capítulo 1, el café

5 0 0
                                    

Al final acabe llegando 15 minutos tardes, esto es molesto, puedo escuchar a mi jefa regañando me por llegar tarde cuando ella solo llegó unos minutos antes que yo, asintiendo a lo que decía sin prestarle una real atención pase a su lado camino a mi escritorio, realmente odio mi trabajo, es agotador, aunque no hablo con la gente ya que me encargo de los correos aún se puede insultar mucho a través de ellos sabes? Nisiquiera quería trabajar aquí, no es mi tipo de trabajo ideal, realmente se podría decir que mi verdadera vocación es la caligrafía pero... Digamos que en esta sociedad trabajar de algo como la caligrafía, la música o el arte es básicamente rogar para que la gente te llamé muert@ de hambre y creo que ya tengo suficiente con ser la rara del grupo solo por qué no me gusta hablar con los demás, acomodando mi cabello siento un largo suspiro apoyando mi espalda en la silla y observando al reloj en la pared a mi izquierda, eran más 8:20 de la mañana, dándome unos golpecitos en las mejillas me mire a mi misma en el reflejo del monitor de mi computadora apagada - Vamos Samantha, es hora de trabajar -.

Encendiendo mi computadora me quite la chaqueta y abrí mi maletín sacando algunos papeles con correos electrónicos y un bolígrafo rojo y dorado de punta fina, poniendo todo en el escritorio abrí la sesión en mi computadora y empecé con el aburrido y tedioso trabajo de enviar anuncios a los diferentes correo electrónicos.

Unas horas después me levanté, mi jefa me acababa de llamar, enviando un último correo me dirigí a su oficina que estaba al lado de la máquina de cafés, entrando ví a mi jefa sentada, me hizo una seña para que me sentará en el asiento frente a ella y lo hice. - Buenos días Samantha, ¿sabes para lo que te he llamado aquí? - Negué con la cabeza - Bueno verás, está mañana tu compañero ¿Mauricio se llamaba? Sufrió un accidente y como vimos que tú eras la más desocupada... Pues queríamos pedirte si podrías quedarte unas horas extra para hacer su trabajo - dijo con aquel acento español que tenía pues resulta que ella era española, solo falta a el que dijera "Tía" y listo, española al 100%. También sabía que ese "pedirte" es más bien obligarme a quedarme aquí y hacer el trabajo de Mauricio, que espero y este bien, como siempre mi jefa siguio contándome y explicándome que tenía que hacer y todo el show, casi quería rodar los ojos, casi pero no podía, después de un rato me dejó salir, al fin, suficiente tenía con las nuevas horas extra, levantándome me dirigí a la puerta y la abrió y una chica que estaba a punto de entrar se asusto y soltó lo que tenía en sus manos haciendo que cayera sobre mi camisa, mierda era café! Por suerte no estaba muy caliente, pero carajo, mi camisa era blanca, rápidamente pase de ella y corrí hasta mi escritorio y tomando varias servilletas que tenía ahí de cuando traía comida a la oficina y siempre guardaba las servilletas, rápidamente las coloque sobre las manchas de café y empecé a tratar de secar mi camisa, carajo este día no podría ser peor.

_______________________
______

Gaby: Hmnnn creo que esto está bien y tu?

Bff: creo que es aceptable, pero luego de leer lo que decía que la jefa de Samantha era española eh empezado a leer el resto con acento español, lol

Gaby: x2 jaja igual me esforcé y tengo más ideas para el futuro.

Bueno adiossss

La aburrida vida de una locaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora