Alaska Klein es una chica normal o bueno eso ha creído toda su vida.
Ella estudia medicina porque anhela en un futuro poder salvar vidas.
Tiene un corazón puro y un alma radiante.
Pero ella no sabe el secreto que carga.
Está sentenciada por una bru...
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Alaska Klein.
—¿Estás escuchándome?— Cuestiona Adam.
—Si— Miento, porque realmente mi mente está más ocupada repitiendo el recuerdo de mi beso con Aeron, que escuchar los problemas amorosos de mi amigo.
Volvió ayer de una academia de magos jóvenes, donde les ayudan a conocer los inicios de su magia y como controlarla. Por esa razón había estado tan ausente en el castillo.
Su preocupación es su relación con Leila, dice que desde que la vio ha notado un cambio en ella, bueno desde hace bastante tiempo, solo que ahora es más evidente de que algo pasa.
—¿Qué opinas al respecto, entonces?— Me siento horrible por mentirle, porque yo sé que entre Leila y Jackson están ocurriendo cosas.
Puedo ver como los ojos de Adam brillan cada vez que habla de ella, su amor por ella puedo sentirlo a lo lejos, ni él ni nadie merece ser engañado de tal forma. Adam confía ciegamente en Leila, ya que ella nunca le ha dado razones para desconfiar. Según para el su cambio es algún efecto secundario de la maduración de sus poderes, pero muy en el fondo sé que él sabe que en realidad hay alguien más, pero decide ignorarlo para no sufrir.
—Creo que deberías de hablar con ella, contarle como te sientes, que has notado cambios en ella, dile sobre tus sentimientos respecto a ella— Murmuro alentándolo, indiferentemente de que si Leila está engañando a Adam con Jack, no es algo que a mí me toque decirle, solo es entre él y ella. Solo espero Leila escoja la decisión correcta.
—Ella sabe cuanto la amo.
—Tal vez solo tienes que recordárselo.
El silencio que le siguen a mis palabras es un poco tenso, me siento un poco hipócrita, pero como ya dije no me corresponde a mí decirlo.
—Eso haré— Murmura Adam un poco más animado —iré a hablar con ella. Muchas gracias, linda amiga.
Adam se pone de pie y sale de la habitación, dejándome completamente sola.
"Linda amiga"
Así me llamo el primer día que lo conocí en la universidad, un destello de tristeza se apodera de mi pecho. Ya han pasado varios meses desde que me trajeron a este castillo, estoy segura de que ya no podre retomar mis clases en la universidad este año, aunque desease.
Me pone bastante triste, porque realmente medicina es algo que me apasiona, realmente quiero un día llegar a ser una doctora.
Me pongo a pensar en lo normal que era mi vida hace unos meses, sin hombres lobo, ni maldiciones, ahora todo ha cambiado y no sé si para bien o para mal, solo tengo por seguro de que todo ha cambiado y ya nada será como antes.
—Qué cara más nostálgica tienes, hasta me han entrado ganas de llorar y todo— Puedo escuchar la voz de Aeron en algún lugar de la habitación, así que los busco con la mirada hasta ver junto a la ventana su figura.
