Después de Sinsajo

~PEETA~

Despierto en mi habitación de mi casa de la aldea de los vencedores. No por el despertador, que ya cumplió su función hace ya unas horas; más bien por la frustración de estar sola.
Aquí, ahora me hundo en depresión. No hay nadie con quién charlar,aparte de Sae, y eso me frustra.
Lo peor es que cada vez que me animo a hablar con Peeta o con mi madre, al minuto ya cuelgo el teléfono.Hasta la idea de ir al bosque me desanima.
Vuelvo a poner la cabeza en la almohada, pero no duermo.
Peeta; me quedo pensando en Peeta.
¿Que estará haciendo ahora? ¿El igual está deprimido?
Quizá lo esté, pero yo creo que más que estar en depresión, tiene muchas pesadillas.
Igual que yo. Igual que todos los vencedores y los que participaron en la rebelión seguramente.
Sigo pensando en él. Si todo este tiempo no fue solo una farsa, quizá si siento algo por él. Como dijo Finnick en el bunker cuando estábamos en el 13, durante el bombardeo, quizá termine enamorada de Peeta.
El chico del pan. El chico rubio de ojos azules, que me tiró dos panes cuando estaba hambrienta; el chico que estaba asustado por los juegos. El chico que deseé no matar en mis primeros juegos. Mi "amante trágico". Que fué torturado en el Capitolio.
Tantas cosas que pasó.... Incluso quizá más.
Todo eso parece que pasó en otra vida....
Pero no. Esa fué mi vida. Que hasta ahora no puedo superar. Pero debo hacerlo, por mi bien.
Después de haber meditado sobre todo eso, me levanto y me voy a bañar.
Me pongo mi ropa de cazadora y salgo de mi habitación.
Llego a la cocina, y ahí me espera Sae con el desayuno listo.
- Buenos días Sae.
- Hola Katniss.
Me siento y empiezo a devorar los waffles y la ensalada de frutas, que seguramente se quedaron ahí un largo tiempo.
Termino de comer, y veo que son las 11:00. Sae ya está empezando a hervir verduras para la ensalada, ya que de seguro cree que voy a volver a mi cuarto a dormir, y como de seguro no hay carne solo habrá ensalada.
- Sae, ¿estoy a tiempo de traer algo para que cocines?.- pregunto.
- Yo creo que si.
- Pues entonces ya vuelvo, me voy al bosque.
Sin esperar respuesta, salgo de mi casa (cosa que no hago hace un par de semanas) y lo veo sentado en las escaleras que dan al porche de su casa.
Voy directo hacia él y me paro en frente suyo.
- Hola Peeta.- trato de decir en tono amable.
- Katniss! Hace tanto que no te veo salir de tu casa! Ya me empezaba a preocupar por ti.
No se porqué pero me sonrojo...
- Bueno, es que no me sentía en buen estado para salir.- respondo un tanto despreocupada, para que no sospeche de la depresión y las pesadillas.
- Que bueno... ¿Y a dónde te diriges?
- Estaba pensando ir al bosque...
- Pués, ¿te podría acompañar? Es que me he sentido muy solo... Y hablar con Haymitch... El siempre está ebrio. Además creo que deberíamos acercarnos más... Solo creo.- me mira encogiéndose, y sonrojandose un poco.
- Bueno ya que lo dices.... Hablar con Sae todos los días me tiene deprimida... Si claro que puedes venir. Y también creo que deberíamos reconsiliarnos.
Sin decir palabra, se levanta y empezamos a caminar juntos.
Lo veo disimuladamente cada vez que puedo. Mis memorias con este chico son terribles, pero igual espero que eso se quede atrás y que pueda iniciar una vida.
Quizá con él.
Cuando llegamos, él se queda viendo los árboles. Deja su mirada en un punto fijo como lo había hecho cuando lo ví al salir de mi casa.
- ¿En que piensas?- le pregunto.
- Nada.... ¿Recuerdas ese juego de real o no?
- Claro que lo recuerdo.
- Pués tengo algo muy importante que preguntarte.- hace una pausa y sigue- Me sigues amando, ¿real o no?