Jamás adore tanto a una chica como ella, yo solo torcía mis alegrías, quería complicarlo todo, y ella solo evitaba que yo me hiciera eso, me encontraba persiguiéndola alrededor do toda esta vida que es como una montaña rusa, vimos y deseamos nuestra historia de amor sin fin, ella supo que no podía controlarme, jamás pensé que ella se acercaría a mi esa misma noche, cuando vimos nuestra vida en un sueño reflejada en una corona colgando, nos dimos ese último beso y de mi cabeza no podía sacarlo, no podía sacra la imagen de ella besando mis labios, de ella con sus brazos entrelazados a mi cuello, y de mi diciéndole "Este es nuestro último beso mientras somos demasiado jóvenes para morir", lo repetí varias veces, ella solo me respondió "Te aseguro que este no será nuestro último beso" me decía en forma de promesa que sabía no se haría realidad, no sabía si tenía una fijación o una psicosis, lo que si se podía saber era que se podía ver que era leal a mi pequeña neurosis que tenía, vi pasar mi vida, y también me vi envuelto en un sinfín de historias románticas de las que yo no formaba parte, ella jamás pudo conmigo, jamás supo cómo controlarme, lo que no sabía era que yo me controlaba solo con que ella me mirara o me dijera algo, ella no sabía el poder que tenía en mí, pero al besarla otra vez, se me vino a la cabeza esas palabras que le dije "Este es nuestro último beso mientras somos demasiado jóvenes para morir", pero lo que le dije pareció ser verdad y la vida dio un trágico curso, mientras ella me prometía mas besos y cariño que nunca nos pudimos dar, en sus ojos vi la muy deseada historia de amor interminable, la historia que yo quería darle...
