Solo lo mejor para los Malfoy

Solo lo mejor para los Malfoy Capítulo 2

Amo los fines de semana, son los días en que puedo estar todo el día en casa con mi esposa y pasar tiempo con ella, lo único que faltaría para hacerlo más perfecto, sería tener a mi niña con nosotros.

Aún no me acostumbro a eso de la magia, el colegio internado está más normal, pero, ¿un internado para aprender magia? Aún me suena a mentira. Sino fuera por el hecho de que en varias ocasiones vi con mis propias ojos los arrebatos de cosas explotando o flotando alrededor de mi niña, diría que es imposible que eso exista.

Estoy encerrado en el estudio porque mi esposa me ha corrido de la cocina por mis cuestionables habilidades gastronómicas, habilidades que le heredé a mi hija. Pasé por el correo de camino a mi encierro, las reviso mientras me acomodo en mi sillón favorito, cuentas, promociones, reporte de calificaciones; sobresalientes, cómo siempre. Un sobre llama mi atención, no es como los otros y está acompañado de un nombre y un escudo que jamás en mi vida había visto antes.

- Lucius Abraxas ¿Malfoy?

Cómo que se me hace familiar el apellido, abro la carta y al llegar a la mitad de ella, me doy cuenta que no he entendido muy bien las intenciones de la misma, así que vuelvo a iniciar.

"Muy buen día estimados señores Granger, me permito presentarme, mi nombre es Lucius Malfoy, soy padre de Draco Malfoy, un compañero del colegio de su hija, aunque de diferente casa.

El motivo de mi carta es simple y a la vez complicado, nos gustaría entablar una amistad entre ambas familias con fines de algún día, hacer esos lazos más estrechos.

Mi esposa y yo descendemos de un linaje muy antiguo de magos, así que, ¿por qué no iniciar por ahí? Si tienen alguna duda acerca de nuestro mundo y costumbres, no duden en hacérnosla saber e igual sería de nosotros para ustedes ya que desconocemos muchísimas cosas sobre el suyo."

Su motivación me desconcierta. ¿Quiere que nos hagamos amigos para que algún día seamos más amigos? Aquí hay algo encerrado, pero debo decir que su oferta de enseñarnos sobre su extraño mundo me agrada, he pasado tantas noches en vela pensando en la clase de lugar en el que se encuentra mi hija, ¿será seguro?, ¿cómo son las clases?, ¿los bravucones deben de ser más peligrosos, no?

Cuando regresó para vacaciones y me habló de los elfos, me dejó sin palabras, ella despotricaba por la esclavitud y yo solo podía pensar en esas extrañas criaturas cocinando su cena, ¿se lavaran las manos?, ¿qué normas de higiene tendrán? Porque aunque me digan que se pueden limpiar con un simple movimiento de esa ramita, a mi no me dejan convencido de que ya están limpios, nada como el agua y jabón que eliminó tantas pestes.

Continuo con mi lectura.

"Mi esposa y yo, cuando jóvenes, asistimos a Hogwarts al igual que nuestros hijos lo hacen ahora."

¡Perfecto!

"Es un lugar increíble y muy hermoso, a pesar de que quien actualmente lo dirija, a mi parecer, no esté debidamente capacitado.

Me sería muy grato el seguir con estas pláticas por correspondencia, hasta que algún día, en un futuro no muy lejano, nos acepten el invitarlos a comer en nuestro hogar. También sería bueno para nuestros hijos, ya que en Hogwarts y más que nada el director, promueve la división entre casas, lo que a veces puede llegar a generar un conflicto entre los jóvenes por querer demostrar que su casa es la mejor.

Sin más que decir, me despido de ustedes enviándoles un cordial saludo y a la espera de su pronta y afirmativa respuesta.

L.A.M"

La carta se siente un poco extraña, cómo queriendo forzar un acercamiento, pero mi sentido de alerta se relaja al recordar al señor Weasley; olvide su nombre, no fue mucho de mi agrado. Tal vez, el señor Lucius si siente mucha curiosidad por mi mundo, aceptaré, porqué no, después de todo, es una gran oportunidad para conocer más sobre las costumbres mágicas y para poder mejorar la formación de mi hija.

No sé si me sienta cómodo aceptando comer en su casa, así que solo tendré que convencerlos de declinar la invitación o hacer que la reunión sea aquí, si, eso será mejor.

Les enviaré la respuesta después de la comida, para que Jane esté también al tanto.

Espero estar tomando la decisión correcta.