Infinitamente, te amo.

Único

Es mi fiesta de cumpleaños: hoy por fin cumplo diez. Mi mejor amigo Minho ha venido a jugar conmigo; lo trajeron sus padres.

Sin embargo, en la fiesta hay un anciano muy bonito que no deja de mirarme. No le conozco, me pone muy nervioso. Me sonríe, pero yo sigo jugando sin hacerle caso, con el corazón latiendo muy rápido, como cuando corro una maratón para conseguir una paleta grande de colores.

Minho y yo fuimos al patio a jugar con la pelota, pero, aún puedo sentir la mirada de ese anciano de bonito rostro. La madre de Minho nos llama para comer pastel, un pastel grande lleno de chocolate y figuritas de Iron Man, es mi super héroe favorito, TIENE UN TRAJE ROJO QUE HACE BUSHHHHHH PLASHHHH CUANDO VUELA, seré como él cuando sea grande le digo a mi mami.

Aunque es raro que ni mami, ni papi estén aquí, ellos jamás se pierden mi cumpleaños, menos el número diez, ellos dicen que ese número es mágico y trae muchas sorpresas, tal vez por ello no han venido traen mis sorpresas, TAL VEZ SEA UN IRON MAN GRANDE, ASÍ COMO UN EDIFICIO, SON ENOOOOORMES. Minho me saca de los pensamientos para decirme que debemos lavarnos las manos.

Subimos corriendo las escaleras de mi casa, pero, una fotografía hace que detenga el camino al baño, es una fotografía del anciano bonito con otro hombre, el anciano bonito se ve muy joven, unos ¿20 años? Es muy bonito, tiene el pelito rosa y una sonrisa que hace que sus ojitos se escondan por sus abultadas mejillas, el otro hombre no me agrada, sostiene la cintura del anciano bonito con una sonrisa arrogante, frunciendo el ceño le saco la lengua al hombre arrogante de la foto; escucho una suave risa, así que giro mi cabeza a la derecha y veo al anciano bonito.

¿Le has sacado la lengua a una fotografía? -pregunta con una dulce mirada.

Y-yo no no, jamás le sacaría la lengua a usted señor -respondo rápido y atropelladamente.

Hey! Esta bien Jungkookie, entonces, sino fue a mí, ¿es al hombre apuesto a mi lado? - dice con gran confusión, pero con una pequeña burla en sus ojos. Aguarda, ¿le a dicho apuesto?

¿Apuesto? Es horrible, ¿por qué tiene una fotografía con él? Debería quemarla o ¿tal vez recortarla para que solo se vea usted? No me agrada, ¿Por qué le toma de la cintura? ¿Quién se cree? -muchas preguntas salen sin pensar, estoy enojado y al parecer no soy bueno disimulando.

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Jungkookie

Jungkookie

Jungkookie

Jungkookie

Jungkookie

........

¿Cómo el anciano bonito sabe mi nombre? ¿Debería preguntarle? No, mejor no, así que con una suave inclinación, me despido y el anciano bonito me deja ir.

Al llegar al baño, hay una foto del hombre de la fotografía, sin embargo es muy viejo ahora, así que, me río suavemente, llamando la atención de Minho, aunque no le presto atención, tal parece que al hombre arrogante no le sentó la vejez. Después de lavarnos las manos, nos sentamos en la mesa y el anciano bonito se sienta a mi lado, ahora que lo pienso, no se el nombre del anciano bonito.

El anciano bonito, cuyo nombre no se, me acaricia suavemente el brazo, esa caricia pasa a mi cuello y luego cabello, es cálido y casi familiar.

Minho llama al anciano bonito, como abuelo, es su abuelo, eso significa que el hombre de la fotografía es su esposo, mi ceño se frunce más, ahora si que estoy enojado. Aparto mi cuerpo de su suave y pequeña mano y no dejo que me toque más, aún si anhelo que me abrace.

Me voy con Minho a la sala a ver una película, aunque no le pongo mucha atención, mi mente está donde el anciano bonito, que resulta ser el abuelito de Minho, él habla con los padres de Minho, han llegado para llevárselo, pero, mis padres no han llegado y Minho no verá los regalos y sorpresas que traen.

El anciano bonito llega a la sala y se sienta a mi lado, pasa un rato y en cierto momento, el anciano bonito y yo nos quedamos solos. Él aprovechó para acercarse y me dio un beso que aterrizó casi en la boca. Esto me incomodó y me puso demasiado nervioso, no supe como reaccionar y empecé a llorar.

Por fortuna, mi amigo Minho vino a interrumpir la escena. Me jaló del pantalón mientras alzaba la cabeza. -¡Ven, abuelito Jeon! Mi papá ya trajo tus regalos, creo haber visto la forma de Iron Man-giró para ver al anciano bonito-. Oye, abuelito Minie, ¿hay que vendar sus ojos?