Triángulo Amoroso

Un poco de lemon

Habían pasado algunos segundos desde que Akihiko beso suavemente los labios de Misaki y cada vez el beso se iba poniendo mas intenso y apasionado, ninguno de los dos quería separarse de ese contacto que tanto necesitaban, pero tuvieron que hacerlo por falta de aire, Akihiko pudo darse cuenta que Misaki estaba muy agitado y con su bello rostro totalmente sonrojado por lo que acababa de pasar por lo cual no pudo evitar ponerse muy duro por tan hermosa expresión que le estaba dando su pequeña adoración

Akihiko:...te amo tanto Misaki, mi niño precioso-después de decir esas palabras lo volvió a besar, solo que esta vez lo tomo de su pequeña y fina cintura y con mucho deseo y cariño la empezó acariciar por encima de la fina tela de la blusa de Misaki, el castaño también estaba empezando a experimentar sensaciones que nunca había sentido, esto lo asusto un poco pero también le gusto, Akihiko pudo notar el miedo en los tiernos ojos de su niño ya que era evidente que nunca había hecho algo como eso, tal cosa puso feliz al ojilila ya que le alegraba tener la oportunidad de ser el primer hombre en la vida de su bello angel, pero el quería ser el único y el último, cada cuanto se separaban por falta de aire y volvían a comerse a besos donde Akihiko era quien guiaba hasta que Misaki dijo algo que dejo boquiabierto al mayor

Misaki:....U...Usagi-san....por....por favor....tócame....hazme olvidar.....lo que quiso hacerme ese tipo-lo dijo con la voz temblorosa y se notaba que se estaba muriendo de la vergüenza ya que nunca pensó poder decir algo como eso, a Akihiko casi se le sale el corazón cuando su pequeño angelito hizo esa petición, tardo unos segundos en procesar lo mas bello que había escuchado en su vida

Akihiko:..Misaki me haces el hombre mas feliz del mundo...pero ¿estás seguro cariño?, no quiero que te sientas presionado-el deseaba que fuera verdad lo que decía su pequeño, pero tampoco quería que el menor lo haga por compromiso, para el era principal la comodidad del ojiverde

Misaki:....bue...bueno.....me refiero .....a ya sabes.....que me toques..pe...pero sin....llegar al final, perdona....seguro piensas que soy un tonto-Misaki se sentía muy estúpido en ese momento, seguramente el mayor estaría pensando que es solo un chiquillo, eso lo hizo sentir muy mal por lo que desvío la mirada que tenía en Akihiko, sin embargo el mayor de manera suave hizo que lo volviera a ver tomando su lindo rostro

Akihiko:no vuelvas a decir algo así Misaki, nunca en la vida pensaría algo así de ti, quiero que en este momento quedé muy claro que te amo, que ahora que te tengo así entre mis brazos acabo de abrir mis ojos y darme cuenta lo que es el amor de verdad, que aunque tenga que esperar por ti 100 años lo haría sin problema, el hecho de que seas inexperto en esto a mí me hace muy feliz ya que quiero ser el único hombre en tu vida, no cambiaría absolutamente nada en ti mi amor, para mí eres la criatura más perfecta que existe, te amo Misaki, para mí será hermoso poder tocar tu lindo cuerpo, el cuerpo de la persona que más amo y me hace feliz-esas palabras casi hacen llorar a Misaki ya que en los ojos del mayor se notaba total sinceridad en lo que acababa de decir, el menor se sintió muy amado en ese momento y aunque se sentía terrible porque se trataba del esposo de su hermano, por primera vez en su vida quería ser un poco egoísta y pensar en el en vez de los demás

Por tal razón fue Misaki está vez quien se acercó a besar a Akihiko suavemente por la falta de experiencia, el mayo sin perder tiempo tomo el mando del beso y lo volvio mas apasionado hasta llegar a un beso francés

Akihiko con mucho cuidado empezó a meter sus manos debajo de la blusa del ojiverde y acariciar su suave y  que cada vez se ponía mas y mas duro que empezó a doler, sentir esa calida y delicada piel blanquecina era lo mejor que había sentido en su vida, recostó muy delicadamente a Misaki en la cama mientras seguía besando esos labios que le sabían a miel y subío su blusa dejando esos hermosos, tiernos y rosaditos pezones expuestos, se separo un poco para poder admirar bien al menor, era la imagen mas bella de todas, se veía tan provocador y al mismo tiempo tan angelical que sintió que podía correrse en ese momento