Prólogo.- "¡Muere, Gay!"

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Con su cámara en mano, Taehyung se encontraba caminando por las calles de Francia, con el objetivo de tomar nuevas fotografías con su nueva cámara y así venderlas.
Eso era de lo que vivía Taehyung, la fotografía. Pero no le disgustaba para nada, amaba vivir así y conocer lugares nuevos.

Extrañaba demasiado México, su lindo país de nacimiento. Tuvo que básicamente escapar de ahí debido a amenazas que recibía de sus vecinos después de que se enteraran de que él era gay. Con tristeza tuvo que irse primero a California en Estados Unidos, pero después optó por venirse por un tiempo indefinido a Francia.

Caminaba normal, apreciando la ciudad y prestando atención a todo para tomar fotos, hasta que...

—¡Hey, tú!—se escuchó por atrás, eso lo dijeron en un perfecto español, por lo que Taehyung miró para ver si era a él quién estaban llamando.—¡Es él, el mexicano marica!

Eso fue lo que escuchó antes de salir corriendo. Unos 5 hombres latinoamericanos lo comenzaron a perseguir. Tae intentó esconderse en algún lugar, pero fue en vano, los hombres lo atraparon rápidamente y a la fuerza lo encerraron en un lugar cerca.

El infierno comenzó, los hombres comenzaron a maltratar y abusar sexualmente del indefenso cuerpo de Taehyung, sin dejar que almenos hable. Esto provocó la triste muerte del chico 2 meses después de ser raptado.

Su cuerpo fue encontrado y seguidamente enterrado al no encontrar algo de información sobre su familia. En el cementerio donde fue enterrado, sin siquiera poder ir al cielo, su alma en pena deambulaba por el solitario lugar, con su único objeto que pudo traspasar a su otra vida; su cámara fotográfica.

Taehyung podía ver a las personas que visitaban el cementerio, pero ellas no a él. Realmente deseaba que alguien lo pudiese escuchar y al menos poder ayudarlo para que pueda irse en paz al cielo, pero era consciente que eso nunca pasaría.

Bueno, han pasado más de 145 años desde que Taehyung ha muerto, por lo que no tenía esperanzas.

Hasta ese 1 de diciembre de 2020.

Donde lo encontró, lo encontró a él.

Un chico quien tenía sus ojos llorosos, nariz y mejillas rosas, piel de porcelana y cabello castaño, mismo chico que tenía un ramo de flores de cempasúchil en su manos.

Espera, ¿cempasúchil en Francia?

Valla, puede que sea mexicano, pero no parece como tal, si no como alguien asiático.

Y por si fuera poco, para su nueva sorpresa, aquel lindo chico pegó un grito muy varonil mirando a la dirección de donde Taehyung se encontraba espiándolo.

¿Acaso ha podido verlo?

—U-un... ¡Un zombie!—gritó el castaño aterrorizado.

¿Zombie? ¿¡ha podido verlo?!

Llorón, corazón de oro || KookTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora