Sinopsis

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-Hola fea.

Se sienta a mi lado y me da una sonrisa de lado a lado.

¡Hay odio cuando me dice fea!

Pero es que es tan...lindo.

Con su calzadora negra y vaqueros viejos, su pinta de chico sexy motociclista, uuf lo amo.

Pero claro, como dice mi hermano y su estúpido ley de chicos "Las hermanas de los amigos no se tocan"Argh odio esa frase, porqué mi hermano se busca amigos tan guapos?

Es que...miralo tan lindo con sus cejas gruesas bien fruncida, su boca entreabierta dándose a ver sus parejos y hermosos dientes-en cambio los míos son una montaña con más de mil envergaduras-Su rostro es tan perfecto tan angelical...

-Oye fea, despierta, tal parce que tienes orgasmos cada vez que me ves.

Si supiera...

Muevo mi cabeza hacia los dados saliendo de el echizo Darwin, ah sisi este perfecto ser se llama Darwin, no es perfecto?

-Q-que dices Darwin, ey y no me digas más fea.

Le pellizco el brazo, que manía tiene de decirme fea.

-Hay tu eres mi fea favorita, con algo eres la hermana de mi mejor amigo.

-Soy fea?-Quise preguntarme a mi misma y lo dije en voz alta.

Que estúpida soy...

-Claro que no mi fea, eres hermosa.
Me sonrie y me pellizca un cahete.

Me dijo hermosa y me pellizcó un cahete, es el gesto más lindo que ah tenido Darwin desde que teníamos doce años y me regalo un flor y me dio un beso en la mejilla.Desde ese día ah sido mi mejilla favorita.
Sin darme cuanta mis cachetes se calientan y se tiñen de rojo.

Estoy sonrojada, el me tiene sonrojada.

No me puede ver así, no no.

Me levanto rápido de la silla y me dirigo ah el baño.

-A donde vas fea?
Me pregunta Darwin.

-Al baño, cosas de chicas.

-No te tardes fea.

Me alejo rápidamente y entro en el baño, me dirijo a el lavabo y abro la pila de el agua, me enjuago la cara y me miró a el espejo y digo.

-Soy un estúpida y tonta fea.

Y me río, me río, suelto una carcajada para el espejo, para mi, para mi reflejo.

Pero mi risa es cortada por el sonido de un tanque de bater.

Tengo compañía.

Se abre la puertecilla de el tercer cubículo y...sale un hombre.

Un hombre sí.

-¿Que haces en el baño de mujeres, pervertido de mierda?-Busco mi bolso para ver que puedo cojer para defenderme y me doy cuenta de que no traigo el bolso, lo deje en la mesita de la cafetería.

Oh oh, y ahora con que me defiendo si me quiere violar...los zapatos, los zapatos como no lo pensé antes. Le tiro un zapatazo y le doy Fatality.

Miro mis zapatos y...genial traje tacones, perfecto para la ocasión.

-Eh, Eh Tranquilizate no te voy hacer nada, y en este caso debería preguntar yo que haces aquí.

Su voz es demasiado sexy para mi gusto.

Pero esta loco que hace aquí, y que se cree esté.

-¿De que hablas?

-Este es el baño de hombres.

¡¿Queeeee?!

-¿Que?

Asiente y me apunta con el dedo hacia el cartel que está pegado encima de la puerta diciendo " Baño de hombres"

¡¡Oh My Good!!

El chico misterioso suelta un pequeña risa y se cruza de hombros.

-Parece que alguien muy apurada no se fijo en los carteles de la puerta.

-L-lo siento, yo...venía muy apurada y pensé que este era el de mujeres.

-Ok, ok no le diré  a nadie-me guiña un hojo y me da una sonrisa de medio lado-Te oí hablar.

Me escuchó, oh no, escuchó lo que dije.

Mis cachetes se vuelven a ruborisar.

-Ajaja, bueno me tengo que ir, bye estúpida y tonta fea.

Me paralizo y veo como se aleja.

¡¿Que es lo que acaba de pasar?!

El chico de el baño de la cafetería Donde viven las historias. Descúbrelo ahora