The Mummy.

-"Reviviendo al mal"

-Oh, he soñado esto desde niña.-Dijo mamá al ver que ellos sacaron la tumba del sarcófago.

-¿Soñabas con estas cosas?.-Le preguntó O'Connell incrédulo.

-Miren la escritura sagrada esta labrada, este hombre debió ser condenado no solo en esta vida si no que en la siguiente también.-Explico mamá.

-Que conmovedor.-Tío la abrió con la llave y al abrirla salió una momia a lo que a ambas gritamos.

-O Dios mío, odio cuando hacen eso.-Exclamo Mamá.

-Que feo.-Exclame al verlo.

-Debe lucir así, ¿No?.-Dijo O'Connell.

-No, nunca había visto a una momia como esta. Él esta aun...-Explico Mamá.

-Jugoso.-Terminamos los tres.

-Sí. Debe tener más de tres mil años y aun parece estar en descomposición.-Me acerque a la tapa.-¿Qué esto?.-Ellos se acercaron también.

-Esas marcas fueron hechas con las uñas, este hombre fue sepultado vivo.-Dijo Mama, y la mire con asombro.-Y dejo un mensaje, "la muerte es solo el comienzo".-Volteamos a verla, pero yo con miedo evidente.

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Camine con mamá y miramos al otro explorador con un libro, se nos vino una idea en la cabeza.

-Necesita una llave para eso.-Le dije y ambas nos alejamos.-¡Miren lo que encontramos!.-Dije corriendo hacia O'Connell con un esqueleto de escarabajo.

-Estas en sus lugares, ¡Fuera!.-Le dijo a Benny y me senté a su lado mostrándoselo.

-Es un esqueleto de escarabajo carnívoro.-Dijo mamá mientras lo mostraba.-Lo encontramos en el sarcófago de nuestro amigo, pueden permanecer vivos durante años comiendo las carnes de un cadáver.

-Para desgracia de él, estaba vivo cuando empezaron a comerlo.-Termine yo mostrándolo.

-Entonces lo enterraron y los dejaron comérselo vivo.

-Muy lentamente.-Le respondí con una sonrisa.

-Seguramente no era un sujeto popular.-Dijo uno de los norteamericanos.

-¿Quién era?.

-Bueno, tal vez tenía un romance con la hija del faraón, ¿No creen?.-

-De acuerdo a mis estudios nuestro amigo sufrió el jondaí la peor de todas las maldiciones antiguas egipcias reservadas para los blasfemos, en toda mi investigación nunca supe que esta maldición fuera ejecutada.-Explico mamá.

-Era terrible.-Dijo O'Connell.

-Sí, ellos jamás la usaban por que le tenían miedo.-Dijo mamá.

-En un libro decía.-Empecé.-Que si la victima del Jondaí alguna vez revivía traía consigo la maldición de las diez plagas de Egipto.-Comenté y mamá me miro orgullosa.

Estaba cerca de la fogata mientras miraba a mamá que se acercaba con el libro que le vimos al profesor.

-Sabes que eso se le llama robar.-Dijo O'Connell asustándome.

-Según mi hermano y tú se llama pedir prestado.-Le pase la llave que le quite a Tío para abrirlo.

-Creí que el libro de Hamunrap estaba hecho de oro.

-Está hecho de oro, este no es el libro esto es otra cosa. Creo que es el libro de la muerte.

-¿El libro de la muerta? ¿Están seguras que quieren jugar con eso?.-Nos dijo O'Connell.

-Solo es un libro, no puede hacernos un mal leer un libro.-Al abrirlo provoco que un viento nos golpeara asustándonos.

-Eso pasa con frecuencia, ¿Y qué dice?.-Mamá empezó a leer en el lenguaje mientras estábamos atentos.

-¡¡NO!!.-Dijo el profesor.-No debieron leer ese libro.-Todos se despertaron y miramos a la entrada como de lejos se acercaban insectos.

-Corran.-Mamá tomo mi mano para guiarme mientras seguíamos a los demás para ocultarnos y protegernos.

Caminamos con cuidado hasta que un temblor se hizo presente y como una especie de montaña pequeña apareció enfrente de nosotros por el cual salieron los escarabajos.

-Corran.-Corrimos hasta salir a un pasadizo extraño y saltamos con mamá a un lado pegándonos a la pared mientras los escarabajos seguían el paso.

-Mamá.-La agarre al sentir que algo detrás de nosotros se abrió llevándonos a otro lugar.-¿Dónde estamos?.

-No te vayas a perder.-Me dijo mamá y la agarre de la mano, pero escuchamos unos sonidos, miramos a uno de los norteamericanos.-Gracias a Dios, estábamos asustadas. Perdimos a todos.-Él volteo a vernos y no tenía ojos a lo que gritamos.-Por Dios.-Caminamos hacia atrás pero una momia apareció asiéndonos gritar.-Quédate detrás de mí-Saque la navaja cuando llegamos hasta una pared mientras nos miraba.-Por favor ayúdenos, no nos deje.

-A¿Ank-su-namun?.-Pregunto la momia y solo la mirábamos mientras intentábamos escapar.-Ven conmigo, mi reina Ank-su-namun y princesa.-Nos dijo a ambas.

-Aquí están, dejen de jugar a las escondidillas vámonos.-Dijo O'Connell llegando a nosotras, pero volteo a donde nosotros mirábamos gritando.

-Evelyn, Cleo.-Escuchamos a tío que también se asustó, la momia grito y O'Connell también disparándole.

-Vámonos.-Nos jalo a ambas para correr y al salir nos encontramos a los mismos hombres que casi nos mataban la otra noche.

-Les dije que se fueran o morirían, se negaron ahora podemos morir al liberar la criatura que le hemos temido por más de mil años...-

-Tranquilo, ya lo mate.

-Ningún arma mortal podrá matar a esta criatura, no es de esta tierra.-Trajeron al otro hombre que nos encontramos.

-Que malditos.

-¿Que le hicieron?.

-Solo lo salvamos, antes de que la criatura terminara su trabajo. Ahora váyanse antes de que termine con todos ustedes.-Dijo en un lenguaje a unos que fueran por donde salimos.-Ahora tenemos que cazar y pensar en cómo lo mataremos.

-Ya te dije que lo extermine.

-Escucha esto, esta criatura es portadora de muerte. Jamás dormirá, jamás comerá y jamás podrás detenerla.-Dijo por última vez antes de irse con su grupo.

Al salir rápidamente tomamos los camellos para huir llegando a la ciudad en donde nos hospedamos.

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