Una vez que la niña acabó de ponerle el collar de perlas, hazz movió su esponjosa cola con delicadeza para luego saltar de la cama y dirigirse a la suya.
Se acomodó en la suave cama de terciopelo dispuesto o dormir una dormir una siesta, pero sus orejas no dejaban de estar atentas al sonido que provenía del otro lado de la puerta. Se escuchaban voces y objetos moverse, si Harry no estuviera tan cansado probablemente tendría curiosidad, pero el gatito blanco necesitaba sus dieciséis horas de sueño diario, ese hermoso pelaje no estaba así por arte de magia.Al día siguiente mientras el felino estaba por tomar su cuarta siesta del día el timbre de la casa lo interrumpió, de mala gana se levantó de su cama y salió de la habitación de Carolina para ver quién estaba en la puerta. Ella se encontraba hablando con un chico de su edad, no lo conocía así que no le dio buena espina a Harry, se acercó sigilosamente a su dueña hasta estar entre sus piernas, maulló para que notarán su presencia.
Carolina lo cargo en brazos.—oh, mira, aquí está hazz.
—oh ¡es tan bonito!—halago el niño de unos doce años con una sonrisa acariciando delicadamente la cabeza del felino.
Pronto otro maullido se escuchó por el pasillo así que el gatito de pelaje blanco movió su cabeza para ver de dónde provenía el sonido.
—oh mira, ahí está.—se puso de cuclillas antes de llamar al minino—Louis, ven acá Lou.
Este hizo caso de inmediato subiéndose a los brazos de su dueño ronroneando por las caricias.
—Louis también es bonito.
Harry estaba de acuerdo con su dueña, el felino era lindo, de pelaje café claro con las patitas blancas y ojos tan azules como el cielo.
—yo bueno le iba a dejar la azúcar a mi mamá y de ahí ir al parque, para ya sabes que Louis este un poco al aire libre y eso. ¿Te gustaría venir? Está bien si no quieres, de seguro tienes otras cosas que hacer y—el chico fue interrumpido por la castaña.
—sí, me encantaría, ya debía sacar a Harry a pasear, creo que les hará bien.
—sí.
—bueno, yo…¿Te veo en el vestíbulo en unos cinco minutos?
—oh, sí, sí. Ahí nos vemos.
—okay. —cerró la puerta cuando el chico de cabellos rubios entro a su departamento, soltando un pequeño suspiro. Al bajar la mirada los penetrantes ojos jade lo miraban.—¿Por qué me miras así, Hazza? De todas formas necesitas ejercitarte más, eso dijo la doctora, te la pasa todo el día durmiendo.
Cinco minutos después ambos chicos de camino al parque con sus mascotas, Carolina caminaba con Harry quien tenía una bonita correa de color rosa pálido con algunos detalles. Mientras que Louis a su lado camina de un lado a otro pero manteniéndose cerca de su dueño.
Una vez ahí soltaron a los gatos estar ahora frente a frente Harry pudo ver que Louis era más grande que él y sus movimientos eran algo torpes, así que cuando se lamió el pelo para querer verse más “atractivo” lo único que pudo pensar el gatito es que no tenía clase para nada.
—hola—maulló el gato café.
—hola—contesto de mala gana Harry. Su esponjosa cola se movía de un lado a otro mientras mantenía su barbilla en alto. Miro a Carolina esperando a que lo agarrará pero la niña estaba entretenida hablando con Alex en una banca a unos metros de ellos, sacudió su cabecita haciendo que la campanita de su collar de perlas sonará.
—este parque es lindo ¿Vienes aquí seguido?—el minino de pelaje café empezó a curiosear por los alrededores sin alejarse mucho de hazz el cual no se había movido de su lugar.
—no realmente, prefiero quedarme en casa y dormir.
—pero estar en casa es aburrido, estar al aire libre es mejor.
—no lo creo.
—claro que sí, mira.—entre su boca tenía una pequeña margarita que había cortado, la dejo a los pies del gatito para después sentarse frente a él moviendo su colita.
—es bonita.—con su patita frotó sus mejillas pues sentía como se calentaban.—gracias—maulló apenas. El gato café sentía que su corazón se volvía loco al ver la tierna imagen frente a él.
—bueno lindo gatito, creo que tendré que sacarte más seguido para que te convenzas de que si es mejor. ¿Qué te parece mañana en la tarde? —el apodo hizo que pequeños pájaros revolotearan en el estómago de hazz pero lo ignoro.
—¿Yo? ¿Salir contigo?—pregunto algo incrédulo mientras movió su esponjosa cola.
—claro ¿Acaso tienes algo mejor que hacer mañana?
—bueno en la tarde tomo mi siesta de tres a seis.
—bueno, tendrás que adelantarla un poco. Iré por ti a las cinco.
Aunque esperaba una respuesta negativa no la recibió y eso hizo que el corazoncito de Louis se calentará. Antes de que alguno de los dos se pudiera acercar al contrario un llamado les puso los pelos de punta.
—¡Hazzie! ¡Louis! Vengan que ya nos vamos.
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a kitten stole my heart [L.S]
FanfictionLou cayó enamorado por Hazz desde el primer momento en que lo vio y el refinado gatito también.