Soltar aquello que nos hace daño no es tan fácil. No es tan simple como sólo dejarlo atrás, enterrarlo en alguna parte del pasado y avanzar. Ojalá lo fuese, ojalá sólo bastara con desearlo mucho; pero no. Soltar significa renunciar a aquello que nos lastima, pero que al mismo tiempo nos sostiene.
Significa enterrar pensamientos que aparecen en nuestra mente sin querer, aún cuando no tienen nada que hacer ahí. Soltar es abandonar una parte de sí, destruirla, hacerla polvo, convencernos de que eso está mal y luego de saberlo luchar hasta conseguir abandonarlo por completo. No basta sólo con desearlo, porque en ocasiones la mente se abraza a ciertas ideas, sentimientos, experiencias o personas, y cree que al soltarlos ya no podremos respirar.
¿Cómo hacemos para convencer a cada parte de nuestro ser de que despojarnos de todo aquello es en realidad lo que nos va a permitir respirar de nuevo, si todavía no nos hemos dado cuenta de que hace tiempo nos falta el aire?
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Poemas De Una Adolescente Enamorada
PoetryMi destino sos vos. Mis letras te pertenecen. No serías importante para mí si no te hiciera parte de lo más auténtico de mi ser: mi poesía.
