Christmas day

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Calles cubiertas de nieve, carros varados en sus propias casas sin poder salir a causa de esta misma. Sí, era navidad.

Por alguna extraña razón Yeonjun despertó más temprano de lo normal. 7 AM, un 24 de diciembre, apunto de ir a la casa de un completo desconocido para él a festejar esta. Sus suéteres anchos, pantalones holgados y zapatos gigantes agradecían ser comprados desde el mes pasado, pues Yeonjun si que era alguien friolento con buen estilo.

Las cafeterías sabian a la perfección que, a cierta hora, un chico alto con apariencia misteriosa y presencia al caminar pasaría por las puertas de su local pidiendo un café americano y de vez en cuando un pequeño pedazo de pastel de chocolate que comería al llegar a casa para evitar las migajas en las comisuras de los labios.

Aprovechando su mañana, Choi camino hasta la cafetería más cercana que, para su suerte, estaba como cualquier otro día: Solo personas con sus portátiles y un vaso de café a lado, terrible forma de pasar la navidad. Se acercó hasta la barra y pidió su americano evitando al chico que parecía estar coqueteandole desde la semana pasada con miradas coquetas o ligeros intentos de rozar sus manos al pagar, se alejo y fue a la mesa más alejada de la entrada a revisar su celular el cuál se mantenía igual desde que despertó; Sin llamadas, ni mensajes, solo nuevas publicaciones de sus artistas favoritos.

— ¿Vecino? — La voz de alguien lo saco de su propia decepción haciéndolo mirar hacia arriba, encontrando de nuevo los ojos de su lindo vecino enfrente poniendolo nervioso al instante — Oh, no sabía que estaría aquí tan temprano — Se sentó frente a él, sonriendo y colocando sus codos sobre la mesa para posteriormente colocar su cara en su mano derecha

— Si bueno, aquí estoy — respondió sin más tomando un sorbo de su café sintiendolo mucho más amargo que antes, dejando en un silencio incómodo el ambiente.

— Vine a comprar algunas cosas mas para la cena, lo ví desde afuera y quise saludarlo. Espero no le moleste que esté aquí — Se enderezó en el asiento, cambiando su expresión a una más seria pero sin dejar de sonreír — ¿Va a quedarse más tiempo aquí?

— Yo... De hecho ya me iba — Se levantó y acomodo sus ropas dándole tiempo al contrario de imitarlo quedando uno frente al otro — Regresemos juntos, de todos modos vivimos en el mismo piso  — No sabe de dónde sacó la confianza de decirlo pero lo hizo dejando al contrario totalmente sorprendido, se arrepintió al instante de decirlo como si nada para excusarse justo después de eso — Claro, si quieres.

Soobin no dijo nada y asintio con una sonrisa poniendose detras del peliazul para dejarlo guiar el camino de regreso a su edificio que quedaba no muy lejos de la única cafetería abierta de la cuidad. Y por primera vez, desde que se conocieron, una sonrisa salió de los labios de Yeonjun gracias a la actitud del contrario la cuál Soobin no pudo ver pues fue vilmente ocultada ante sus ojos al momento de darse la vuelta.

El edificio donde se hospedaban no quedaba tan lejos de dicha cafetería por lo que se llevaron con calma el camino de regreso. Al principio todo fue bastante incómodo, ninguno decía nada o hacía algo hasta que Soobin tomo la confianza de preguntar cosas alzar sobre la vida del peliazul y el porqué no se había acercado antes a él o a cualquiera de sus vecinos.

— Nunca se lo pregunté — Se detuvo al pensar que había sido un idiota todo el tiempo por no preguntarlo antes, haciendo que Yeonjun retrocediera unos pasos quedándose solo un paso frente a Soobin— ¿Qué edad tiene? — miro curioso al contrario, esperando una respuesta.

— Veintitrés, soy del 99 — Respondió con simpleza sacando un pequeño sonido de sorpresa al más alto  quien lo miro de una manera extraña — ¿Qué pasa? — Se dió la vuelta para seguir caminando, siendo seguido por Soobin quien se quedó unos segundos quieto.

Merry Christmas? || YeonBinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora