Mi preciado tesoro

63 9 2
                                    

Muchos piensan que por ser de una familia importante no te falta nada,
puedes tenerlo todo y a la vez no tener nada

puedes actuar como una persona feliz y alegre, cuando por dentro estás muriendo, sufriendo con un dolor interno

esto es algo que la heredera de uno de los clanes más importantes vive día a día,
no es algo desconocido que su padre la desprecie por ser un estorbo, por ser débil... por ser amable

verdaderamente nadie le tiene respeto, la "amabilidad" con la que la tratan solo es lastima. Konoha, su aldea, nadie la toma en cuenta, solo es una habitante más.

Ella es una persona invisible a los ojos de sus compañeros de academia. Con las nuevas normas nada mejoraba, todo estaba llendo contrario a sus planes

Las reglas para ser ninja eran ir a la academia por cierto tiempo hasta convertirte en Genin he ir subiendo el rango de misiones.

Su plan era llegar a este rango para empezar a ser una ninja activa y ausentarse por las misiones para no estar en la aldea, para intentar ser libre.
Lo único que la atormentaba era la preocupación de dejar a su pequeña hermanita

Pero sus planes se vieron afectados con la nueva jerarquía shinobi.

Dónde consiste en ir a la academia hasta los 15 años de edad, todo esto estaba clasificado por rangos.

Lo único bueno de todo esto era que podría estar más tiempo con su hermana.





Era de tarde, el sol ya se estaba ocultando y la heredera regresaba a su hogar después de un largo día en la academia

Al entrar a la gran residencia fue recibida por algunos miembros de la rama secundaria.
Esto no era nada extraño, sabía que si la trataban bien no era porque de verdad lo mereciera, solo era para no ser castigados con el sello del pájaro enjaulado

Al abrir la puerta de la casa fue recibida por su pequeña Hanabi

—¡Hermana!—

Grito con clara alegría en su voz mientras se abalanzaba hacía su hermana

—Hanabi— sonrió al ver que la pequeña la había esperado —¿Que estás haciendo aquí? Deberías estar descansando— pregunto con confusión a la vez que dejaba sus cosas en un pequeño mueble situado junto a la entrada.
Normalmente su hermana descansaba de sus entrenamientos a esta hora

—Te estaba esperando para comer— Respondió con una sonrisa

—Vamos entonces— dijo agarrándole la mano





La pelo iridiscente se encontraba tomando un baño, está era su rutina después de un largo día

Al salir, vio que si hermana estaba sentada en su cama con un libro en manos

—¿Que haces aquí? Deberías estar durmiendo— pregunto con una pequeña sonrisa

—Quiero que me leas un cuento, luego iré a dormir, lo prometo— respondió mientras le entregaba el libro a la mayor

La Hyuga agarro el pequeño cuento —Esta bien— se acomodaron en la cama, entonces empezó a leer

"El conejo en la luna"

Al terminar de leer, noto como la castaña había quedado profundamente dormida, le dió un beso en la frente y se acomodo para dormir

—No permitiré que te hagan daño mi luz—

Fue lo último que pronunció antes de quedar profundamente dormida.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 10, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Venganza para mí luzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora