Hermosamente Doloroso

I

Me estaba diriguiendo hacia el 1° escuadrón por que el Capitan-comandante me mando a llamar, la verdad no sabía que quería pero debía presentarme lo más antes posible
Cuando llegue me recibió el Teniente del 1° escuadrón

—Hitsugaya-taicho el Capitán Yamamoto lo espera— dijo el teniente haciendo una reverencia a lo que yo asentí con la cabeza

Entre a la sala del Capitán-comandante y me sorprendí al ver a Kurosaki Ichigo shinigami sustituto

—Capitan-comandante para que me nesecitaba— hago una reverencia y lo miro

—Pues veras Hitsugaya-taicho, hay una misión que debe hacer con Kurosaki Ichigo y su equipo— empezó a hablar el Capitan-comandante —según me informaron hay una persona que trabaja con todo tipo de riatsu para crear un nuevo poder, necesito que usted se encargue junto con Kurosaki Ichigo— finalizo

—Esta bien Capitan-comandante, con su permiso nos retiramos— hice una reverencia de despedida y le indique a Kurosaki que me siga, la verdad no se cuanto tiempo soportaría estar cerca de el ya que me tuve que aguantar un inmenso dolor que proviene desde mi pecho y el ardor en mi garganta y las ganas de querer expulsar algo
Al salir Kurosaki solo me seguía a la residencia del 10° escuadrón, entramos hacía mi despacho, estaba tan concentrado en mis pensamientos y tratando de no soltar un quejido del dolor que provenía de mi pecho, que no me di cuenta que Kurosaki me estaba llamando

—Oe, Toshiro!—exclamo Kurosaki un poco más fuerte al ver que no reaccionaba

—um?, a si que paso Kurosaki?— lo miro serio

—Te quería preguntar si tenias un plan para empezar con todo esto, además estás bien? Pareces un poco perdido—me mira con leve preocupación, mi dolor en el pecho aumentaba más

—Le pediré un informe al Capitan-comandante con la información encontrada y ya con eso veremos en que lugar más o menos se sitúa este sujeto para ponernos en marcha cuanto antes— hablo neutro sin mirarlo— y respecto a tu pregunta Kurosaki, si estoy bien— doy un leve suspiro

—Esta bien, cualquier cosa avísame y yo le diré a los demás— dijo para luego irse, cuando Kurosaki desapareció de mi vista me apoye en la pared agarrándome el pecho, el dolor no disminuía y menos si se encontraba el cerca, agarre un pequeño frasco que guardaba en el traje de shinigami y saque una pastilla tomandola, esto va a hacer mucho más difícil de lo que pensé

Al día siguiente contacte con Kurosaki informándole que nos iríamos a la noche, ya tenía el informe con toda la información encontrada, el sujeto se encontraba a unos cuantos kilómetros de distancia de Ciudad Karakura, por que todos los problemas tenían que surgir cerca o en esa Ciudad y lo peor por que tenia que estar involucrado justo el, Kurosaki Ichigo, también por que me eligieron a mi para acompañarlos no podía ser el Teniente Abarai o algún otro Capitán, ¿por qué yo?, ¿por qué a mí?, desde ya se me hacia complicado retener el dolor en mi pecho que aumentaba cada vez más, y el ardor en mi garganta de querer lanzar algo, kurotsuchi-taicho creo unas pastillas con dosis fuertes para calmar el dolor fuerte que provenían de mi pecho y todo por estar cerca de Ichigo

-Flashback-

—Shiro-chan!! Estas bien!?— exclamo una preocupada Hinamori al ver que su amigo se agarraba el pecho tratando de disminuir el dolor

—s-si momo, tranquila estoy bien— le dio una sonrisa leve, y se agarro del brazo de su amiga para sostenerme

—no estas bien Shiro-chan!— aun preocupada Hinamori lo llevo a su habitación acostandolo en el futón, toshiro se retorcía de tanto dolor y tan solo fue por recordar la llegada de Kurosaki Ichigo a la sociedad de almas, no entendía por qué le empezó a doler demasiado

Paso una semana de lo ocurrido, solo le pasaba al pensar en Ichigo o al verlo, Hinamori estaba muy preocupada por su amigo por que no era normal eso así que decidió buscar libros de posibles enfermedades o algún tipo de información

Pasaron tres meses y aun no había resultados, la preocupación de Hinamori había disminuido un poco al saber que el dolor de su amigo había parado momentáneamente, pero aún seguía tratando de buscar información, tenía una idea de que podían ser problemas cardíacos, esa idea la asustaba

—Momo anda a tu residencia, yo estoy bien— dijo Toshiro entrando al gran salón con muchos libros e informes, era una biblioteca que tenía en su casa

—no Shiro-chan, te tengo que cuidarte por cual quier cosa, además no me iré hasta encontrar información de lo que te pasa— lo miro con el ceño fruncido

—Momo llevas buscando información hace tres meses y aun no has encontrado nada seguro me pasa por el estrés de tanto trabajo de Capitán, ahora anda a tu residencia Hinamori—dijo Toshiro con voz tranquila y cansada

—Esta bien Shiro-chan pero cualquier cosa me avisas— lo miro y le dio un abrazo de despedida, después de irse Toshiro se quedó viendo todos los libros y papeles que habían en un escritorio de la biblioteca, se acercó y empezó a ver de que se trataban, eran muchos libros y papeles de enfermedades, vio una hoja escrita que decía problemas cardíacos, estaba escrito con la letra de Hinamori, eso lo asusto nunca creyó tener problemas cardíacos, se sentó en la silla pensando en decirle a Unohana-taicho que le haga un estudio para sacar las dudas
Se levantó y se dirigió a una de las estanterías de la biblioteca en la categoría enfermedades, pociones y curas, agarro una escalera y empezó a buscar libros relacionados a los problemas cardíacos
Estuvo 2 horas buscando y no encontraba nada por lo visto todos los libros que hablaban de problemas cardíacos eran los que Hinamori había encontrado, cuando se dio por rendido se apoyo en la estantería y por la fuerza que puso hizo que la estantería se tambaleara un poco haciendo caer un libro
Toshiro dio un brinco del susto pero luego se calmo y agarro el libro, estaba viejo y con mucho polvo, lo sacudió un poco y leyó el título

Enfermedades
extrañas y sin cura

A Toshiro le pareció interesarle y decidió llevarlo a su habitación para leerlo, ya era muy tarde aproximadamente más de las 00:00 de la noche se sentó en su futón y empezó a leer un poco habían todo tipo de enfermedades sin cura, le intereso tanto que no se dio cuenta que era muy tarde y dejó el libro a un lado y se dispuso a dormir, ya mañana iría con Unohana-taicho para hacerse unos estudios