VOLVER A EMPEZAR (Jamie Dornan fanfic)

CAPÍTULO 1

Perspectiva de Jamie:

Estoy sentado en el césped del parque, Amelia en mi regazo, mi hermosa Dulcie jugando con unas muñequitas al lado nuestro. Esto es lo que llamo perfección, estos pequeños momentos lejos de las cámaras, con la mujer que mas amo y mi hermosa hija. Parece un sueño...

Es un sueño...

Despierto en la cruda y triste realidad en la que vivo hace seis meses. Amelia se fue, se llevó a mi Dulcie y no las he vuelto a ver. Amelia me pidió el divorcio, no quería dárselo, la amaba, la amo y siempre la amaré, pero no tuve otra opción y se lo di.
Hace siete meses mi vida era perfecta a pesar de que no teníamos un momento de tranquilidad con los paparazzis persiguiendonos y esas cosas, que son consecuencia de ser famoso.
Nunca creí que hacer lo que me gustaba iba a tener tales consecuencias...

Flashback

Llegamos a nuestro departamento después de un hermoso día en familia. Amelia prende el televisor para que Dulcie vea sus dibujos animados, va pasando de canal y están dando una noticia mía, le digo con la mirada a mi esposa que deje, quiero saber que inventan ahora de mi, como tantas veces anteriores: «Jamie Dornan no será mas Christian Grey» o «La esposa de Jamie Dornan no esta de acuerdo con que sea Christian Grey» puras patrañas.

- A continuación conoceremos a Violetta Stevenson, la chica de apenas 18 años que asegura estar embarazada del actor Jamie Dornan - dice el presentador del programa de chismes, me quedo helado, tieso, boquiabierto, ¿COMO CARAJOS PUEDEN INVENTAR ALGO ASI?.
Amelia me mira, esta por llorar, la voy a abrazar pero ella se aleja de mi ¿en serio creyó en eso?
- Amelia - apenas pronuncio, estoy en shock.
- Alejate! No me toques! - me grita, Dulcie nos ve pero no entiende, Amelia la toma en brazos y se van al cuarto, voy detrás de ellas pero se encerraron.
Mierda!
- Abreme por favor! - suplico - tenemos que hablar, ¿a caso vas a creer en los que dicen ellos? - estoy por llorar, no puedo creer que esto me este sucediendo - abreme - golpeo la puerta.
- Que quieres que hablemos? De como te acostaste con una chica de 18 años!! Y que además la dejaste embarazada!!! - me grita, siento el odio y el dolor en sus palabras.
Me destroza escuchar esas palabras de la mujer que amo. No entiende que eso es falso, que nunca haría algo como eso, que la amo, que es la razón de mi existir junto con Dulcie.
- Nunca haría algo como eso, entiende que lo único que quieren es perjudicarnos - estoy llorando.
No responde, golpeo la puerta pero nada, me siento al lado de la puerta, pongo mis manos en mi cara y sigo llorando. ¿Que ser sobre esta tierra puede inventar algo así? ¿Con que finalidad? ¿Fama? ¿Dinero? ¿Destruirnos? ¿Que?
Me quedo esperando a que ella salga pero no lo hace, me duermo ahí, al lado de la puerta, si ella sale lo notaré y podremos hablar con mas calma sobre todo este invento.
Despierto al otro día, la puerta del cuarto está abierta, entro pero no hay rastro de ellas, las busco por todo el apartamento y nada...

Fin de flashback

Lo ultimo que viví con mi esposa fue una pelea. Nunca me dejó explicarle que todo eso era falso. El día de la firma del divorcio ella no se presentó, solo su abogado, el juez dictaminó que la custodia de Dulcie sería de Amelia, tengo derecho de visita cada fin de semana pero desaparecieron, no se donde encontrarlas, no están en la casa de mi suegra, bueno ex suegra, ni de sus amigas, ni en ningún hotel, no me imagino en donde estarán.
Extraño a Amelia, extraño su sonrisa, las caricias que me hacia al despertar, todo... La necesito, igual que a mi pequeña Dulcie con sus besos pegajosos típicos de una niña de dos años y medio, el entrevero de sus palabras que querían decir mucho pero que al final no decían nada o simplemente verla dormir...
Últimamente he recurrido al alcohol, dicen que no es bueno pero es el único que me ha acompañado estos meses de soledad. A veces salgo a comprar algo para comer, preferentemente de noche para que los paparazzis no me vean y me hagan preguntas estúpidas. No quiero morirme de hambre, prefiero caer en un coma etílico y nunca despertar si la mujer que amo y mi hija no vuelven junto a mi.
Estoy solo en mi sucio apartamento, tengo un montón de antidepresivos en mis manos, coloco una pastilla en mi boca, la ayudo a tragar con un sorbo de ron, otra pastilla, otro trago, comienzo a recordar lo perfecta que era mi vida y en el infierno que se ha convertido. Quisiera conocer a esa tal Violetta, recriminarle todo lo que ha hecho, otra pastilla, otro trago de ron, pero ahora no, ahora no hay tiempo, mas pastillas, mas alcohol, hasta que pierdo la cuenta.

Todo es oscuro...

Abro los ojos, la luz blanca me incandila ¿ya me morí y estoy en el cielo? No, no lo creo, estoy en una cama, siento dolor de cabeza y un inmenso malestar estomacal. No estoy muerto, una vez mas fallé, seguramente estoy en el hospital pero ¿como llegué a acá?
Llevo unos minutos aquí, nadie se aparece, ni un médico, ni la persona que me trajo hasta aquí ¿quién será? Mi amada Amelia no lo creo ella me odia mas que a nada en el mundo, mi padre seguramente no, para él dejé de ser su hijo el día que aquel chisme salió en circulación, mis hermanas se unieron al sentimiento de mi ex esposa y mi padre, mis amigos ja! esos no eran mis amigos, nunca se me acercaron en estos seis meses. Jeremy! Seguramente fue el, mi mánager, mi único amigo... Él de vez en cuando me va a visitar, el me salvó de morir aquel día hace tres meses, cuando Violetta Stevenson se realizó un aborto y que supuestamente yo la había obligado. ESA DESCONOCIDA ME JODIÓ LA VIDA EN TODOS LOS SENTIDOS! Ese día mi mundo se vino al suelo mas de lo que ya estaba, mis pocas ganas de vivir se fueron volando, ese día me corté las venas pero enseguida, por cosa del destino, llegó Jeremy y de manera muy discreta me llevó al hospital para que ningún medio hiciera de mi vida, mas de lo que ya era, un escándalo. ¿Habrá sido él el que me trajo esta vez?
Así como lo pienso en él, llega.

- ¡Por fin despiertas! Que piensas hacer con tu vida? - me pregunta entrando a la habitación.
- Acabarla? - digo con ironía.
- Callate! Tu vida vale mucho. No digas eso.
- Vale mucho? Desde que el maldito chisme salió perdí valor, ya nadie quiere firmar conmigo ningún contrato - me refiero al valor económico y al moral también.
- Callate, no hables idioteces y escuchame! Te tengo una propuesta que cambiará tu vida.
Si, lo creo, como que este infierno pudiera terminar, pero lo escucho.
Me explica que cuando salgamos de aquí, cuando me recupere del lavado de estómago que me hicieron y este un poquito mas fuerte (ahora estoy muy débil debido a que solo he vivido a alcohol estos días y de mi intento fallido de suicidio), en el helipuerto del hospital me estará esperando un helicóptero el cual me llevará hasta el aeropuerto, donde un avión privado me llevará hasta Los Ángeles, donde comenzaré una nueva vida, lejos de este maldito infierno, con un nuevo nombre, un nuevo trabajo, donde nadie me conozca y pueda vivir en paz.
Suena como una jodida película, suena tentador volver a empezar pero quiero estar cerca de mi familia, aunque no se en donde estén y no me quieran ni ver, pero a la misma vez quiero escapar de esto, vivir en paz.
No se que hacer, estoy en una encrucijada.

- Mañana te respondo Jeremy - le respondo.
- Espero digas que si, te conviene. Esperaré a que llegue la comida, veré que comas y me iré.
- Okey...

Llega le enfermera con la comida: una caldo de pollo y un puré de calabaza. Que asco! Pero peor que nada es...
La enfermera me ve con lástima. Si, en este despojo me he convertido.
Como todo, Jeremy se va y yo trato de dormir, cosa que logro de inmediato.
Es de día, pronto llegará Jeremy y ya tengo una respuesta, después de consultarla con la almohada y mi conciencia.

- Y dormilón? Cual es su respuesta? - entra así.
- Bueno días Jeremy - ironizó.
- Me alegra que hayas despertado más alegre.
Eso nunca, siempre tendré esta melancolía y tristeza.
- Y? Tu respuesta? - pregunta mucho interés e ilusión, parece un niño cuando preguntan si lo dejan tener un perrito, aunque claro está, las situaciones no se comparan.
- Si, acepto. - es tan cobarde de mi parte, tratar de huir de los problemas, en vez de enfrentarlos, pero cuando quise todo salio al revez, quise hablar con Violetta cara a cara, que me dijera por qué hacia todo eso, después fue cuando inventó lo del aborto, aun dudo si realmente estaba embarazada - si lo haré, nos vamos de aquí - retifico mi respuesta.