Perdida en su mirada.

265 8 0
                                    


Perdida en su mirada.

El despertador sonó anunciando que eran las 6:00 a.m y con ello mi cuerpo cayó al suelo, como odiaba los lunes me repetía en mi mente, mientras me levantaba del suelo
para apagar el despertador, me acosté otra ves en la cama empece a cerrar los ojos y a volver a caer dormida, de pronto oí unos gritos y sí era mi dulce madre que decía: ¡por un demonio Tara Elizabeth Evans!

-¿dime por que diablos no estas cambiada?.- con un tono de voz muy elevado.

-hola mami, buenos días ¿que cómo amanecí? Pues bien ¿y tu?.- dije con sarcasmo.

-no te hagas la chistosa, y te bañas en 5 minutos, o si no no me vas a conocer niña.-frunció el ceño y de un golpe tiro la puerta abandonando la habitación.

Me levante de la cama por que efectivamente mi madre podría ser un dulce caramelo pero cuando se enoja, ahí si ay que llamar un exorcista.

*****

Salí del baño, ya vía secado mi cabello, busque en mi clóset y encontré un vestido color vino pegado ala cintura y de abajo era acampanado me quedaba muy corto pero me encantaba, me puse unas zapatillas negras y accesorios dorado, llevaba el cabello suelto me maquille un poco solo natural, agarre mi mochila y salí de la habitación, llegue a la cocina y vi que eran las 6:50 a.m y entraba alas 7:00 a.m agarre un manzana del frutero le di un beso a mamá para despedirme acompañado de un te quiero.

*****

Entre lo más rápido que pude eran las 7:03 a.m y consulte con la secretaria en que salón me tocaba... Salón "A" dijo ella con una amable sonrisa, demonios era el ultimo piso corrí corrí asta que a tan solo dos puertas de mi salón tropecé con alguien, lo mire a los ojos unos ojos color miel claros los más claros que e visto, el era guapo muy guapo me quede en shock y creo que por unos segundos el también luego me sonrió con unos blancos dientes y una vos muy seductora.

-lo lamento no me percate de tu presencia.- recogió unos papeles del suelo y le ayude pues claro.

-no importa, creo que iba tan apresurada que no te note.- ¿como diablos me atreví a hablarle? No lo se, ¿como rayos no lo note? tampoco lo se, solo se que en este instante todo no me importa mas que el.

El estaba de pie y yo estaba enfrente de su pantalón justo abajo de su cintura, me ofreció una mano para ayudarme a levantarme del piso, pero a quien le miento era una vista excelente, cuando estábamos cara a cara, bueno yo le llegaba al cuello, era alto y muy hermoso, estábamos frente a frente, el se presentó con una enorme sonrisa.

-hola, soy Isaac.- dijo con una sonrisa.

-me llamo Ta, Ta, Tara Eva, Evans.- Empece a tartamudear estaba muy nerviosa, el solo dio una ligera sonrisa.

-un gusto Tara, lamento despedirme pero tengo que ir a una clase.- dijo con una total indiferencia.

-no ay problema Isaac, también fue un gusto.

-asta pronto señorita Evans. La veré pronto.-dijo con una sonrisa de medio lado

¿Qué querrá decir por señorita Evans? Es muy joven para tratarnos con tanta formalidad, no se que es lo que quiso decir, ni se que paso estaba tan desconcertada, mientras estaba enfrente de el, el mundo no existía solo el y yo. tantas incógnitas en mi cabeza
se fue y lo único que se es que «quede perdida en su mirada».

Corto pero aquí esta :D lo hice con mucho amor, escribo toditos los jueves ok :) comenten me ayudaría mucho, sus opiniones son importante así que comenten, voten.

Matemáticas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora