Capítulo #5

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La montaña rusa era enorme, a 75 metros de altura -o al menos eso era lo que los chicos que trabajaban ahí nos decían- eran 6 filas de 2 asientos cada una, el chico que trabajaba ahí nos abrochó los cinturones y poco a poco se acercaba la hora en que esta máquina arrancara.

-¿Estas nerviosa? -dijo Chris con una enorme sonrisa.

-Un poco -contesté.

Y es entonces cuando la atracción mecánica empieza su trayecto.
Al principio subiamos; en mi estómago se sentía un vació y mi boca poco a poco se empezaba a secar, llegamos al tope y de golpe bajamos con agresividad.
Involuntariamente apreté la mano de Chris en señal de mi notorio nerviosismo.
Gritos, risas y llantos se escuchaban a mis espaldas -Chris y yo nos sentamos en el primer lugar- yo solo gritaba por la emoción y nervios que se revolvían en aquel largo trayecto, Hemsworth me miraba riendo.

***

Nos encaminamos a la fuente de sodas por comida, ya eran las 2:30 de la tarde.

-¿Qué quieres comer? -dijo el mientras veíamos los menús de comida.

-Creo que una hamburguesa -dije ojeándo el menú.

-Yo también -decidió.

El es mi mejor amigo siempre le he tenido mucha confianza, es decir no importa si como en exceso el no se fija en eso, podría comerme el restaurant entero y el no me criticaría, al contrario me ayudaría.
Pedimos y seguimos platicando.

-____, tengo que pedirte algo -dijo dandole un trago a su refresco.

-¿Qué pasa? -pregunté para después darle una mordida a mi hamburguesa.

-El Viernes en la noche, el buffet de abogados tendrá una cena muy importante y no tengo pareja para ir -dijo rascándose la nuca -¿Me acompañarías? -preguntó -Será formal.

-Claro, el Viernes no tengo nada que hacer -asentí sin darle importancia.

Obviamente le iba a decir que si, es mi amigo pero lo siento como algo mas, sinceramente esta cercanía me esta gustando y no para una sincera amistad.
Seguimos un rato subiendo y bajando de distintas atracciones hasta que llegó a hora de irnos, me la había pasado genial.

-Ya es hora de irnos -dije mirando sus ojoz azules.

-Pues vamonos -contestó.

Salimos de aquel lugar y nos dirigimos a mi departamento. Llegamos.

-Gracias por este día -dije sonriendo bajo el umbral de la puerta.

-De nada, fue un gusto -dijo con sus manos en las bolsas de sus jeans.

-Buenas noches -dije para después darle un beso en la mejilla.

Me abrazó y se fue de mi vista.

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⏰ Última actualización: May 21, 2015 ⏰

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