lust ━━ hyunho.

Parte cuatro.

Pensó que realmente estaba solo, pero no fue así. Jeongin volvió corriendo con un abrigo largo de tono café en sus brazos. Lo obligó a ponérselo, le quedaba perfecto. Todo era tapado por esa tela; la prenda le quedaba por arriba de las rodillas, impidiendo que ese bulto sea visible.

Ambos amigos caminaron hasta la puerta de ingreso, donde estaba Changbin riéndose de forma nada discreta.

一¿Jeongin no sirvió? Puedo ayudarte yo cuando quieras. 一Changbin se lo dijo sonriente, para luego guiñar un ojo.

Jeongin se sintió ofendido y Minho se transformó en un pequeño tomate. Changbin era otro de sus amigos, junto a Jeongin solían arreglar estos asuntos. Claro, para mejorar la amistad, según ellos, lo típico. El grupo de Baekhyun y él mismo, se quedaban chicos con su forma de fortalecer la amistad.

Ahora siendo tres, ingresaron al salón correspondiente. Minho rogó que lo dejaran cerca de la pared, así evitaba que lo llamen para pasar al frente.

El profesor de matemáticas, Wonho, se hizo presente en el lugar. Los tres vivían creando fantasías con el fornido hombre, adoraban mirarle los grandes brazos que poseía y frecuentemente se preguntaban, ¿Cómo sería dormir en esos brazos? Luego estaba Minho, deseando que esos brazos sean los que rodean su cuello con una gran fuerza, mientras jodía su culo por ser un mal alumno.

Cosa que era imposible, porqué:
1.─ No sabían la sexualidad del hombre.
2.─ Minho es un genio en las matemáticas.
3.─ Probablemente no acepte dicha fantasía.

Mientras Wonho hablaba sobre catetos e hipotenusa, Changbin no podía evitar los chistes sexuales con la situación de su amigo.

一Minho, pregúntale al profesor sí quiere ser tu hipotenusa, capaz que con una mano así te baja hasta la presión. 一Changbin se reía en mute, ¿Es estúpido por reírse de su propio chiste sin gracia y Jeongin también por seguirle el juego? La respuesta a todo es sí.

一Señor Seo Changbin, su risa me molesta para dar clases. Se ganó una tarde conmigo en dirección.

Minho, claramente se estalló de la risa en la cara del mayor castigado, pero para su desgracia, también llamó la atención del profesor. Éste lo invitó al frente del aula, para comentarle al curso qué era tan gracioso. Pasó de un tono moreno a uno pálido, no sabía cómo explicarle la situación. Wonho se acercó a la mesa y Minho le susurró lo que pasaba.

El profesor no pudo evitar la risa y ahora entendía a Seo, el mayor Lee le ofreció una ayuda que rápidamente fue rechazada por el menor.

Ese día aprendió a no molestar al profesor Wonho.
ㅤㅤㅤㅤ