UNHOLY [𝑩𝑹𝑰𝑮𝑯𝑻𝑾𝑰𝑵]

𝑩𝒓𝒊𝒈𝒉𝒕

No sabe cuándo fue que comenzó a tener una doble vida.

Tal vez fue después de que su madre los abandonará.

Tal vez fue durante la adolescencia, cuando los malditos cambios llegarón.

O tal vez cuando su padre pasaba la mayor parte del tiempo borracho como para prestarle algo de atención.

Bright no lo sabe con exactitud, pero ahora tiene una doble vida.

Para su padre, profesores y vecinos es el chico más amable y tranquilo que pueda existir.

Es educado y siempre está dispuesto a ayudar a los demás, nunca se ha metido en problemas y la mayor parte del tiempo la pasa en su habitación estudiando. O al menos eso es lo que les ha hecho creer durante todos estos años.

La verdad es que es un hijo de puta.

Bright comenzó a serlo a una edad muy temprana, alrededor de los 13 años. Aún no sabe por qué, tal vez es algo genético.

Pero recuerda que cuando su padre se quedaba desplomado en el sofá con una botella de alcohol en la mano, esculcaba los bolsillos del hombre y robaba el dinero que encontraba, para después tomar la botella con cuidado y beber lo que quedaba de ella.

Tiempo después Bright se unió a una pandilla y fue así como conoció el cigarro y las drogas, el vandalismo y las peleas callejeras.

Recuerda que solía ser un niño débil, lloraba demasiado y su madre siempre se quejaba de eso.

"Por dios, cierra la boca" le gritaba molesta.

Bright dejó de llorar y se prometió que nunca volvería a hacerlo.

Creo una coraza y juró  que no dejaría que nada ni nadie volvería a lastimarlo.

Comenzó a practicar box y se ganó el respeto y temor de las personas al vencer a grandes y temidos oponentes.

Se aseguró de que las personas de la pequeña ciudad dónde vivía supieran sobre él  y que es algo erroneo meterse con él.

A sus 20 años ha ganado fama y la admiración de algunos chicos que quieren ser igual de fuertes y temidos que él.

Pero también se ha ganado algunos enemigos que están cansados de su actitud soberbía y que quieren deshacerse de él.

No es algo que lo tenga preocupado, sabe que no será fácil que le quiten su título.

Él negocio va demasiado bien. Siempre sale triunfante en las peleas y gana grandes sumas de dinero.

Su padre no tiene la menor idea de lo que sucede con su vida y lo que en realidad hace por las noches.

En la escuela le va malditamente bien, tiene las mejores notas, aunque recurre a medidas violentas para que sus compañeros le pasen las tareas y lo dejen copiar en los éxamenes.

Bright estaba viviendo su mejor momento.

Por fin tenía lo que siempre soñó.

Fama.

Dinero.

Respeto.

Y a cualquier persona que llamaba su atención.

Bright estaba viviendo su mejor momento, hasta que su padre le dió aquella maldita noticia.

"Nos mudamos" le dijo su padre emocionado.

La expresión de Bright se pusó en blanco. No entendía lo que su padre estaba diciéndo.

"¿Qué sucede? ¿No te emociona saber que por fin  nos iremos de este lugar?".

Bright fijó su mirada en el suelo y se mordió los labios en un intento por no gritarle furioso a su padre.

"¿Por qué?" preguntó intentando sonar tranquilo.

"He conocido a una mujer" dijo su padre tímidamente.

Bright se tensó. Tenía que ser una broma, su padre no podía estar hablando en serio.

"Sé que extrañas a tú madre, pero han pasado demasiados años. Yo también tengo derecho a ser feliz" comentó su padre vacilante y luego suspiro pesadamente.

Bright apretó los puños sintiendo el enojo crecer en su pecho.

Su padre no podía arruinar su vida por un estúpido enamoramiento.

"Ella es una buena mujer, estoy seguro de que la amarás" espetó el hombre.

Bright estuvó a punto de gritarle furioso a su padre y decirle lo patético que sonaba diciendo todo eso, sin embargo, éste agregó "Tiene un hijo, es menor que tú por un par de años, pero estoy seguro que se llevarán genial".

Eso fue suficiente para no explotar contra su padre cómo todos estos años ha querido hacerlo.

La curiosidad lo invadió "¿Oh? ¿de verdad? Siempre quisé tener un hermano. Creo que será emocionante".

Su padre suspiró aliviado al ver su reacción. "Se llevarán muy bien, serán grandes amigos. Seremos una gran familia ya lo verás".

Bright sonrío ampliamente mientras imaginaba cómo sería aquel chico. Y se relamió los labios al pensar en lo mucho que se divertiría con él.

¿Se llevarían bien? No lo sabía y para ser sincero tampoco le importaba.

En lo único que pensaba era en que si iba a mudarse a una nueva ciudad, sería genial tener a alguien con quien distraerse.

Claro, no sería solamente con él. A Bright nunca le ha gustado ser exclusivamente de alguien, pero tener a alguien en casa con quien poder divertirse será sin duda algo interesante.

｡★─☆｡oﾟ｡

Cuando entró a aquel lugar Bright nunca imaginó que volvería a ver a ese molesto chico de la noche anterior.

Además, aquel chico ha visto su otra faceta y si dice algo sobre eso estará un poco jodido.

Mierda, no solamente tendrá que soportarlo, si no que también tendrá que encargarse de que no diga nada.