XVII

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Llegue a aquel bar y pedí un trago de wiski como es mi costumbre en estos casos, tome mi primer vaso de un solo golpe y pude sentir como el líquido dorado quemaba mi garganta, pero no tanto como me estaba quemando lo que estaba sintiendo.

Seguí tomando con la esperanza de aclararme, pero entre más se nublaba mi sentido, más clara estaba la imagen de Min Ho en mi mente.

Para mi tercer vaso lo había aceptado, me estaba enamorando de Min Ho, ese hombre se había empezado a meter bajo mi piel poco a poco y lentamente, tanto que no me di cuenta en que momento paso, pero paso.

Entonces tome la decisión esta vez no cometeré el mismo error, no me hare su mejor amigo para luego tener que guardar silencio, esta vez no me ocultare, por que como dicen que dijo Einstein no se pueden obtener resultados diferentes haciendo las mismas cosas y no voy a pasar por esto de nuevo.

Lo primero que tengo que hacer es saber si existe alguna posibilidad, si hay así sea algún mínimo de atracción de Min Ho hacia a mi o si simplemente le gusto como un buen amigo y nada más, y fue allí que maquine mi plan.

Llame al chico del bar y con ayuda de unos cuantos billetes logre convencerlo de hacer aquella llamada y me ayudara a fingir que estaba totalmente ebrio, y así lo hizo, ya lo demás corría por mi cuenta.

Al principio las cosas querían salirse de control, pero se puede decir que el resultado fue mejor de lo esperado, Min Ho me dijo que también le gusto y estuvo más que comprobado con aquel maravilloso primer beso que nos dimos, les juro que pensé que valió pena sufrir tanto tiempo.

La química y la magia entre nosotras era tan palpable y evidente, era una cosa de otro mundo, su boca era el complemento perfecto de la mía y por primera vez sentí que el haberme hecho el fuerte durante tanto tiempo no tenía ningún sentido, Min Ho llego así tan tranquilo y con su hermosa sonrisa derribo todas mis barreras, me sentí vulnerable ante él, pero a la vez me sentí libre, libre de armaduras, libre de máscaras, libre de dolor y eso me hizo inmensamente feliz.

Nos comíamos la boca con tanta necesidad, que ninguno de los dos quería separarse del otro, ninguno quería dar final a tan maravilloso sueño, caminamos lenta y torpemente hasta mi cama y nuestros cuerpos cayeron rendidos sobre ella entre caricia y besos, yo podía sentir esas grandes manos aferrándose fuerte a mi cintura, quería más, quería besar más, quería tocar más, quería sentir más, pero...

_ Jisung_ dijo mi nombre entre jadeos y sonó más hermoso de lo que lo había hecho en aquel sueño_ me gustas mucho...

_ y tú a mi

volví a pegar mi boca a la suya impidiéndole continuar, pero el otra vez me separo

_ escúchame, he deseado esto por mucho, pero... es muy rápido y no quiero lastimarte, tu estas tomado y no quiero que mañana te arrepientas de algo, no quiero nuestra primera vez así... creo que... será mejor que me vaya.

No podía creer lo que estaba escuchando, al final el plan me paso factura, el me dio un último beso rápido en la boca y se levantó de la cama dejándome más prendido que leña en hoguera

_ pero... _ iba a decir que yo lo quería, que no estaba ebrio en realidad, que no me arrepentiría más tarde, de verdad me desconocía en ese momento porque normalmente me gusta ir despacio y seguro, pero no sé qué me hacía Min Ho para sentirme tan seguro con él, creo que era precisamente por eso, porque pensaba en mí y quería cuidarme, entonces entendí que él tenía razón y cambie el rumbo de mis palabras_ son casi las tres y no trajiste tu auto, no tienes que irte si no quieres, puedes quedarte e irte cuando amanezca

_ llamare un taxi, no puedo quedarme o voy a...

_ por favor_ insistí y me aferre a un puchero_ si te vas ahora me quedare preocupado y no podre dormir, mañana... o mejor dicho más tarde tendremos la cita con el sastre para probar los trajes, te llevare a tu casa para que te cambies y luego nos iremos juntos hasta..._ hable tan rápido que no note que Min Ho me analizaba atentamente, hasta que me interrumpió

_ Han Jisung, ¿cómo es que estas tan lucido de repente? Hace apenas unas horas no sabías ni cómo te llamabas, pero ahora estas atento hasta los compromisos de la agenda

¡Mierda!, había olvidado que se suponía estaba ebrio

_ es que... mi metabolismo es bastante rápido, además... ese beso es capaz de despertar a cualquiera_ dije de forma coqueta, él se sonrojo y me sonrió

_ no puedes decirme esas cosas y hacerme esos ojos o te juro que... no podré irme.

_ pues es eso precisamente lo que quiero_ me alegre de poder desviar su atencion_ dormiré en el sofá_ me levante muy rápido de la cama lo que hizo que me mareara un poco y Min Ho me sostuvo en sus brazos impidiéndome caer

_ nada de eso, tú te acuestas y te duermes, yo iré al sofá

_ promete que no te iras_ susurré en su oído mientras me recostaba nuevamente en la cama y pude sentir un leve estremecimiento en su cuerpo, al igual que lo había hecho en el auto, puedo ver que sus orejas son un área muy sensible para él.

_ Jisung por favor, tienes que dejar de hacer eso ahora_ me regaño

_ está bien_ dije a regañadientes, el me dio un beso en la frente, me cubrió con una manta y salió por la puerta de la habitación hacia la sala.

Yo me quede allí suspirando a su espalda y pataleando como un niño emocionado, no podría dormir eso era seguro, o por lo menos eso creía yo, pues los pocos tragos que me había tomado hicieron su trabajo. 


***


El saber a Jisung allí a unos pocos metros de mí y todo lo que había sucedido me tenía tan emocionado y aturdido que no iba a poder dormir, me recosté en aquel sofá, que, aunque bastante cómodo y acogedor no eran suficiente para relajar la excitación de mi cuerpo.

Allí dando tumbos de un lado al otro y pensando muchas cosas pude ver el sol salir y asomarse por aquella ventana alejando todo rastro de frio, de una noche lluviosa, prometía ser un día maravilloso, yo estaba realmente ansioso de que pasaría de aquí en adelante entre Jisung y yo, que diría ahora que despierte, imagine muchos escenarios, pero nunca el que sucedió realmente.

Me levante en medio de mi ansiedad y decidí distraerme haciendo desayuno, me asome a la nevera a ver que encontraba, estaba haciendo algunos huevos revueltos y algo de café amargo asi como le gustaba a mi chico, ¿ya podía llamarlo mi chico?, sonreí ante ese pensamiento, cuando la puerta principal se abrió y alguien entro

_ Sung!!_ gritó, mi sonrisa automáticamente se borró al ver a aquel chico rubio que con tanta propiedad entraba a ese lugar_ Lee? _ expresó con desagrado al verme

_ hola Hyunjin_ salude de la misma manera 

Atte: Secret Secret - MinSungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora