Enredaste mi mente con la tuya
Me llevaste a tu locura.
Para luego soltarme y mirar
como caía.
...
Eres libre de sentir lo que niegas.
niégalo mientras me recorres cada centímetro
de mi piel.
Niégalo mientras saboreas mi néctar.
Niégalo en tu cabeza,
pero no se lo niegues a mi corazón.
...
Te espero día y noche
en cada suspiro.
En cada sonrisa y
en cada lágrima escondida.
...
Te ataré y te llevaré al borde del abismo.
Sólo te soltaré cuando supliques
que lo haga.
Cuando creas enloquecer.
...
Siempre fue un juego
un deseo egoísta.
En el que me incluiste sin preguntar
si era parte de tu fantasía.