

El señor también abrazó a sus hijos, todo parecía perfecto, algunos pensarían que este sería un final feliz, pero no.

Alicia (la nueva madre), dijo; comprendo su dolor, comprendo que sus niños ya no están, pero yo no puedo darles a mis hijos.

Ellos son la luz de mis ojos y no los cambiaría por nada, así que con voz cálida llamó a sus pequeños: Alicia! Julian!, los niños no le prestaron atención y siguieron abrazando a su madre.

La señora Bernosky al escuchar las palabras de Alicia, entendió que sus hijos no podían quedarse y que era mejor no hacerse ilusiones ya que ella y su esposo ya sabían que sus hijos ya no volverían.

Dante al igual que la señora, entendió la situación y dándo un beso en la frente a su madre, se despidió, Leeane hizo lo mismo.

Ya antes de irse, Dante le dijo a su madre: en aquel pozo, están mis restos, porfavor sacame de ahí, y cuida mi figurita recuerda que era mi favorita.

Así sin más los pequeños se fueron con sus nuevos padres Alicia y Abraham, porque tenían mucho que vivir y les parecía corta la vida para hacerlo.

La vida es muy corta, trata de disfrutarla, no te preocupes por el pasado, hay cosas en tu futuro que aún te esperan. (Elizabeth E.)

Años despues…..

Pasado el reencuentro, los niños casi por arte de magia olvidaron su vida pasada, y vivieron su vida felices.

Por desgracia, la señora Bernosky falleció apenas 1 semana después de aquel encuentro, de muerte natural y el señor murió meses después, de un infarto al corazón.

Años despues se encontraron los restos del pequeño Dante y fueron enterrados cerca de sus difuntos padres, dejandolo descansar porfin en paz.