2: Interludio Uno

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Limpié un poco el primer capítulo para que sea mejor, échale un vistazo si quieres, y aquí está el primer Interludio, disfrútalo.

Fuera de la arena donde se estaba llevando a cabo el primer partido de Ragnarök, un par de extraños, que nunca antes en sus vidas, estaban simplemente sentados en la base de un gran árbol teniendo una discusión muy... interesante.

"¿En serio?" El primer Extraño dijo con incredulidad. "¿Realmente recorriste toda esa distancia solo para obtener un descuento en las cebollas?" Dijo en voz alta antes de reírse un poco.

"¡Oye! No te burles de eso, tengo que tener cuidado con la forma en que gasto mi dinero, si lo gasto imprudentemente, ¡podría morirme de hambre!" El otro Extraño protestó, haciendo que el primero se riera aún más.

"Bueno, no puedo decir que sepa lo que se siente, ya que nunca fui exactamente a comprar comida en mi tiempo. Y además, morirse de hambre no es tan malo si sabes lo que estás haciendo". Dijo mientras se metía un caramelo en la boca de la gran bolsa de caramelos que tenía en los brazos.

"Bueno, diferentes tiempos y diferentes circunstancias y todo". El segundo Extraño se encogió de hombros antes de fruncir el ceño ante el primer Extraño. "Oi, ¿no son todos esos dulces malos para tus dientes? Tiene que jugar un infierno en tus facturas dentales". Señaló.

El primer Extraño simplemente se ve divertido. "Me conmueve que te importe, pero lo olvidaste, básicamente soy un Dios, las cosas como las caries, el cáncer y cosas por el estilo no afectan tanto a las personas como yo". Dijo antes de meter otro caramelo.

"¿En serio? ¿Puedes estar saludable sin importar nada y comer lo que quieras? Hombre, estoy tan celoso". El segundo Extraño se lamentó al primero.

El primer Extraño simplemente se rió del segundo. "Pareces olvidar, ahora que estás en el cielo para todos los efectos, cosas como las enfermedades y las enfermedades no nos afectan aquí". Se lo recordó antes de sacar unos dulces y ofrecérselos al Desconocido. "¿Quieres un poco?" Preguntó el primer Extraño.

El segundo Extraño parpadeó por un momento antes de tomar el dulce y comer un poco. "Eh, es realmente bueno". El segundo Extraño dijo casualmente mientras el primer Extraño sonreía lo suficientemente amplio como para que aparecieran sus afilados dientes. "Sabes, ¿no eres lo que realmente esperaba que fueras?" El hombre entonces admitió a la primera.

"¿Ohhh? ¿Y cómo pensabas que yo era entonces?" El primer hombre preguntó sonriendo al primer hombre.

"Bueno, quiero decir, no esperaba que te dedicaras a comer dulces como si estuviera pasando de moda, y estoy bastante seguro de que esa no era la ropa que usabas cuando vivías como Buda". El segundo hombre le dijo al Dios ahora identificado.

Buda, que vestía una camiseta sin mangas acompañada de un diseño de conejo con un parche en el ojo con la palabra "USACHAN", anteojos junto con una túnica atada alrededor de su cintura que envolvía sus manos, con un bindi en la frente, cabello atado hacia atrás en un estilo clásico. estilo, con aretes en los lóbulos alargados de las orejas y cuatro colmillos afilados en la boca; simplemente sonrió aún más al hombre.

"Bueno, morí e hice mis acciones, y llegué hasta aquí, y observé a la humanidad durante mucho tiempo, pero es un poco aburrido simplemente no adaptarse a diferencia del resto de esos viejos vejestorios, así que me permití un poco aquí y allá." Buda respondió.

El hombre parpadeó antes de ganar un momento para pensar y asintió pensativo. "Sí, puedo ver eso, puedo comer muchas cosas por un tiempo, pero trataré de cambiar lo que como, se vuelve aburrido comer lo mismo todos los días después de todo, incluso si me gustan las cosas". Él dijo.

Buda simplemente le sonrió al hombre. "Y es por eso que me gustas Saitama". Le dijo al One Punch Man. "Simplemente me haces diferente a la mayoría de las personas, diablos, incluso me escuchas incluso después de decir más de veinte palabras". Él dijo.

Saitama simplemente se encogió de hombros. "Bueno, eres Buda después de todo". Saitama señaló antes de inclinarse más cerca. "También escuché que estabas de nuestro lado, así que sí". Dijo con una pequeña sonrisa.

Buda simplemente se rió un poco. "Esta va a ser una amistad divertida". Dijo con una sonrisa.

XXXXX

Mucho antes del comienzo del Partido para decidir el Destino de la Humanidad.

Mientras Zelretch conducía a Brunhild y Geir a otro mundo, se preguntaban a dónde se dirigirían a continuación y pronto terminaron sus viajes, y para gran sorpresa de Geir, ahora estaban en un páramo desolado. Incluso Brunhild no pudo evitar entrecerrar los ojos ante lo que vio frente a ella.

"¿Qué... qué pasó aquí?" Geir jadeó.

"Una guerra nuclear mundial en algún momento de la década de 1990 resultó en la destrucción de la mayor parte de la civilización, convirtiendo al mundo en un páramo desértico. Los restos de la humanidad luchan por cualquier suministro de alimentos y agua no contaminada que aún quede como la presa fuerte sobre los débiles. " Zelretch le dijo a Geir que sentía una sensación de pérdida cada vez que se encontraba con este mundo.

"Qué... qué triste". Geir dijo con tristeza.

"Eso puede ser cierto". Zelretch admitió antes de sonreír amablemente a la aprendiz de valquiria. "Pero aun así, existe un Hombre que usó las Artes Marciales que una vez fueron adecuadas para el asesinato y las convirtió en una herramienta de justicia para proteger a los inocentes y amables. Además, este hombre ha salvado a este mundo de más oscuridad cuando él los enfrentó él mismo, y se hizo conocido como el Salvador del Fin del Siglo". dijo con orgullo a los dos, mientras levantaban las cejas con admiración.

"¿Y estamos reclutando a un Hombre así para nuestras Batallas?" preguntó Brunhild.

"Por cierto." Zelretch asintió. "Y estamos aquí en su tumba". Dijo señalando dos lápidas, una que tenía el nombre de Yuria y la otra que tenía el nombre de Kenshiro. "Vamos, Brunhild, igual que antes". Él le indicó la tumba de Kenshiro mientras ella asentía y pronto despertaba su alma, y ​​Brunhild no pudo evitar parpadear ante lo poderosa que es el alma y sonrió.

"No pretendo sobresaltarme, sin embargo, la humanidad necesita tu fuerza una vez, para salvarlos de la extinción". Brunhild dijo en voz baja mientras el alma se volvía complaciente y aceptaba unirse. "Se hace." Dijo mientras Zelretch asentía.

"Muy bien, entonces, vamos, debemos continuar nuestra búsqueda". Dijo mientras abría otro portal cuando salían, solo para ser extrañado por el próximo Sucesor de las artes Hokuto Shinken, Ryu, quien parpadeó cuando sintió que alguien estaba aquí, pero se encogió de hombros y presentó sus respetos a su mentor y a su ser querido.

Registros de Ragnarök: el conflicto multidimensional Donde viven las historias. Descúbrelo ahora