Hueningkai el chico asocial es cambiado de salón por problemas con una profesora, quedando así en la sección "B" donde conoce aquel chico extrovertido que lo hace actuar y sentir de una manera extraña
Sus ojos no dejaban de ver la pantalla de su teléfono, el nerviosismo corriendo todo su cuerpo, sus mejillas se habían calentado y su corazón no paraba de latir, luego de aver aceptado la propuesta de Soobin.
Estaba nervioso, ansioso, asustado, emocionado, tantas emociones que no sabía manejar. Pero es que esta vez era diferente ellos dos; solos, conversando y sin amigos que lo salven de pasar vergüenza.
¿Y si mejor no iba? Es una buena idea ¿verdad?.
Golpeo su frente con la palma de su mano, frustrado. Se levantó de su cama para ir a la cocina por algo de comer.
Hace una hora había llegado de la casa de su hyung, sus padres no estaban y no tenía mucho flojera como para cambiarse la ropa del colegio. Tomo la caja de jugo que hacia en el refrigerador y se sirvió en un vaso, tomo un poco de pan y fue hasta el sofá para comer a gusto.
Estaba debatiendo en pedir ayuda a Beomgyu, pero no quería molestar. Le dió un sorbo a su jugo y tomo su teléfono.
— ¿H-hola?— hablo luego de escuchar como descolgaban la llamada y una respiracion se dejaba escuchar.
— Hyung, ¿Pasa algo?— respondió Jungwon a través de la línea.
—¿Podrías ayudarme con algo?
♡
Minutos más tarde, Jungwon experimentaba con su cabello o así lo veía Kai. Que se sentía extrañó al llevar aquella ropa.
Hueningkai se consideraba alguien sencillo, vestía ropa holgada que le dieran comodidad y movilidad, tampoco vestía colores tan brillantes, su ropa variaba de blanco a gris y beige.
Así que era un tanto extraño llevar un pantalón ajustado a sus muslos. Llevaba un bonito suerte del mismo color con mangas de rayas blanco y negro algo ancho, cómo le gustaba.
— ¡Ya está!— finalizó, Jungwon con una sonrisa en su rostro, feliz por el resultado. Estaba entusiasmado y feliz de que su hyung le pidiera ayuda con su ropa, por qué iría a salir con alguien.
Su cabello estaba desordenado con hondas, pero realmente bonito. Sonrió tímido.
Esperaba que a Soobin le gustará su look.
— Gracias, wonnie— se giró hacia el menor, abrazándolo por los hombros— espero me vaya bien y no hechar lo a perder— murmuro, dándose aminos a si mismo.
♡
— Y.. ¿a dónde vamos?— pregunto tímido, caminando por las transitadas callates de seul.
Soobin había ido a su casa a buscarlo personalmente como todo un caballero. Su hyug vestía un pantalon de mezclilla, una camisa blanca y arriba de esta un buzo de color mostaza, que resaltaba su cabello negro y sus ojos brillantes. Muy diferente a el.
— es una sorpresa
Contesto simple. Luego de una rato un gigantesco centro comercial los recibió. Eran las seis de la tarde pero aún así había demasiada gente.
— ¿Un centro comercial? Vas a comprar ropa— pregunto algo confuso, Soobin rio de ternura por la inocencia del menor.
— aquí no solo se compra ropa, ningning.
Su mejillas enrojecieron sintiéndose tonto. Era comprensible no era un chico que salía constantemente no lo podía culpar por su ignorancia.
— Lo siento
— no te disculpes, bonito. Ven vamos por algo de comer— no dejo que respondiera. Solo tomo su mano y bajaron al área de comida.
Sentado en la mesa esperando por su hyung. Sus manos no dejaban de sudar. Estaba muy ansioso por el comportamiento de Soobin.
Normalmente es alguien muy hablador, que hace bromas y ríe de todo y que este callado lo tenía de los nervios.
Paso sus palmas por su pantalón al ver cómo Soobin llegaba a la mesa.
— ¡bien!— dejo las dos malteadas en la mesa y un par de donas y sentó— todavía tenemos tiempo así que ¿Que quieres hacer?
—Como no sé que vamos hacer, solo veamos las tiendas.
